IBEROS Y CELTAS RESUMEN

IBEROS

ORIGEN Y CRONOLOGÍA: no eran un grupo étnico homogéneo ya que divergían en muchos aspectos. No se sabe detalladamente el origen de los iberos, porque los íberos surgieron en España, sin proceder de ningún lugar extranjero.

La cultura íbera se desarrolla desde el siglo VII a.C. hasta el siglo I a.C. coincidiendo con el final de la conquista romana de la Península Ibérica durante la época del emperador Augusto (31 a.C. a 14 d.C.), aunque su extinción definitiva se desconoce debido a que seguramente perduran en zonas lejanas a las ciudades durante algún tiempo más.

LOCALIZACIÓN: Levante, sur de la península ibérica y suroeste de Francia. Los yacimientos mejor conocidos son los poblados de Ullastret al norte de la actual provincia de Gerona, el de Covalta en Albaida (Valencia), el de Cabezo de Alcalá en Azaila (Teruel) o el poblado de Osuna en Sevilla.

ORG. SOCIAL: sociedad íbera es desigual, está muy jerarquizada y se articula sobre tres grupos sociales principales. En la cúspide se encuentran los reyes o aristócratas, según el periodo, luego los clientes y por último los esclavos.

ORG. ECONÓMICA: Su economía se fundamentaba en el cultivo de cereales, vid y olivo con una ganadería complementaria. En las zonas costeras existía un importante mercado de metales (provenientes de las zonas mineras de Almería y Cartagena) con los pueblos colonizadores que tenían el mismo sistema monetario. Existía ya la propiedad privada.

CULTURA: Realizaban ganadería, pesca y agricultura. El grupo más conocido es el de los guerreros, de alta consideración social, por lo que se trataba de una sociedad muy militarizada, aunque también realizaban esculturas, pinturas y cerámicas de todo tipo.

Sus creencias más primitivas se centraban en la adoración de elementos naturales (cuevas, manantiales, cerros) en los que ofrecían sacrificios, exvotos y otros productos a seres suprahumanos, monstruos alados y animales que eran símbolos sagrados relacionados con los ritos funerarios. Las influencias de fenicios y griegos aportaron nuevas divinidades con clara inspiración oriental.

DECADENCIA: El desarrollo de la guerra afectó de una forma decisiva a los pueblos íberos. A la victoria romana se sucedió un periodo de levantamientos indígenas, aplastados sin miramientos por las nuevas autoridades. Esta política represiva provocó el abandono de numerosos asentamientos íberos y la disolución de las estructuras políticas de gran cantidad de territorios. Después de conquistar Gadir, desde finales del siglo III a.C. y durante aproximadamente los siguientes cincuenta años, la presencia romana en suelo íbero quedó restringida casi en su totalidad, ya partir de la segunda mitad del siglo II a.C., comenzó un proceso de reorganización del territorio conquistado que originó la fundación o refundación de ciudades, de las que Valencia será el primer ejemplo en el año 138 a.C. A esto se unió la llegada de bastante población de origen itálico, la creación de una nueva red de vías de comunicación y la expansión de asentamientos rurales. Este proceso de desarticulación del mundo íbero continuará a lo largo del siglo I a.C. con la progresiva adopción de los modos de vida, idioma e incluso el aspecto exterior romano.

CELTAS

ORIGEN Y CRONOLOGÍA: Los celtas poblaron por Galicia en el año 700 a.C. aproximadamente. celtas forman parte de los grupos indoeuropeos. Se piensa que parte de los hablantes de esta familia lingüística, procedentes de Anatolia o de las estepas entre el mar Negro y el mar Caspio, emigraron rumbo a Europa, mientras otras ramas se desplazaron hacia Irán y la India.

LOCALIZACIÓN: celtas se expandieron ocupando las islas Británicas, parte de la Península Ibérica o el norte de Italia, absorbiendo a los pueblos

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