HUMANIDADES 101 ÁFRICA

HUMANIDADES 101

Preguntas para unidad de África:

Loíza es la herencia puertorriqueña y antes se llamaba Loiza Aldea. El pueblo de Loiza tiene una historia pivote para su identidad nacional. Sirvió de refugio a cientos de africanos y marrones que escaparon de las cercanas colonias inglesas. Gozaban de una dispensa que los convertía en ciudadanos libres a cambio de servir de soldados en defensa de la isla en caso de ataques. También se escondían esclavos locales que huían del carimbo, del maltrato y del trabajo forzado. La mezcla de la cultura negra con la blanca y la taína forman parte indisoluble de “nuestra” etnia (digo nuestra porque de tanto que amo a esta isla y me identifico con los habitantes, me siento un boricua), historia y identidad. Venían principalmente del África Occidental, Senegal, Gambia, Sierra Leona, Nigeria, Angola, Mozambique y Sudán. Algunas de las primeras rebeliones de los esclavos comenzaron en Puerto Rico, los africanos de la isla deberían llevar consigo una libreta para transitar por la isla. En Puerto Rico todavía se puede encontrar grandes comunidades de descendientes de las distintas naciones africanas. “ÁFRICA ES LA CUNA GENÉTICA DE NUESTRA ESPECIE” – Sonia Cabanillas.

A la época precolonial corresponde al Yihad o la serie de invasiones religiosas, políticas, y étnicas de los árabes musulmanes que comienza con la conquista de Egipto, entre el año 639 al 641 de nuestra era y que dividirá el África en sus 2 grandes zonas, el África norte y el África Subsahariana. En general la sociedad africana es patriarcal/matrinileal lo que la hace sui generis (original), no se parece a ningún otro modelo social. Es patriarcal porque el poder político los ostenta los hombres pero el linaje viene siempre por línea maternal, no paterna. África está organizada en naciones tribales que a su vez se compone de clases familiares. Un dirigente tiene como figura paterna el hermano de la madre y su nombre de pila es el nombre del clan al que pertenece. Nosotros, que valoramos el individualismo sobre todas las cosas, tachamos de primitivos un pueblo en el que no existen los nombres propios.

África es el continente negro, no solo por el color de la piel de sus habitantes sino también por sus misteriosas junglas y peligrosos parajes donde rugen los leones, chillan las hienas y rodean los elefantes. En nuestro imaginario África también es un territorio sub desarrollado, repleto de enfermedades mortíferas, tales como la malaria y el SIDA, de países violentos y corruptos que siembran más terror que justicia, cosechan más hambre que alimentos, riegan su suelo con la sangre de víctimas inocentes. Para nosotros África representa el espacio del noble salvaje, de la naturaleza prístina, de la constante miseria e ignorancia. El principal prejuicio para mí es que la historia de África ha sido escrita por los blancos, eso corresponde a unos intereses de dominios muy parcializados. El énfasis en África es en el de una sociedad agraria ajena al concepto de propiedad privada.

Axum, el gran imperio abisinio hacia el 350 antes de la era común, de esta tierra se oriunda la grande reina de Saba, desarrolló un gran imperio naval que persistió desde el siglo quinto antes de la era común al décimo de nuestra era. Su posición geográfica la colocaba en un cruce de caminos entre África, Arabia y la India, con una importante industria de hierro y acero. Fue cristianizada, ellos afirman que fueran el primer pueblo cristiano y convirtió en un centro religioso que rivalizaba con el “pizantino”. Los abisinios alegaban bajo un templo protegido por sus fieles, se aloja el arca de la alianza, el monumento más sagrado de los judíos que encierra en una caja de madera de acacia negra recubierta de oro. Las tablas que Jehová le diera a Moisés con los 10 mandamientos. Axum por estar próximo al Kemet también cayeron bajo la influencia del imperio islámico. En la gran civilización de Kush, revelan asentamientos continuos desde hace más de 60 mil años y una cultura rica en materia prima como el oro, marfil, cobre, incienso y corneliana (una piedra muy apreciada por su intenso color rojo) lo que la convertía en destino para el intercambio comercial y apetecible como territorio de conquista. Estuvo bajo el dominio de Kemet hasta que este comenzó a debilitarse y entonces se independiza fundando una gran ciudad, la Pata en el siglo ocho antes de la era común. En el siglo siete antes de la era común llega a conquistar y unificar Egipto, fundando la dinastía vigésimo quinta. El refortalecimiento y las nuevas invasiones egipcias los fuerza a encogerse y mudan su capital más para el sur en el 590 antes de la era común. Las fuerzas del cristianismo y luego del islán, impactaron el territorio transformando su vibrante cultura.

