Historia Del Ocio

RECUENTO HISTÓRICO SOBRE EL TRABAJO Y EL TIEMPO LIBRE

A lo largo del tiempo el ocio ha sido parte de las diferentes culturas y épocas haciendo parte del entretenimiento, pero el trabajo ha hecho que algunas de estas sociedades restrinjan a las clases más bajas la posibilidad de disfrutar el derecho al tiempo libre.

Empezaremos definiendo los términos de trabajo y ocio. El termino ocio etimológicamente proviene del latín otium, que significa reposo. Según el Diccionario de la Real Academia Española, ocio es el tiempo libre, fuera de las obligaciones y ocupaciones habituales. Etimológicamente la palabra trabajo tiene su origen en el término latino tripalium, que significa un instrumento de tortura. Esa noción es recurrente, sobretodo, en las tradiciones griega y judío-cristiana, que entendían y designaban al trabajo como una actividad penosa y obligatoria, vista incluso como un castigo para el ser humano.

La Antigua Grecia

Skholé significa parar o cesar, la Skholé no era un sinónimo de no hacer nada, sino la posibilidad de gozar de un estado de paz y contemplación creadora (dedicada a la teoría, saber máximo entre los griegos) en que se sumía el espíritu. La disposición de este tiempo fue posible gracias a la estratificación social de los helenos, la clase aristocrática era la privilegiada, luego los declarados ciudadanos pero los esclavos no podían disfrutar de estos beneficios ya que no eran considerados ciudadanos. Esto tiene como consecuencia más inmediata que si según la teoría griega sólo el hombre que posee ocio es libre, esto es posible porque sólo el hombre libre puede poseer ocio, negando la posibilidad a los llamados esclavos. Las fiestas de Atenas, se realizaban por motivos cívicos y religiosos, eran muy numerosas y especiales, en la década de 430 a. C., esos días festivos podían rondar los 120 por año. Todas las fiestas contribuían a exaltar tanto los sentimientos religiosos como el patriotismo, la fe en los dioses y el orgullo nacional.

Roma

El ocio consiste en no trabajar, en un tiempo libre de trabajo, que se da después del trabajo y para volver a éste. El ocio es tiempo de ociosidad, sino de descanso y de recreo tanto como de meditación. La novedad en la concepción romana del ocio, consiste en la introducción del ocio de masas. Con ocio para el gran público de desocupación y de diversión que permitía un más fácil “control” de la gente, los nobles y plebeyos eran dignos de disfrutar del tiempo .Los esclavos eran obligados a servir o hacer participes de las luchas de gladiadores, esto ponía en juego su libertad. Los lugares más visitados eran el circo, el coliseo, los balnearios y los termales. Frente al concepto de otium como inactividad se opone el nec-otium como símil de trabajo, y se convierte en nuestros actuales términos de ocio y negocio.

Edad Media y Renacimiento

El tipo de ocio que surge en esta época está inspirado en un espíritu lúdico. Consiste en la abstención de trabajo y en la dedicación de actividades elegidas libremente tales como la guerra, la política, el deporte, la ciencia o la religión. En la Edad Media la clasificación social se establecía de acuerdo a las actividades realizadas. En el nivel superior se encontraban los señores feudales, libre de la necesidad de trabajar ya que controlaba la agricultura y casi todas las formas de producción, luego venía el clero, con diferentes características frente al ocio y al trabajo: por una parte se encontraban los dignatarios de la Iglesia, que disputaban a los caballeros privilegiados y gozaban de todos los privilegios y honores, mientras que en el otro extremo se encontraba el monje que vivía en austeridad y sacrificio. El nivel inferior estaba formado por la clase campesina para quienes el trabajo y el ocio estaban regidos por los ciclos de la naturaleza y la Iglesia. La duración de la jornada de trabajo variaba según las estaciones y el tipo de tarea que se realizaba, siempre teniendo en cuenta la duración

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