Piratas, corsarios y bucaneros.
Dakota MorrisonSíntesis9 de Abril de 2016
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La piratería en el siglo XVI y XVII
Introducción
Con el descubrimiento de nuevas tierras como las Américas, el “Nuevo Mundo” abrió el camino para que conquistadores españoles y portugueses quienes ganosos de obtener fama y riqueza, se aventuraran en conseguir lo que deseaban, pero no lo tenían tan fácil éstos navegantes ávidos de conquistas y nuevas aventuras, ya que no solo se necesitaba zarpar un barco y convoyarlo hacia las novedosas tierras de América para explotar todo lo que había a su alcance, había que tener algo más: valor, audacia y ambición, solo con eso lo lograrían. Los venecianos y genoveses eran los intermediarios hasta que los genoveses fueron desplazados; después junto con Portugal y España participaron en esas exploraciones para abrir el comercio de España con Asia, y buscar primordialmente, la famosa ruta de las especias en las indias orientales. Ya Colón y Vasco de Gama lo habían hecho unos años antes, marcando el rumbo de los próximos navegantes que como exploradores, comerciantes o hasta los piratas, esos ladrones del mar que serán tema principal de este escrito. Se hablará de aquellos hombres que saqueaban grandes navíos mercantes en alta mar, que sin duda, dejarían su huella en la historia moderna sin precedentes, puesto por desgracia, la piratería sigue vigente en la actualidad.
En el siglo XVI la madre patria era la potencia mundial, siendo la pionera en aventurarse a descubrir, explotar y abastecerse de aquel rico continente americano con lo cual le dio todo el poderío para ser una súper potencia mundial en ese siglo, ya que poseía prácticamente todo el continente americano y las riquezas de esas tierras tropicales le pertenecían legítimamente.
Durante siglos, los europeos habían asimilado y mejorado varios de los inventos que provenían de Asia, estos conocimientos y otros factores ayudaron a que se dieran estas exploraciones europeas; España y Portugal, obtuvieron las islas Canarias y las Azores, respectivamente; era inevitable la exploración, conquista, exterminio, junto con la marginación de la población, como también la colonización y conversión de los indígenas al catolicismo y de las tierras para cultivos europeos (como la caña de azúcar), enfermedades europeas tendrían que venir también, entre otras cosas.
Confirmando así, el fruto de estas exploraciones, el descubrimiento del Nuevo Mundo, la colonización y su explotación serán la creación de una nueva “economía atlántica”, economía que será alternativa a la ya existente en el Mediterráneo y Asia.
La búsqueda, explotación, procesamiento y puesta en circulación de metales preciosos se convertirán en el objetivo de los europeos, pero al mismo tiempo, emergería una oleada de envidiosos y crueles piratas ingleses, franceses y holandeses, puesto que harán todo lo que esté a su alcance para estar siempre en contra de los españoles y obtener sus riquezas; éstos piratas serán conocidos como la “plaga universal” o enemigos de todas las naciones, que no solo asolaron y saquearon galeones repletos de metales preciosos sino también ciudades costeras en las Indias occidentales, las Antillas y sus islas vecinas.
Adentrándome ya en el contexto histórico y social que se vivía por aquellos años; me di a la búsqueda de conseguir documentos fidedignos que trataran sobre la piratería y sus consecuencias en las indias occidentales, e indagué de igual manera la forma de gobierno español y su administración en los siglos XVI y XVII para comprender y obtener así una mejor concepción de cómo se fue dando esa economía que gozó durante algún tiempo España; así mismo entre cada autor que iba leyendo me iba informando sobre qué había sucedido en realidad para que se originara ese fenómeno de la piratería; Por ende, para obtener una idea más precisa del estilo de vida de aquellos corsarios y bucaneros del siglo XVI y XVII, en el que predominaba por aquel tiempo el régimen político como el del rey Carlos II de España, o contrastando con el de la reina Isabel I de Inglaterra y los que le sucedieron; en fin, esta obra tratará de encontrar las respuestas mejor clarificadas para el presente trabajo de investigación.
Hay que tener en cuenta que también hubo crisis económica, política y religiosa en el siglo XVII y que en España se acentuó más esta crisis. Cabe destacar que esta potencia se las vería muy mal con las revueltas religiosas a causa de la Reforma y la Contrarreforma, puesto que a España le tocó vivirla como ninguna otra nación.
En este periodo ocurren frecuentes secuencias de motines, debido a la falta de productos básicos, y la lucha constante contra las autoridades se hacía cada vez más presente. La crisis llega a su momento más álgido y las epidemias y la miseria se apoderan de España, dando lugar a que las ciudades se infesten de pobres, vagabundos, malvivientes, y prostitutas, esto sucedería en los reinados de Felipe IV y Carlos II. En las colonias americanas serán muy comunes las invasiones de corsarios y piratas llegando al colmo de la devastación.
