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Trabajo De La Sociedad


Enviado por   •  19 de Marzo de 2013  •  12.694 Palabras (51 Páginas)  •  284 Visitas

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1. TRABAJO Y SOCIALISMO

La transformación de las comunidades en sociedades cooperativas de producción social, nos indica que el trabajo colectivo y libre es aquél de cuyo fin social somos claramente beneficiados todos, y nos dice que no existe una diferencia entre el trabajo manual y el intelectual, que todo trabajo es una unidad. Dentro del socialismo, el trabajo deja de ser una frustración para convertirse, por una parte, en una expansión de las facultadas creativas del hombre y, por otra parte en un enriquecimiento del ámbito en que se desarrolla su vida. El socialismo extrae su fuerza de la unión de los desheredados. De los sentimientos y aspiraciones comunes nacen las directrices, y no al revés. El movimiento comunal necesita de la teoría como instrumento de concienciación y como clarificación de objetivos; pero la inteligencia socialista, al no enlazarse estrechamente con el pueblo, caería en un intelectualismo conducente al suicidio.

La cosa es clara y vamos a exponerla para desarrollarla. Si toda la comunidad llegara a poseer los instrumentos de su trabajo, cada una el suyo, caerían al punto en la cuenta de que la producción se intensificaría haciéndolos de propiedad común o colectiva. El obstáculo al colectivismo es que unos posean y otros no los medios de producción; si el reparto y su división llegara hasta hacer a todos propietarios de parte de esos medios, venía de por sí la solución de ser todos, en colectividad, dueños del total. Es cuestión de conveniencia para todos. Lo que hace falta es que se perfeccione la sociedad, y ésta no se perfeccionará lo que cabe mientras persista la Propiedad Privada de los Medios de Producción. El socialismo consiste en la socialización de los medios de producción y no lo que dicen por ignorancia o por manifiesta intención deformadora, proclaman que el socialismo es el reparto, o la tiranía del Estado, o el ahogo del individuo entre la colectividad. Ocúrresenos la precedente observación al oír que para ser socialista es preciso vestir camisa y alpargatas y repartir cuanto se tenga entre los demás, esto no está previsto en el socialismo del siglo XXI, la propiedad individual está garantizada por la Constitución Bolivariana. Todavía no ha entrado en ciertas cabezas la idea de que el socialismo es producto de la evolución económica, que no se trata de aliviar la suerte de este o aquel, sino de favorecer la transformación natural de las leyes del proceso económico.

Es preciso que vean los trabajadores que si se sostiene tanta fabricación de artículos de lujo es porque, aplicadas esas fuerzas, y con ellas las que se consumen en labor improductiva, a la producción de artículos de mayor necesidad y más extenso consumo, darían menor beneficio a empresarios, y dividendo menor a accionistas; es preciso que comprendan que es un disparate creer que lo que produce más rendimiento en el mercado del capitalista individualista sea lo que más falta social hace. Si bien el socialismo no traza un cuadro de la sociedad futura porque ello argüiría falta de sentido histórico, pero se basa en las posibilidades que ofrece el estado de la ciencia y el desarrollo de las fuerzas productivas. Cuando se opone el individuo a la sociedad y se habla de la iniciativa, se olvida que tal iniciativa no es más que una acción social manifestada en un individuo. No hay más individualismo racional que el predicado por el socialismo. El individuo es un producto; y la sociedad, ¿no es un producto del individuo? La sociedad no es un producto de cada uno de nosotros, sino de todos colaborando con la naturaleza. La conciencia de la integridad económica de nuestro trabajo y de su utilidad social permite perfilarse en el trabajo idealizado y cosechar el arte de la misma vida.

2. RELACIONES DE PRODUCCIÓN

Que es constitutivo para la teoría de los modos de producción social. La categorización de cada modo de producción requiere que las relaciones económicas se definan como un tipo de relación social, específicamente: entre los hombres respecto de las cosas, y no de los hombres con las cosas. En el materialismo histórico de Marx, cada formación social específica cuenta con unas determinadas relaciones de producción y, a la vez, un grado especial de desarrollo histórico de las fuerzas productivas materiales. Existen relaciones de producción primitivas, antiguas, feudales, y capitalistas, cada una de ellas correspondiente a la sociedad primitiva, la sociedad antigua, la sociedad feudal y la sociedad capitalista, y cada una de ellas correspondiente a diferentes formas de división social del trabajo y propiedad de los medios de producción. El grupo puede ser étnico o de afinidad, una institución social u organización, una clase social, una nación, familia, etc. La relación social no es entonces idéntica a la relación interpersonal o la individual, aunque cada una presupone a las otras.

Las relaciones sociales de producción significan para Marx:

• relaciones de propiedad y control, a menudo legalmente validadas, pertinentes para los activos socialmente producidos (p.e.:inmuebles, vehículos, máquinas que se utilizan en la producción)

• relaciones laborales (incluyendo la labor doméstica propia)

• las dependencias socio-económicas entre personas provenientes de la forma en que producen y reproducen su existencia

• las proporciones cuantitativas de los diferentes aspectos de la esfera de producción, consideradas desde el punto de vista de la sociedad como un todo.

3. PROPIEDAD SOCIAL SOCIALISTA

Propiedad social sobre los instrumentos y medios de producción, base económica del socialismo. Surge como resultado de la revolución socialista por medio de la socialización de la propiedad privada capitalista y por la transformación, en consonancia con los principios socialistas, de la pequeña propiedad privada de trabajo (ver Nacionalización Socialista). La propiedad social se consolida y se multiplica en el proceso de la reproducción socialista ampliada. El dominio de la propiedad socialista pone fin a la explotación del hombre por el hombre, lo libera de todas las formas de opresión y de todos los tiros de dependencia social, ofrece amplias posibilidades para el desarrollo planificado y sin obstáculos de la producción social, para el incremento incesante de la productividad del trabajo social, para elevar el bienestar del pueblo y para el libro desenvolvimiento de la personalidad de cada trabajador. En la fase socialista ese tipo de propiedad presenta dos formas: la de propiedad de todo el pueblo estatal, y la de propiedad cooperativo-koljosiana. La existencia de las dos formas de propiedad

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