Porfirio Diaz

Alejandro Gallo                 25/11/14

PORFIRIO DÍAZ

Entre 1876 y 1910, el tiempo que gobernó Diaz, México se transformo profundamente, en ferrocarriles, fábricas, mercados, nuevas formas de vida en la ciudad que dieron lugar al nuevo México moderno.

Diaz creo un fuerte gobierno centralizando el poder. El gobierno, ejército y economía se administraban desde la capital. Su régimen estaba fundamentado por el positivismo.

Dejo claro que cualquier revuelta política seria erradicada inmediatamente. El mismo reconoció que fue severo pero que era necesario para lograr la paz. La libertad y equilibrio de poderes quedo idealizada.

El gobierno puso su mira en el exterior para mejorar la economía y el capital del país. El gabinete se empeño en atraer la inversión extranjera para financiar la construcción de fabricas y ferrocarriles.

El ferrocarril y telégrafo sirvieron para impulsar el desarrollo material si no que también fueron un veloz y eficiente instrumento para la represión.  Porfirio quería llegar a la modernidad por medio de una dictadura.

Porfirio Díaz encontró un respaldo consistente en los profesionistas e intelectuales que se habían agrupado en torno a una nueva forma de comprender el mundo, el positivismo.

Querían controlar a la población y a la sociedad en un sentido ideológico, de usos y costumbres, términos cotidianos. Este proceso de modernización era controlado por la élite blanca, por los grupos del poder, se decían que era la elite científica ya que eran médicos, ingenieros etc… La elite descalificaba a la clase baja de México y aspiraban a “mejorar” la raza atrayendo a migrantes europeos pero esto no tuvo mucho éxito.

El progreso material si había llegado al país y el intercambio comercial también. Díaz permitió la importación libre de impuestos de maquinaria industrial , le abrió las puertas a los capitales extranjeros que aprovecharon las oportunidad brindadas por el régimen para invertir en diversos sectores de la economía nacional. Ferrocarriles, fabricas, minas y establecimientos comerciales.

Surgió una industria patrocinada con capital nacional, un sector industrial de origen mexicano que logro la implantación de una vidriera, manufacturera etc…

El comercio en la industria promovió también el desarrollo de pequeños comerciantes, artesanos independientes y trabajadores calificados que conformaron una nueva clase social, la clase media. En el área rural, la pobreza era aun mas evidente. Trabajaban sin tregua, largas jornadas a veces mal pagadas. Díaz ignoraba el contraste social.

Díaz quería que la capital adoptara una imagen de prosperidad así que se hicieron grandes edificios de carácter publico en la capital como emblema de la fortaleza de un estado que ya creaba nuevas ocupaciones. El drenaje se convirtió en uno de los proyectos sanitarios mas importantes del régimen. La electricidad llegaba a las capitales, las luces de hidrogeno se sustituyeron por elegantes postes. Las calles se pavimentaron. Así la ciudad se fue transformando al ritmo impuesta por una sociedad deseosa de asumir los usos y costumbres europeos.

En el centro de la ciudad se sustituyo vivienda por comercios. El poniente y el sur se instalaron las clases altas. Hubo un proceso de segregación social y especial donde hay colonias para pobres y para ricos.  

Porfirio Díaz aspiraba a una época de orden y progreso con una imagen de un gobierno centralizador y capaz. Nuevos edificios, calles, transportes y oficios. También la vida intima de sus habitantes habría de cambiar profundamente.

Algunos científicos vieron a la m como un ser de in inferior por tener masa incefálica y estructura craneal menor a la de los varones, de ahí que su espacio fuera el hogar. Surgieron dos estereotipos, la madre buena virtuosa y ejemplar recatada y la prostituta, adultera y perversa. La mujer es la responsable de que todo marche bien en la sociedad, no se pueden permitir errores que manchen el honor de su familia o su esposo.

...