Oncenio de Leguía (1919-1930)

El periodo del Oncenio de Leguía (1919-1930) es una de las etapas más controversiales en la historia política y económica del Perú. Muchos consideran que esta época representa la continuación de la República Aristocrática (1895-1919), que se caracterizó por ser una época de exclusión y desigualdad social. Sin embargo, otros argumentan que el Oncenio de Leguía trajo consigo cambios significativos que permitieron el desarrollo económico y político del país. En este ensayo, se analizará si el periodo del Oncenio de Leguía es la continuación de la República Aristocrática.

Para entender el contexto histórico de la época, es importante mencionar que la República Aristocrática fue un periodo en el que el poder estaba concentrado en una élite económica y política. Durante esta época, la población indígena y mestiza fue excluida del poder y marginada socialmente. Según Barreda (2014), la República Aristocrática fue un periodo caracterizado por la "exclusión social y la represión política".

El Oncenio de Leguía, por su parte, se caracterizó por ser una época de modernización y desarrollo económico. Según Malpartida (2012), durante el Oncenio de Leguía se construyeron importantes obras de infraestructura, se implementaron políticas económicas orientadas al crecimiento y se promovió la inversión extranjera. Estos cambios permitieron el desarrollo de la industria y la modernización del país.

Sin embargo, estos avances no se dieron de forma equitativa para toda la población. Según Mendoza (2015), durante el Oncenio de Leguía se mantuvieron prácticas de exclusión social y política que caracterizaron la República Aristocrática. La población indígena y mestiza continuó siendo marginada y no se implementaron políticas sociales que permitieran su inclusión.

En conclusión, aunque el Oncenio de Leguía trajo consigo cambios significativos en la política y economía del país, estos no fueron suficientes para superar la exclusión y desigualdad social que caracterizó la República Aristocrática. El periodo del Oncenio de Leguía puede ser considerado como una continuación de la República Aristocrática en términos de exclusión social y política. Es necesario, por tanto, analizar críticamente ambos periodos para entender la complejidad de la historia política y económica del Perú.

En cuanto a la República Aristocrática, es importante mencionar que esta época estuvo marcada por la exclusión social y la marginación de la población indígena y mestiza. Esta población fue excluida del poder político y económico, lo que generó una desigualdad social importante en el país. La élite económica y política concentró el poder, perpetuando la exclusión y la desigualdad en la sociedad peruana. Según Barreda (2014), la República Aristocrática fue un periodo en el que la población indígena y mestiza fue sometida a la represión política. Los líderes políticos de esta época reprimieron las protestas y manifestaciones de esta población, con el objetivo de mantener su poder y control sobre el país. Además, se implementaron políticas económicas que beneficiaron únicamente a la élite, dejando a la mayoría de la población marginada.

Por otro lado, durante el Oncenio de Leguía se implementaron políticas económicas orientadas al crecimiento y desarrollo del país. El gobierno de Leguía buscó modernizar la economía peruana, a través de la construcción de infraestructura y la promoción de la inversión extranjera. Estos cambios permitieron el desarrollo de la industria y el comercio, y tuvieron un impacto significativo en la economía del país. Según Malpartida (2012), el gobierno de Leguía promovió políticas de libre comercio y atrajo a empresas extranjeras para invertir en el país. Esto permitió el desarrollo de la industria, especialmente en el sector textil y minero, y generó empleo para la población. Además, se construyeron importantes obras de infraestructura, como carreteras, puentes y edificios públicos, que mejoraron la calidad de vida de los peruanos.

...