Secuestros de las libertades en Túnez

Secuestro de las libertades en Túnez

En el gobierno de Ben Ali como presidente,  su gobierno  no permitía ningún tipo de oposición, utilizaba como excusa a los grupos islamistas para silenciar a personas o cualquier medio que tuvieran ideas opositoras.

Las elecciones presidenciales y legislativas, en Túnez, se iniciaron en el año 1959, tres años después de la independencia y hasta la elección del día 3 de noviembre de 1974, fue la época de las elecciones sucesivas de Habib Burguiba. El 18 de marzo de 1975, Habib Burguiba “El Combatiente Supremo, fue nombrado presidente vitalicio de la República Tunecina, quedando suprimida la elección presidencial.  

Zine el Abidine Ben Ali -el artesano del cambio- parecía devolver la esperanza al pueblo, reconocía que el pueblo estaba preparado para la democracia, mientras que el presidente de ese entonces Habid Burguiba , atrapado por la vejez y un entorno cada vez desacreditado  el cual fue bien recibido por las diferentes familias políticas, incluidos  los islamistas, decía que la democracia sería una catástrofe, “si debiera de precipitarnos en la anarquía y en los antagonismos del antaño, que habían originado la colonización” por esto se le hizo un golpe de estado médico-constitucional también conocido como día de la nueva era, mediante el cual se sustituyó al Presidente vitalicio de la Republica Tunecina, Habid Burguiba, que gobernaba desde la independencia del país, algunos informes revelaron la participación del servicio secreto italiano en la planificación del golpe.

La sustitución del cargo presidencial de Habid Burguiba por Abidin Ben Ali  fue justificada legalmente manifestando la mala salud mental del dictador de acuerdo al artículo 57 de la constitución tunecina de 1959. Desde ese entonces el día de su llegada al poder se celebraba como el "Día de la Nueva Era".​ A pesar de considerarse un golpe de estado, la transición de poderes fue pacífica y se dio de acuerdo con la constitución tunecina.

El antiguo presidente en 1981 abrió la puerta al pluralismo político al levantar la prohibición que afectaba  al Partido Pluralista Tunecino  (PCT),  dos pequeñas formaciones políticas se autorizaron más tarde: el partido de la unidad popular (PUP) y el movimiento de los demócratas socialistas (MDS) aun así esta apertura no respondió a las dudas de los ciudadanos  ante el espectáculo desolador ofrecido por la clase  dirigentes, quienes se preocupaban más por las intrigas que por los  problemas de un país victimas de socioeconómia  grave y de una oposición islámica.

Con Ben Ali, la eliminación  del a presidencia vitalicia que es un título obtenido por algunos dictadores para eliminar los términos a su mandato, en la ilusión  de que su autoridad y legitimidad, nunca serán discutido y el tribunal de seguridad del estado, los contactos con opositores políticos ignorados por mucho tiempo y humillados a veces por Burguiba la liberación de centenares de presos políticos, en su mayoría islamistas ayudaron a  crear un clima favorable. Sin embargo para combatir la oposición, este general fue llamado al Ministerio de Interior, reprimido a mediados de los años ochenta el acceso del movimiento islamista y  reprimida sangrientamente la oposición sindical  el 26 de enero de 1978 fecha que ha quedado en la memoria de los tunecinos como el jueves negro, tuvieron  su origen  en el conflicto que se produjo entre la sindical Unión  General de los Trabajadores Tunecinos (UGTT) con el gobierno de Tunecía y con el partido socialista Neo Destur el cual era el que estaba en el poder.

 Quienes se apresuraron a rendir acatamiento  al nuevo señor de Cartago fueron las personalidades de la oposición y del movimiento sindical e incluso de la Liga Tunecina de Derechos Humanos (LTDH). Entraron en el gobierno dos antiguos presidentes de la LTDH:  Mohamed Charfi, ministro de Educación Nacional y de Enseñanza Superior, encargado de que los programas escolares fueran conformes a la Declaración Universal de los Derechos Humanos del Hombre y  el doctor  Saadun Zmerli, como ministro de Sanidad.   Al Partido Socialista Desturiano (PSD)  fundado por  Habib Burguiba, entraron a la lista antiguos  izquierdistas y sindicalistas a partir de 1988 por Ben Ali Bajo el nuevo orden de Agrupación Constitucional  Democrática (RCD) dejando clara su voluntad de “cambio democrático”. La adhesión a la Convención Internacional sobre la Tortura, la apertura en Túnez de una sección de Admitía Internacional , la Asociación Tunecina de Mujeres Demócratas (ATMD) siendo la primera del mundo árabe, y el reconocimiento de la primera asociación femenina independiente, fue algo que confirmo la vuelta del exilio de ciertas personalidades políticas .

Cheij Rached Ghannuchi un político Tunecino, cofundador del Partido el renacimiento después de estudiar filosofía en Damasco y en la Soborna de Paris, regreso a Túnez y se unió a varios movimientos islamistas,   fue  condenado a cadena perpetua en las últimas semanas del reinado del presidente Burguiba, solo estuvo en prisión cinco años entre 1981 y 1984 y de nuevo entre 1987 y 1988 después de este tiempo  recupero su libertad de movimiento. “Mi confianza en Dios y en la persona del presidente Ben Ali es grade”, dijo Ghannuchi en 1988. El nuevo presidente  hizo  lo posible para aparecer como << protector  de la patria y de la religión >>(introducción del llamamiento a la oración en la radio y en la televisión, creación de una Secretaria de Estado para  los Asuntos Religiosos, viaje a la Meca para hacer la peregrinación menor… ) durante sus dos primeros años de mandato. Marcaron el fin del estado de gracia las elecciones presidenciales y legislativas  de abril de 1989,  que se celebraron con la participación  de << listas independientes >>. El primer escrutinio legislativo pluralista se celebró en Túnez en 1981, pero la entrada de la oposición en la Cámara de Diputados, no tuvo lugar hasta 1994. Para <

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