Concepto y tipología de las artes escénicas

Concepto y tipología de las artes escénicas

Artes Escénicas son una conjunción entre lo visual y de lo auditivo, en un espacio tridimensional y con sus elementos en movimiento. Su finalidad es la exhibición pública, generalmente ante una colectividad de espectadores. Su finalidad artística es la creación de belleza mediante la armonización de determinados elementos en una estructura concreta, la expresión artística de un individuo o grupo de individuos, la creación de formas culturales propias de un colectivo o grupo humano y la celebración lúdica.

Las artes escénicas comprenden el estudio y la práctica de formas expresivas que se inscriben en el universo de la interpretación, como el teatro, la danza, la música, el circo, la performance, que utilicen a la vez todos estos recursos y tengan como fin la exhibición pública.

Sus elementos son:

• El espacio y el tiempo utilizados en estrecha relación como elementos estructurales y de expresión. Propio de las artes escénicas es: la presencia inmediata de la interpretación, el “aquí y ahora”.
• La acción (física o verbal). La representación escénica nunca es estática ni en lo físico ni en lo expresivo ni en lo emocional: el movimiento en todos estos sentidos es lo que les da fundamento.
• La estructura y sus componentes (texto, personaje, conflicto, situación). De la ordenación de los elementos en una estructura nace la belleza y la expresión.

Se consideran artes escénicas al teatro, la música, la danza, el circo y formas alternativas de representación (combinación estrecha entre diferentes artes- teatro y danza usualmente).

El teatro:

Se distingue entre el teatro representado por actores y el que es llevado a cabo desde el exterior por personas especializadas (teatro de títeres, marionetas y sombras).

Puede ser musical o no musical, dependiendo de si se utiliza como elemento fundamental.

• Según su organización puede ser formal (institucionalizado en sus formas) o informal (callejero o aficionado).
• Según su público puede ser de corte popular o dirigido a público ilustrado e interesado en las formas de expresión dramática.
• Según sus fines puede ser lúdico o tener una intención didáctica (transmisión de ideas, análisis psicológico).

La música:

Participa en el “aquí y ahora”. Su interpretación se desarrolla en un tiempo concreto y espacio determinado, se dirige a un público determinado y tiene sus propias convenciones de representación (determinadas por el género musical)

La danza:

Consiste en mover el cuerpo guardando una relación consciente con el espacio e impregnando de significación la acción de los movimientos. Si bien se asocia a la música, no es una asociación necesaria. Es un arte con acciones en el tiempo, duración, con principio-fin y una estructura determinada. Puede realizarse con o sin sonidos.

Utiliza el movimiento del cuerpo como medio expresivo. La belleza surge a partir de la armonía basada en la simetría y el equilibrio. Puede expresar sentimientos (deseos, alegrías, pesares, gratitud, respeto, temor, poder). Primitivamente se usaba para invocar y adorar dioses, para cortejar, festejar cosechas y estaciones.

Se clasifica según:

• Su origen: popular rural, popular urbana
• Según su procedencia: danza tradicional oriental, danza clásica occidental o danza contemporánea.

El circo:

Arte especial, reúne elementos de otras artes como el teatro, la música y la danza. Siempre apela a la mostración de lo extraordinario, tanto en sus aspectos nobles como en sus aspectos grotescos o paródicos. Las diferentes modalidades tienen su origen en demostraciones de fuerza y habilidad. El circo tradicional cuenta con acróbatas, trapecistas, funambulistas y domadores de fieras. Los domadores representan el dominio del hombre sobre la fuerza irracional de los animales. La belleza femenina se muestra a través de los trajes fantasía y la desnudez inusual de las artistas. Los payasos representan lo grotesco, ridículo, equívocos, acciones banales y fallidas. Suele ser un espectáculo ambulante, desarrollado en carpas y su espacio escénico es circular.

La performance y otras formas escénicas de vanguardia:

Una performance es una muestra escénica, muchas veces con un importante factor de improvisación, en que la provocación o el asombro y el sentido de la estética juegan un rol principal. Este arte es aquel en el que el trabajo escénico lo constituyen las acciones de un individuo o grupo, en un lugar determinado y tiempo concreto. Puede ocurrir en cualquier lugar, iniciarse en cualquier momento y tener cualquier duración. Involucra cuatro elementos: tiempo, espacio, cuerpo del artista y una relación entre este y el público. Otra forma activista de performance art es el sniggling, que se desarrolla de modo que los espectadores inicialmente no se dan cuenta de que se esa ejecutando una performance.

Tadeuz Kowzan – “El signo en el teatro. Introducción a la semiología del arte del espectáculo”.

