LA CRISIS PETROLERA

LA NUEVA CRISIS

La dependencia petrolera en el gobierno de López Portillo predeciblemente llevó a México a una nueva crisis económica (de la deuda externa), llamada así porque más de 30 países cayeron en ella. Esto debido a muchos factores, de los cuales los más importantes son:

1.- Disminución internacional de la demanda del petróleo.

2.- Baja el precio internacional del petróleo.

3.- Baja del precio de la plata, café y algodón.

A lo anterior, se le suman varios factores:

 Una fuga creciente de capitales, la cuál fue uno de los problemas más importantes, ya que era creciente y no se sabía cuándo cesaría.

 Las tasas de inflación de México y Estados Unidos tenían enormes diferencias (se sobrevalua el peso), encareciendo los artículos fronterizos y haciendo más baratos los nuestros.

La necedad de el gobierno de esa época mantuvo firme su propósito de lograr el crecimiento en el sector petrolero, incluso durante la crisis, se logró incrementar la producción del combustible en 19% respecto al año anterior y la producción del petróleo aumentó un 70%, esto sólo llevó a México a sobreexplotar sus recursos, ya que lo ofrecía a los precios más bajos del mercado, con un bajo margen de ganancia

En el informe presidencial de 1982 López Portillo acepta la crisis y da el siguiente comunicado:

…Reducir al mínimo la acción pública sacrificándola al concepto de equilibrio pasivo de las finanzas públicas. Lo anterior afectaría principalmente los servicios de salud, educación y combate a la marginación, entre otros, los subsidios a los alimentos básicos al transporte colectivo urbano.

Este comunicado es una burla para el pueblo, ya que todos sufrieron las consecuencias de las malas decisiones de López Portillo, de que su economía y el crecimiento del país se basara en un producto de difícil extracción y no renovable como lo es el petróleo.

Comparemos el anterior comunicado con su primer informe de gobierno en 1976:

Nuestra obligación es optimizar el aprovechamiento de este recurso (el petróleo) de la manera más equilibrada; será la estructura fundamental del país de aquí al año 2000: es decir, el petróleo se convertía en “pivote del crecimiento de la economía mexicana.

Esto ya forma parte de la cotidianidad en México, empiezan con un discurso motivador y al final del sexenio muestran los verdaderos resultados, que la mayoría de las veces son desalentadores, las contradicciones de Portillo nos llevaron a una de las crisis más importantes de la época contemporánea.

Consecuencias:

Esta crisis que colapso la economía mexicana provocó:

1.-Una devaluación del 400% al pasar el dólar de 22 a 70 pesos.

2.- Un PIB que no alcanza ni siquiera el doble de la deuda externa (nótese que en años pasados esta relación era de 3 a 1, y en ocasiones de 4.5 a 1) esto se traduce que, de cada peso, 36 centavos eran destinados al pago de la deuda pública.

3.- Se triplicaron los impuestos (entre 1979 y 1982 las entidades federativas y ayuntamientos aumentaron sus participaciones de 47000 a 152000 millones de pesos)

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