Además, la capital de la Nueva España no podía controlar los lejanos territorios como los del norte (la Nueva Vizcaya o el Nuevo Reino de León) ni tampoco las zonas que quedaban en las costas de Yucatán o Campeche, las cuales lamentablemente no se podían proteger de los corsarios invasores que encallaban sus balandras en esos lugares del Pacífico, Atlántico y el Caribe, como el puerto de Veracruz, la cual era la puerta de entrada a las tierras de los colonos, puesto que todos esos buques de corsos que llegaban la tomaban como objeto para sus saqueos y pillajes, más frecuentemente entre los años de 1683 y 1685, pero la situación no sería más favorable en las colonias del Pacífico, puesto que desde que en 1565 el agustino fray Andrés de Urdaneta descubriera el tornaviaje desde la ciudad de Manila al puerto de Acapulco y comenzaran los viajes del galeón de Manila o como comúnmente se le llamaba “la Nao de China”, entonces los intercambios comerciales se hicieron más frecuentes entre Asia, América y Europa.
Los mares del Atlántico y el Caribe se infestaron de piratas y corsarios ingleses, franceses y holandeses que trataban de apoderarse de los ricos cargamentos que iban transportados en galeones cargados con gran cantidad de mercancías procedentes de otros países, como por ejemplo la seda y la porcelana de China, especias de las Molucas; perlas preciosas, alfombras y tapetes de la India y otras materiales orientales que eran intercambiados por la plata y oro de las minas de la Nueva España.
Capitulo I.- El origen de la piratería
Casi se puede decir que la piratería ha existido desde que existe la navegación y es un hecho que los piratas siempre han sido catalogados como unos de los personajes más crueles, marinos que atacan no solo embarcaciones de mercaderes sino también ciudades costeras enteras, pero esto pronto tenía que cesar, ocurrió algo que a lo mejor parecía inimaginable, ya que casi nadie, por miedo, se querían enfrentar a esos lobos marinos; sería una chispa de suerte que las nuevas tripulaciones conformadas por los piratas más valientes y audaces que el mar jamás hubiera conocido.
La piratería, como todo, tuvo su origen desde tiempos muy antiguos, cuando las primeras civilizaciones como los sumerios, fenicios, mesopotámicos y egipcios, los cuales tuvieron una gran influencia en los griegos y demás culturas del mediterráneo se dedicaban al comercio marítimo, podemos decir que no todo era “legal”, puesto que los actos de criminales como los famosos piratas junto con el pillaje han sido desde los inicios de la humanidad, algo que hasta la fecha todavía existe por desgracia.
Estos temidos hombres ya eran muy conocidos hace más de cuatros cientos años, antes del nacimiento de Cristo. Los griegos llamaban a los saqueadores de navíos “piratas”, este término significa “los que atacan”, ya que les saqueaban, mataban cuando atacaban a los barcos en medio del mar. Con el tiempo, los piratas eran llamados de otras maneras sin embargo el nombre de “corsarios” era denominado a los piratas legales, ya que había gobiernos, como el inglés en el siglo XVI, que compartían sus ganancias con ellos. En el año 78 a.C., Julio César combatió a los piratas de Cilicia, quienes lo habían secuestrado y pedían 30 monedas de oro por su rescate, lo cual él pedía 50, actual Turquía. Estos piratas atacaron por muchos años el Mediterráneo. En la contienda murieron cerca de 10.000 piratas y unos 20.000 de ellos fueron capturados.
En la primera época del medioevo, hacia el siglo VIII d.C., los vikingos eran los temidos piratas de aquel entonces que asolaban las costas europeas. Atacaban a todo ser viviente en toda Europa Occidental; sus actividades favoritas eran: quemar, matar y saquear. Sus famosos barcos que podían medir más de 23 metros de eslora, con una sola vela central era su principal herramienta. Ya en el siglo XVI vuelven a resurgir con fuerza de la mano de la reina de Inglaterra, Isabel I.
Hubo también mujeres que hicieron el rol de piratas, aunque son escasos los nombres de ellas, su participación fue fructuosa a la vez y llena de intrigas. Se conoce a mujeres que fueron piratas como Anne Bonny y Mary Read. En Irlanda en el siglo XVI fue famosa también una pirata llamada Grace O’Malley.
Esta mujer de la que cuentan era muy bella y provenía de noble cuna y era una gran navegante. Tenía su propia flota de embarcaciones y residía en el condado de Mayo (al oeste de Irlanda- en la misma bahía de Clew).Con unos treinta años de edad ya tenía bajo su mando a un gran grupo de piratas y con ellos atacó las costas de su país, ya en poder de los ingleses, con numerosas embarcaciones. A los 63 años de edad pidió al rey de Inglaterra el perdón real, y luego se retiró a un lugar desconocido hasta el fin de su vida. Durante un día de 1573 se ejecutaron a 33 piratas en la ciudad alemana de Hamburgo, al Norte del país germano. Eran piratas que operaban en el mar del Norte.
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