La semiología es la ciencia que enseña en qué consisten los signos, qué leyes los rigen. Dentro de esta disciplina, existe poco trabajo de campo dedicado al análisis del arte como parte de la semiología. Se considera al arte como un siglo global, parte de la lingüística.

La noción propia de signos se desarrolla dentro de la lógica, de la psicología y de la lingüística- es el punto de partida para semiología.

El autor destaca que, de todas las artes, el espectáculo es donde el signo se manifiesta con mayor riqueza, variedad y densidad. La palabra pronunciada por el actor tiene una significación lingüística (signo de los objetos, personas, sentimientos, ideas) y su entonación, la manera de pronunciar la palabra, la mímica del rostro, el gesto, la postura corporal y la posición frente a los demás compañeros en el espacio escénico puede cambiar dicha significación. El espectáculo emplea un sistema de significaciones no lingüísticas y recurre a signos auditivos y visuales tomados de la naturaleza, la vida social, de los oficios y demás terrenos del arte.

Los signos pueden clasificarse como naturales o artificiales. Los naturales se definen como “aquellos cuya relación con la cosa significada sólo es resultado de las leyes de la naturaleza: por ejemplo, el humo, signo de fuego”. Los artificiales son “aquellos cuya relación con la cosa significada se basa en una decisión voluntaria y más frecuentemente colectiva”.

Dentro del arte teatral, todos los signos son artificiales ya que son consecuencia de un proceso voluntario, casi siempre creados con premeditación y tienen como objeto comunicar instantáneamente –son funcionales. El arte teatral emplea signos tomados de todas las manifestaciones de la naturaleza y de todas las actividades humanas, de modo que los signos naturales son artificiados.

Dentro de la representación teatral, la dicción y la mímica del actor los hábitos estrictamente personales se dan juntamente con los creados voluntariamente, los gestos conscientes están entremezclados con movimientos reflejos.

Los signos se pueden ser de primer grado (con función semántica) y de segundo, tercero, etc. Si tienen funciones en el plano de la fonología, la sintaxis o prosodia. (Fenómeno de connotación)

Los signos se clasifican dentro de 13 sistemas que además se pueden dividir en: signos de texto pronunciado (1,2), expresión corporal (3, 4, 5), apariencias exteriores del actor (6, 7, 8), aspecto del espacio escénico (9, 10, 11) y efectos sonoros no articulados (12, 13). También se pueden clasificar en signos auditivos (palabra, tono música, sonido) y visuales (espaciales: maquillaje, peinado, accesorio, decorado; temporales y espaciales: mímica, gesto, movimiento e iluminación).

Los principales sistemas de signos son:

1. La palabra: presente en la mayoría de las representaciones teatrales (excepto pantomima y el ballet). Su papel varía según los géneros dramáticos, las modas literarias o teatrales, los estilos de la puesta en escena. La superabundancia de consonantes sibilantes y africadas (s, z, ch, j) en una respuesta puede ser signo de cólera, de irritación en el personaje que habla. El orden arcaizante de las palabras es signo de época histórica lejana, o de personaje anacrónico, que vive al margen de los hábitos lingüísticos de sus contemporáneos. Las alternancias rítmicas, prosódicas o métricas pueden significar cambios de sentimientos o de humor.
2. El tono: la dicción del actor puede hacer que una palabra aparentemente neutra e indiferente produzca los efectos más variados e inesperados. El tono comprende elementos como la entonación, el ritmo, la velocidad, la intensidad. La entonación es elemento que crea los signos más variados. Dentro de este sistema también se encuentra el acento (campesino, aristocrático, provinciano, extranjero).

Signos kinésicos: mímica del rostro, gesto y movimiento escénico.

