El Arte De La Guerra

El arte de la guerra.

Introducción.-

Más allá de la práctica militar Sun Tzu lo pensó como un medio que enseñara la estrategia suprema de aplicar con sabiduría el conocimiento de la naturaleza humana al momento de confrontarse. Las empresas no se enfrentan de forma directa en un campo de batalla como en el que estaba Sun Tzu, pero la dinámica competitiva empresarial lleva a que las organizaciones se vean en un duelo del que solo se puede vencer. También insiste en la importancia de posicionarse en el terreno con garantías para la victoria en la guerra.

La influencia actual del marketing y la reputación se basa principalmente en las percepciones.

Asimismo existen tres importantes factores para Sun Tzu, la velocidad, agilidad y resiliencia como cualidades de los grandes generales y ejércitos para adaptarse lo antes posible a los cambios en la guerra. Algo fundamental en el liderazgo, la integridad y la prudencia, dos cualidades en el momento actual como antídoto al riesgo y problemas financieros.

La estrategia, el arte de competir, lo llevan a cabo todos aquellos que han llegado a la cima, y se puede usar en distintos ámbitos, tanto empresariales, académicos, e incluso personales.

Sinopsis.-

Las empresas, lejos de competir en un único escenario, lo hacen en múltiples terrenos y en condiciones de todo tipo, los “ejércitos” empresariales deben estar preparados para luchar contra cualquier adversidad, de ahí la preparación y el escenario que pueda situar a las empresas en graves situaciones.

El terreno implica la distancia y hace referencia a donde sería mejor desplazarse, también si el campo es bueno y abierto, esto influye en la supervivencia.

En las empresas así como en las guerras para poder tener la garantía de que se obtendrá la victoria la mejor arma es la información y con ella se logra el poder, para esto se debe llevar a cabo una evaluación cuidadosa para poder vencer.

Como se menciono anteriormente la información y la estrategia van de la mano pues a la hora de hacer frente a la competencia con la información se analizan las fortalezas y debilidades, también las oportunidades y amenazas. No se puede fallar al conocer la situación del adversario por economizar en estudios e investigaciones, no es propio de un líder. La información sería el único antídoto ante el riesgo.

“La mejor victoria es vencer sin combatir” (Cap. 1). Pero, ¿cómo se podría vencer sin combatir? Se logra cuando la empresa no lucha, pues ya tiene la lucha ganada de antemano, cortando los suministros o bloqueando su camino, sin emplear mucho tiempo.

“La guerra más excelente es aquella que

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