Planes Y Pactos Económicos Contra Los Trabajadores.

Planes y pactos económicos contra los trabajadores.

Durante la década de los ochentas en México se dieron una serie de cambios que marcaron estruendosamente la nación pero fue fundamente se dio la proliferación de los pactos económicos. Planes económicos como respuesta a la inexorable crisis externa además de que el Fondo Monetario Internacional junto con la Banca Privada Internacional desarrollaron cada vez más injerencia en la política económica del país. Los políticos que se desempeñaron durante esa década, prometían muchas utopías. Dentro del movimiento obrero surgieron cambios, en su fuerza política, en su gestión, en sus liderazgos, en su estructura y particularmente en sus bases y representatividad, de alguna manera a los obreros se les culpaba ya que se dudaba de su optimismo. Las condiciones de trabajo afectaron principalmente a las clases asalariadas y por ende su situación de vida. Peculiarmente las grandes empresas mexicanas y la extranjera se beneficiaron con la deuda externa tanto como con la interna obteniendo decenas de millones de dólares, pero el sector de pequeños y medianos empresarios resintió este golpe duramente los cuales eran la mayoría de la población. El ingreso real de la capacidad de compra que ejercen en 1898, es 50 por ciento inferiores, a la que se tenía en 1980. En cifras globales el país, tenía un 40% de PIB en 1980, para ser menor del 50 % en 1989. En pocas palabras mientras el capital elevada sus ingresos, en el trabajo disminuyo. La política oficial aplicada sobre los trabajadores, y sus sindicatos es una pieza que explica cómo fue posible que los grandes empresarios resultaran con eso beneficios.

1° Los panes y pactos económicos.

Como respuesta a la situación y para recuperar la legitimidad que justamente se perdió en el transcurso de la crisis José López portillo, estructuro y difundió el Plan Global de Desarrollo 1980-1982. Para aumentar las fuentes de empleo, ofrecer una vida digna y una distribución justa de los ingresos, además de que nacionalizo la banca y el control generalizado de los cambios. En 1982 cuando concluyo su sexenio la situación empeoro, se encontraba muy lejos de lo prometido su plan no ofreció resultados positivos. Cuando Miguel de la Madrid estuvo al mando, se crearon muchos documentos con la finalidad de mejorar la situación. El primero de diciembre de 1982 se dio a conocer el programa inmediato de reordenación (PIRE), el 30 del mismo mes el Pacto Nacional Solidario y el 30 de mayo de 1983 se presentó el Plan Nacional de Desarrollo, 1983-1988, el propósito fundamental era “Mantener y reforzar la independencia de la nación, para la construcción de una sociedad que bajo los principios de estado de derecho garanticen libertades individuales y colectivas en un sistema integral de democracia y en condiciones de justica. Para ello requerimos, de una mayor fortaleza interna: de la economía nacional a través de la recuperación del crecimiento sostenido, que permita generar los empleos requeridos por la población en un medio de vida digno; y de la sociedad, a través de una mayor distribución de ingresos, entre familiar y regiones y el continuo perfeccionamiento del régimen democrático”.

De este propósito de definieron cuatro objetivos del gobierno del Miguel de la Madrid. 1°Conserva y fortalecer la instituciones democráticas. 2°Vencer la crisis. 3° Recuperar las capacidades de crecimiento. 4°Iniciar los cambios cualitativos que requiere el país en sus estructuras económicas, políticas y sociales. Se planearon estrategias no solo para supera al crisis, sino para lograr avances efectivos en el desarrollo nacional, en los ámbitos, políticos, económicos, sociales y culturales.

A este le siguieron 3 documentos más el Pacto solidario Nacional el 9 de agosto de 1983. El Programa de Aliento y Crecimiento el 23 de abril de 1986 y el Pacto de Solidaridad Económica el 14 de diciembre de 1987, pero ante una problemática surgía un pacto así que estos se les aunaron más.

Con el Pacto de Solidaridad Económica, se controló la inflación y desbordamiento económico, congelado salarios y precios en el sector privado y público, pero al controlar los salarios los más afectado continuaban siendo los asalariados.

2º Los hechos económicos

El plan nacional de desarrollo contenía una estrategia para enfrentar el periodo más severo de la crisis, el gobierno mexicano formulo la política de austeridad, esta política y algunas instituciones avalaban incrementos en las tarifas del sector público, como la electricidad, la gasolina, el teléfono, transportes, etc. sin embargo, para obtener más ingresos, el gobierno recurrió al expediente de incrementare los impuestos en todos los servicios manejados por el sector público y estableció diferencias de impuestos para los artículos de consumo masivo; denomino a unos básicos y a otros artículos de lujo.

Se establecieron incrementos constantes en los precios de bienes de consumo masivo como la leche, el pan, las tortillas, el azúcar, los huevos, etc. las clases asalariadas quedaron azoradas, además de una contención en los incrementos salariales, el gobierno justifico los topes salariales argumentando que así se controlaba la inflación. Esta política ejercida implacablemente durante seis años redujo los ingresos reales de las clases asalariadas, como se ha confirmado, en un 50 por ciento o más. Por esa misma política se explica el cambio ocurrido en la distribución nacional del PIB, y mientras el trabajo recibía

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