RELACIÓN BIDIRECCIONAL ENTRE EL ESTADO Y LA CIENCIA SOCIAL

RELACIÓN BIDIRECCIONAL ENTRE EL ESTADO Y LA CIENCIA SOCIAL.

Jackson Guevara Gómez
Jefferson Guevara Gómez
Frederman Oviedo Torra
Angie Paola Perilla López
Wendy Tatiana López Barrios

Desde la genealogía del Estado moderno, las ciencias sociales han jugado un papel preponderante en su constitución y en su accionar.

Seguramente si nos remontarnos a los inicios del Estado, se tendría que hablar de una necesidad de organización que solventara los distintos escalones del poder y que su finalidad fuera el bien común impulsado, como ocurrió en los Estados absolutistas donde las figuras del poder habían intentado comprender las necesidades de sus comunidades de forma arbitraria y sesgada por la subjetividad que les atañía.

Ahora si se parte del principio de que el Estado moderno es por un lado, objeto de estudio y a la vez de intervención, requiere de los esfuerzos investigativos de las ciencias sociales para poder enmarcar su accionar. Dicha relación data desde finales del siglo XIX, con el afán de las figuras organizativas de la época de ir al ritmo de la modernización de la sociedad, donde se toma las investigaciones sociales como insumos para la reestructuración del Estado.

Según Daniel Lerner," las ciencias sociales tienen como objeto dar una respuesta a las necesidades de la sociedad moderna en materia de informaciones empíricas, cuantitativas y de orientación política que atañen a dicha sociedad" (Wittrock, 1989)esta afirmación permite entrever la relación intrínseca que suscita el Estado para con las ciencias sociales, al convertirse en materia de estudio de diversas disciplinas sociales para responder a los requerimientos de la sociedad moderna, lo que quiere decir que como objeto de estudio puede abordarse desde una perspectiva interdisciplinaria con la conjunción de la sociología, la economía y la politología para la compresión de la realidad social y de esta manera poder diseñar y ejecutar metodologías para intervenirla con fundamentos sólidos (Guerrero, 2010).

En este sentido, se puede recurrir a la casuística y poner sobre la mesa el diseño de las políticas públicas, sociales y económicas, ya que estas deben responder a estudios empíricos rigurosos de la realidad social que con un componente transversal del conocimiento sistemático sobre una problemática o situación social, pueda crearse alternativas eficaces para responder a las verdaderas necesidades de dicha sociedad.

De igual forma, cabe aclarar que esta relación no se da en una sola vía (teoría social - Estado) sino que se da de forma bidireccional ya que algunos insumos de la práctica administrativa se convierten en teoría social, aclarando que esto debe ser sometido a estudios académicos rigurosos para construir el saber administrativo.

En este sentido, subyace una preocupación que se hace latente entre académicos e interesados del saber administrativo, y tiene que ver con el bajo índice de profesionales de las ciencias sociales en las instituciones estatales que coadyuven a la continua teorización del saber administrativo como al accionar fundamentado en el conocimiento científico que convierta funcional la institucionalidad.

Bibliografía

Guerrero, O. (2010). La administración pública a través de las ciencias sociales . México: Fondo de cultura economica.

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