San Fransisco De Asis

San Francisco de Asís nació en una pequeña y hermosa ciudad de Italia (Asís) en 1182, su madre Doña Pica quiso llamarlos Juan, pero su Padre Pedro Bernardone al regresar de un viaje de negocios ya que el pertenecía a una familia de negociantes de telas, decidió llamar a su hijo Francisco que significa pequeño francés esto lo hizo para complacer a su esposa ya que ella era francesa, su madre lo consagró a la Virgen Santísima y le inculco un tierno amor hacia ella, como todos los padres quisieron darle una buena educación así que lo mandaron a la escuela de la iglesia san Jorge fue en este lugar donde los sacerdotes le enseñaron latín y francés que en aquellos días era considerado el idioma de los poetas y trovadores, Francisco desde muy chico ayudo a su padre en el negocio familiar, se dice que el espíritu vivo y alegre que el tenia hacia que los clientes fueron a su negocio, estaba Donato de una gran inteligencia y sentido para las cosas lo que le hacía pensar a su padre que el seria su sucesor, Francisco por otra parte se interesaba en la poesía le encantaban los relatos sobre la caballería y soñaba con que algún día el seria como sus héroes, a Francisco le gustaba pasar su tiempo en las mejores fiestas y banquetes y aunque él no era de la realeza sus amplios modales y el dinero de su familia bastaba para que fuera aceptado en ellas, a su padre no le parecía el tipo de vida que llevaba su hija ya que lo consideraba un derroche, Francisco disponía de mucho dinero y lo gastaba en sus fiesta claro que él nunca le se negó a dar limosna a los que la pedía, él decía “Dios ha prometido devolverme el céntuplo”, por lo que siempre daba mucho, un día en el que él se encontraba sumamente ocupado llego un mendigo a su establecimiento pidiéndole limosna pero el abrumado por sus ocupaciones lo hecho de ahí, al percatarse de lo que había hecho salió corriendo tras el mendigo y le pidió llorando, desde ese día el prometió el nunca rechazar a nadie por amor a Dios, la gente de aquel lugar no veía con buena cara el tipo que llevaba Francisco pero su madre sabia del corazón tan grande que tenía su hijo y simplemente les decía que tal vez algún día llegaría a ser un verdadero hijo de Dios, claro que hoy en día sabemos que su madre tenía toda la razón en confiar en su hijo, un acontecimiento que modifico su vida fue en donde él fue encarcelado por su participación en el conflicto que hubo entre la gente del pueblo de Asís y la nobleza, en aquel entonces tenía tan solo 20 años de edad, estuvo un año en prisión, para algunos de sus compañeros aquel tiempo les pareció eterno pero el siempre mantuvo tu buen humor y los hacia reír con algunos chistes, cantos entre otras cosas todo lo hacía con el fin de que aquellos jóvenes olvidaran su pena por tan solo un instante, al salir de prisión Francisco siguió con su vida de antes con sus amigos se dirían a seguir en fiestas y demás eventos.

Un día Francisco enfermo de manera grave del tal grado que quedo postrado en cama, pero gracias a los cuidados de su mamá se recuperó, fue ahí que ya recuperado se destino a dar un paseo por el bosque pero en lugar de sentirse alegre fue todo lo contrario se sintió sumamente triste en su momento enfermo reflexiono sobre su vida y se dio cuenta de que su vida había sido inútil y vacía no carecía de ningún tipo de sentido para el en ese momento, soñaba con llevar una vida diferente he inspirado por sus relatos de caballería se unió al conde Gautier, que se había puesto en disposición del Papa y su labor consistía en echar fuera de Italia a los alemanes que habían ocupado su hermoso país, el día en que se disponía a probar su armadura se encontró con un amigo suyo el pertenecía a la nobleza pero había caído en desgracia traía una pobre armadura y al percatarse de ello Francisco decidió cambiar su fina armadura que tanto le había costado por la de su amigo, diciendo que el la merecía mas que el por el simple hecho de ser noble y el tan solo hijo de un comerciante, ahí fue donde Francios dio muestra de la gran bondad que el tenia y corazón, Francisco se dirigió a la guerra pero el nuevamente enfermo y se tuvo que quedar en cama, se dice que un día Francisco oye que lo llamaban era Dios que le preguntaba quién era más generoso el servidor o el maestro a lo que el contesto el que el maestro pero nuevamente se le hizo una pregunto por qué se preocupaba mas por el servidor y no por el maestro, Francisco no llego a entender el significado de esto, regreso a Asís y volvió a su vida cotidiana con sus amigos y sus ya conocida fiestas pero el simplemente se sentía vacío, al mismo tiempo su corazón se llenó de algo fuerte y dulce a la vez, se le llego a preguntar que si se iba a casar algún día , él decía que sí que la novia que él había escogido no se comparaba con ninguna otra, el comprendía que para llegar al todo había que pasar por el camino de la nada, a eso él lo llamaba Dama Pobreza la que trataría de conquistar toda su vida de ahí en adelante. A sus 23 años Francisco había cambiado de vida pero aún estaba muy lejos de lo que un día llegaría a ser, le gustaba leer el Evangelio, rezaba mucho en las iglesias y cerros pero sobre todo pedía fuerzas para poder seguir adelante con su nueva vida ya que se veía tentando en volver a atrás a esa vida llena de facilidades, continuaba dando limosnas y comprando utensilios para las iglesias, le daba vestimentas a los que la necesitaban así como también zapatos pero con el tiempo comprendió que para ser digno de su Dama pobreza tenía que despojarse de todo, sus riquezas, sus ropas, zapatos de absolutamente todo lo que el poseía y así lo hizo pero no en su pueblo (Asís) ya que lo tacharían de loco, así fue que él se dispuso a viajar a Roma, fue en ese lugar donde nadie lo conocía donde se dispuso a despojarse de todo lo que traía vacío la mochila que su madre le había preparado y cambio sus ropas con las de un pobre, habiendo terminado esto se dispuso a sentarse en una banqueta a pedir limosna, cuando llego a juntar algunas monedas se acercó a un pobre hombre y se las dio, también compartió con este pobre hombre su sopa, de esa manera logro una victoria sobre sí mismo, al regresar a Asís ya con su vestimenta habitual sentía su cuerpo en plenitud ya que había podido experimentar la libertad con respecto a la riqueza material que se tenía, Francisco estaba totalmente consiente de que aún le faltaba mucho por delante que aun tenia victorias que ganar sobre su misma persona, porque consideraba que lo mas importante es ser dueño de uno mismo, en ese entonces se tenía un desprecio y repugnancia total hacia los leprosos, hasta el cuándo pasaba por los hospitales y se percataba de que había un leproso se apresuraba a pasar tapándose la nariz y boca por el olor que estos despedían, no podía n verlos por lo

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