Camino al exito

EL CAMINO HACIA EL ÉXITO
Cada individuo lleva su propio estilo de vida, acostumbrado a la rutina, adaptándose a cada una de sus necesidades dentro del rango de lo que puede alcanzar y no esmerarse por algo mejor.
En nuestro día a día estamos sometidos a tener que aceptar los cambios que el destino nos da a través del tiempo, en esta etapa es donde debemos explorar nuestras capacidades y habilidades para alcanzar el éxito o quedarnos en el fracaso. Con esto debemos tomar decisiones basándonos en nuestras convicciones, pensamientos y actos.
Todos queremos ser triunfadores, logrando cada una de nuestras metas y ser líderes del éxito. Para alcanzar estos ideales no estamos exceptos del fracaso o los altibajos, muchas veces estas dificultades nos cambian totalmente la manera de ver las cosas y caemos en la frustración dándonos por vencidos o cambiando nuestros propósitos. 
Para ganar es necesario perder, de los contratiempos y problemas podemos aprender lo que se requiere para convertir las caídas en resultados óptimos. 
La clave de todo está en la manera de afrontar las cosas, si tomamos las mejores actitudes y con ello buscamos soluciones a las dificultades podemos convertir lo negativo en positivo para así alcanzar la victoria.
No podemos asumir elpapel de víctimas o vencedores porque así estamos dándole paso a un futuro negativo y para prosperar es inevitable que aceptemos las olas de cambio y cabalguemos sobre ellas. 
Es importante tener confianza en nuestras decisiones, las adversidades no significa el final, muchas veces es el principio de algo mejor y más importante. 
Por ejemplo, en empresas o fábricas, no es apropiado que un líder muestre debilidad o indecisión, por el contrario, un buen jefe debe tomar las mejores decisiones y cuestionarse cómo surgir frente al fracaso, a través de sus habilidades, conocimientos y experiencias, el resultado de ello se verá reflejado tanto para el lugar donde trabaja como para sus subordinados, ya que es el modelo a seguir.
Hay que tener claro que todo sucede por alguna razón, que en ocasiones es mejor iniciar de cero y empezar a construir bases más sólidas para decidir realmente que es lo que se quiere y a partir de esto tomar la iniciativa con cambios positivos, haciéndonos madurar y crecer tanto espiritual como personalmente.
El éxito no es reservado ni mucho menos para personas que poseen mejor suerte, cada ser humano es único y especial, con habilidades y aptitudes que lo hacen ser triunfante, la victoria empieza desde nuestro propio convencimiento, elcual da lugar a medidas eficaces.
En nuestro camino conocemos dos tipos de personas, las que nos alienta al éxito y aquellas que buscan nuestra caída, a esos debemos demostrarles que si se puede y cada uno de nosotros dependemos de nosotros mismos.
Siempre tendremos obstáculos en el camino pero solo es cuestión de pararse firme, tener concentración y trabajar duro para así demostrarles a los demás que si podemos prosperar y que a pesar de las adversidades siempre hay de donde poder apoyarse para seguir, familia, amigos y compañeros de trabajo, obteniendo mucho más de lo que estábamos adaptados a tener y sorprendernos luego con haber conseguido más de lo planeado.
Para llegar a la cima debemos elegir entre la fe y el miedo, si somos persistentes a cada uno de nuestros sueños nada nos podrá derrumbar. Es evidente que existe el miedo a lo desconocido, a los cambios, al fracaso, pero la fe nos proporciona energía, esperanza e inspiración, nos permite sentirnos menos estresados por las dificultades que nos plantea la vida y así fortalecernos para el éxito. La fe y el convencimiento en un futuro positivo nos llevan a emprender acciones eficaces.
El éxito seguro radica en tres razones, la primera el trabajo duro, la concentración es la segunda y por ultimo noacostumbrarse a lo de siempre.
El trabajo duro consiste en erradicar la pereza pues está no nos ayuda a cumplir nuestras metas a cabalidad, es primordial esforzarse en la vida, pues así los resultados que deseamos serán mejores, es decir, si es mayor nuestro empeño el éxito será mayor.
Para efectuar nuestro plan de acción es indispensable concentrarse, apartar todas las distracciones que impiden el triunfo, las cosas irrelevantes que consumen tiempo y energía. Algunos seres humanos poseen problemas de concentración pero esto se puede aprender y aplicar, es cuestión de desarrollar nuestra habilidad, comprometerse y llevarla a cabo. La concentración nos ayuda a prosperar en lugar de limitarse a sobrevivir. 
Es fundamental cada día buscar nuevas oportunidades para la mejora continua, no hay que sentirse satisfecho con las limitaciones de solo sobrevivir, hay que seguir aprendiendo y creciendo. Cada día que decidas trabajar duro y no conformarte con lo que eres, es un día que te conduce hacia el tipo de vida que quieres vivir.
El momento propicio para crecer y llegar al éxito es cuando tenemos una actitud positiva, deseo de mejorar las ideas y estrategias, una excelente ética de trabajo y una gran capacidad para concentrarse y empezar a destacarse por encima delos demás.
Al lograr el éxito es necesario recordar nuestros inicios y de dónde venimos, no perder nuestra humildad y la capacidad de dar; el trabajo en equipo hace aumentar nuestro éxito y nuestro aprendizaje. Siempre hay que realizar con pasión nuestro trabajo, hacer las cosas con agrado y no por obligación hace que con el tiempo añoremos seguir haciendo nuestras labores. 
A pesar de la falta de oportunidad de trabajo nosotros mismos podemos desarrollar las capacidades para alcanzar el empleo deseado, preparándose y buscando los cambios que necesita nuestra vida para ser aceptados al cargo que nos propongamos, y una vez alcanzada esta meta innovar y buscar estrategias para sobresalir ante los demás y crecer laboralmente. 
El libro “El tiburón y el pececillo” de Jon Gordon nos enseña a como estar preparados para los cambios que nos da la vida, las dificultades, adversidades y fracasos, nos da una idea de cómo afrontarlos a partir de nuestro crecimiento personal, pensamientos, habilidades, convicciones y actos. Nos prepara para cabalgar sobre las oleadas de cambio, teniendo el control sobre lo que deseamos, concentrándonos en las oportunidades, siendo héroes de nuestra propia historia, humildes e insaciables.
PRESENTA: ANGIE ALFONSO CUERVO

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