1. La mímica del rostro: son signos temporales-espaciales creados por la expresión corporal del actor. Se los puede denominar signos kinésicos, kinestésicos o cinéticos. Se encuentra relacionado con la expresión verbal, ya que muchas veces puede reemplazar a la palabra. También hay toda clase de dignos mímicos ligados a las formas de comunicación no lingüística, a las emociones (sorpresa, cólera, miedo, placer), a las sensaciones corporales agradables o desagradables, a las sensaciones musculares (el esfuerzo), etc.
2. El gesto: se creen que es posible hacer con la mano y el brazo hasta 700.000 signos. Pueden acompañar a la palabra o sustituirla, los que reemplazan un elemento del decorado (puerta imaginaria), un elemento de vestuario (sombrero imaginario), accesorio o accesorios, gestos que significan un sentimiento, una emoción, etc.
3. El movimiento escénico del actor: comprende los desplazamientos del actor y sus posiciones dentro del espacio escénico. Se trata sobre todo de: los sucesivos lugares ocupados con relación a los demás actores, los accesorios, los elementos del decorado, los espectadores; diferentes formas de desplazarse (paso lento, precipitado, vacilante, majestuoso, etc); entradas y salidas; movimientos colectivos.         
   El andar titubeante es signo de embriaguez o extrema fatiga. Dar pasos hacia atrás puede ser signo e reverencia exigida por el protocolo, de timidez, de desconfianza en la persona a quien se deja o de afecto. La entrada del actor desde el patio o jardín, por la puerta o ventana, son otros signos utilizados por el autor dramático. Los movimientos en grupo y multitudes pueden representar una fuerza amenazante.
4. El maquillaje: tiene como objetivo hacer resaltar el valor del rostro del actor que aparece en escena en ciertas condiciones de luz. Contribuye a dar la fisonomía del personaje y brinda signos de carácter más duradero. Puede aplicarse en manos y hombros. Puede crear signos relativos a la raza, edad, estado de salud, temperamento. Se fundan en signos naturales y pueden constituir un personaje tipo o personalidad histórica o contemporánea. El maquillaje está en interdependencia con la mímica del rostro: se refuerzan mutuamente o complementan, o anula a la expresión mímica del actor (máscara: puede ser parte del vestuario, del maquillaje o de la mímica).
5. El peinado: determinado por el creador del vestuario. Puede ser signo de determinada área geográfica o cultura, época, clase social, generación que se opone a los hábitos de sus padres. La barba y el bigote cumplen función de complementos indispensables.
6. El traje: la vestimenta constituye el medio más externo y convencional de definir al individuo. Señala el sexo, la edad, la clase social, a profesión, la posición social o jerarquía particular (rey, Papa), la nacionalidad, la religión, la personalidad histórica o contemporánea. Puede señalar la situación material del personaje, los gustos, rasgos del carácter. Es signo del clima, de la época historia de la estación, del estado del tiempo, del lugar, de la hora del día. Puede también ocultar el verdadero sexo del personaje, la verdadera posición social, la verdadera profesión.
7. El accesorio: se lo sitúa entre el traje y el decorado. Pueden significar el lugar, el momento, una circunstancia relacionada con los personajes que se sirven de ellos –profesión, gustos, intención-.
8. El decorado: aparato escénico o escenografía. Consiste en representar el lugar: geográfico (paisaje, mar, montaña), social (plaza, laboratorio, cocina, café), los dos a la vez (salón con vista a la Torre Eiffel). Pueden significar tiempo, época histórica, estación, hora. El decorado es tan vasto como las artes plásticas como la pintura, escultura, arquitectura y arte decorativo. La elección del decorador depende de la tradición teatral, de la época, de las corrientes artísticas, de las condiciones materiales del espectáculo y gustos personales.
9. La iluminación: Realza otros medios de expresión. Puede determinar el lugar teatral: los focos concentrados sobre una parte del escenario significan el lugar de la acción en ese momento. La luz del proyector permite aislar a un actor o accesorio. También puede poner de relieve a un actor u objeto en relación al contorno. Puede ampliar o modificar el valor del gesto, el movimiento, el decorado o agregar un valor semiológico nuevo al rostro, el cuerpo del actor o fragmento del decorado. Puede completar o reemplazar el decorado a través de una imagen o fotografía proyectada o agregar efectos dinámicos.
10. La música: su papel consiste en subrayar, ampliar, desarrollar y contradecir los signos de los demás sistemas o reemplazarlos. Las asociaciones rítmicas pueden evocar la atmosfera, el lugar o la época de la acción. La elección del instrumento puede sugerir el lugar, medio social o ambiente. También puede acompañar las entradas de cada personaje, brindar agregado a escenas retrospectivas (contraste del presente con el pasado)
11. El sonido: o ruidos. Pueden ser naturales (rechinar de puerta, ruido de pasos, roce de accesorios y trajes) ya que se son consecuencia secundaria e involuntaria de la comunicación alcanzada por medio de otros signos. Dentro de los artificiales están la hora (toques del reloj), estado del tiempo (lluvia), el lugar (ruido de pájaros, voces de animales), desplazamiento (ruido de un auto), una atmosfera de solemnidad o de inquietud (campana, sirena).

El espacio escénico como sistema significante

El autor hace referencia al teatro a la italiana como forma clásica que integra el espectáculo. Plantea que los enunciadores confiaban en los poderes de ocultación que ejercían la caja cerrada de la escena y el mágico telón. El espectador, frente a este espacio, disponía de algunos datos para enfrentar la iniciación del espectáculo: el espacio que ocultaba el telón era el espacio de ilusión, allí la escenografía iba a reproducir espacios reales con fantástica fidelidad y se iba a mantener la alta convención de la cuarta pared. El espacio escénico oculto tras el telón pero visible en la memoria sensible del espectador contribuye al juego de la denegación desde la no significación.

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