Existe una diferencia marcada entre la composición racial, la historia política y la cultura del norte de África. El desierto de Sahara sirve de barrera natural y divide el continente en estas 2 grandes regiones. El norte de África por su proximidad al Mediterráneo fue invadido, ocupado y colonizado por pueblos de orígenes diversos. En el siglo octavo antes de la era común los fenicios fundaron Cartago, la mítica ciudad rival de Roma, destruida en la tercera guerra pública por fuerzas imperiales romanas. Los romanos la convirtieron en colonia en el siglo primero antes de la era común. Los griegos fundaron ahí colonias, desparramado por el mediterráneo viviendo al decir de Sócrates “como ranas alrededor del charco”. En el siglo siete llegaron los árabes, quienes se apropiaron de toda la costa marítima y se establecieron ahí con una serie encarnizados Yihad, una extensión del imperio islámico con grandes ciudades en Marruecosm Tánger y Túnez. También empurraron hacia la región subsahariana las tribus endémicas que rozaron convertirse al Islán, así existen 2 Áfricas aún en el presente, la cobriza y la negra. Aunque la organización tribal nomádica prevaleció en el África subsahariana, hasta aproximadamente en el 200 antes de la era común, esto no quiere decir que viviera a nivel de subsistencia. El desarrollo de la metalúrgica es significativo de conocimientos científicos avanzados, hacia el 1400 antes de la era común ya se producía en África oriental el acero. Estos conocimientos tomaron un tiempo en difundirse a través de todo el continente. Según Catherine Cloquery Vidrovitch, “el África subsahariana tiene una economía patriarcal y el control exclusivo de un grupo étnico sobre el intercambio comercial dentro de un vasto territorio”. Lo que implica en que la sociedad africana tiene una estructura patriarcal dominada por ciertas tribus/naciones pero sin una centralización administrativa.

La cultura endémica africana es amplia, rica y diversa. Ostenta unas características generales fundamentales, su religión predominantemente animista que le atribuye vida a cosas que nuestra cultura piensa muertas. Se eleva desde un panteón politeísta y numerosas deidades semidivinas gobernadas por un Dios principal todopoderoso. A esto se le añade la adoración y honra de los ancestros. La cultura del sacrificio de seres vivos, ya sea animales o humanos. En un intercambio de vitalidad por el poder para asegurar el favor de los dioses y la protección personal o grupal, la práctica del rito de inicialización, tanto de varones como de niñas como forma transicional del mundo infantil al adulto y de numerosos rituales que los llevan desde el nacimiento a la muerte. A esto se le añade el uso de máscaras y de vestimentas para las ceremonias sagradas. La mediación del “chamán” y los bailes comunales que se pueden extender por días, como en el caso de los “dragones” o los “fulanis”. La estructura social de esta África originaria, es del patriarcado con herencia matrilineal. África tiene una fuerte tradición monárquica pero la línea de descendencia es materna, no paterna.

El imaginario del África negra gira a la centralidad del rey, quien es fundamental en el orden cósmico transcendental. El rey tiene una función específica, un rol específico, debe ser él quien posee la mayor fuerza vital en su reino. Solo así puede él servir de mediador al ser sacrosanto con el universo superior y evitar la creación de una grieta, una conmoción dentro de las fuerzas que sostiene lo creado.

La nacion de los bantú fue responsable a través de sus rutas comerciales, sus migraciones y el uso de su idioma como la lengua franca de dispersar saberes a través de tierras ajenas. No solo le ensenaron a los pueblos distantes los secretos de aleaciones de metales, también difundieron técnicas agrícolas de productos de alto rendimiento. El plátano, la batata y el guineo se convirtieron, gracias a los bantús en la base de la dieta en muchas regiones. Fueron los bantús quienes fundaron hacia el 1300 la mítica Gran Zimbabwe en el sureste de África.

Zimbabwe significa ciudad amurallada y fue jefe de una vergonzosa controversia. Una región prospera con centro en la ciudad de Sofala, que a partir a partir del 1100 de nuestra era sirvió de enlace de las rutas comerciales y la influencia cultural entre China, Persia y la India. Entre los siglos catorce al dieciséis este fue el centro de gran poder bajo el mando de reyes sacerdotes. Cuando las ruinas fueron encontradas por Karl Mauch en 1871, este afirmó con arrogancia: “No creo equivocarme cuando sostengo que las ruinas en las colinas son una copia del templo de Salomón en el monte Moriach, y que los edificios en el valle son reproducciones del palacio en el que la reina de Saba vivió durante su estadía con Salomón. Solo un pueblo civilizado blanco pudo vivir aquí”. El conquistador de Suráfrica fue responsable de ocultar evidencia que establecía

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