La Crisis Escolar

Crisis y revolución escolar*

Hace algunos años en el mundo se levantan una crisis de la educación y de la escuela. La escuela tradicional fue puesta en duda por los movimientos de la escuela activa; fue una crisis honda, que hizo girar muchos grados el centro de la institución escolar, desde el maestro hacia el alumno. La tecnología es un fenómeno de la cultura contemporánea; y no ha sido la escuela el primer lugar donde ha arribado esta forma nueva de hacer. La escuela no es la trasmisora de acervo cultural, superviviente durante lustros en el titulado, porque la aceleración histórica modifica lo aprendido y exigen nuevas soluciones a problemas nuevos.

La enseñanza humanística que dominaban los planes de estudio y las facultades han sido sustituidas por las enseñanzas tecnológicas más inmediatas y con menos sentido.

*La escuela contestada*

La crisis es que no obstante la inaplazable reforma, susbista en su esencia; que continué enseñando y socializando. Esta crisis de la institución escolar es solo reflejo de otras crisis más profundas en la sociedad.

Fue Edmond Gillard quien en la década de los sesenta se opuso a la simple reforma escolar, yendo más allá, hasta pedir la desaparición de la misma institución educativa.

El único recelo contra la abierta defensa de la abolición de la escuela estriba en el otorgamiento de títulos en los centros occidentales, los cuales acreditan los saberes, aunque de hecho no se poseen. Los centros escolares además de funciones docentes, hacen funciones de control, expiden títulos y garantizan un mínimo de oficial contacto con los adultos formadores.

Los historiadores de la educación citan en el año 1597 como el primero en el que se creó la primera escuela pública popular; las cortes de Navarra crean la escuela obligatoria en 1795; Locke defendió en pleno siglo XVII el preceptor particular como remedio de la ignorancia y repudio la escuela, tal y como fue la frecuentada por él, convencido de que acarreaba más prejuicios que beneficios.

La educación se suman a esta prospectiva escolar y creen que la sociedad postindustrial no necesitara de la escuela, al menos tal y como la concebimos hoy.

*Iván Illich y su medio*

Iván Illich nación en 1926 en Viena según unos, o en Yugoslavia según otros; semita en su ascendencia materna, hizo sus estudios secundarios en Viena y Florencia, tras los cuales curso filosofía y teología en la Universidad Gregoriana de Roma y se doctoro en Salzburgo.

Su espíritu revolucionario se manifestó en la contestación a la institución eclesiástica establecida en Hispanoamérica, donde la clase dirigente de la Iglesia pertenecía o está envuelta en la clase política y social más elevada, constituyendo así un entorpecimiento para el progreso social.

Las instituciones

...