El Bosque De Los Pigmeos

Resumen del libro: “El bosque de los Pigmeos”

Capítulo 1

Alexander Cold y Nadia Santos montaban un elefante macho caprichoso de nombre Kobi. El animal había tomado cariño a Nadia, porque en esos días ella trató de aprender la lengua de los elefantes. Kobi apreciaba a Nadia tanto como detestaba a Alex y no perdía ocasión de demostrar ambos sentimientos. A Borobá tampoco le gustó el cariz que tomó la relación del elefante con su ama.

Los dos adolecentes habían cambiado mucho: Nadia cumpliría quince años y Alex dieciocho.

La abuela y los dos jóvenes se encontraban en el corazón de África, en el primer safari de elefantes cuya idea surgió de Michael Mushaha, un naturalista africano.

Un empleado de Michael Mushaha los recibió cuando aterrizaron en la capital de Kenia. Al día siguiente salieron a pasear por la ciudad y por el mercado. Temiendo que Nadia se perdiera Alexander fue con ella. En un momento, se encontraron en el sector destinado a la brujería.

Se detuvieron ante un puesto diferente a los otros; Alex se inclinó para ver qué había dentro y dos manos poderosas lo halaron hacia el interior. Una mujer que se presentó como mensajera entre el mundo de los espíritus y el mundo material, adivina y sacerdotisa vudú, ella fumaba.

Cada vez más aturdidos, trataron

de escapar, pero no pudieron moverse.

La voz de Kate Cold los atrajo de vuelta al mundo y se encontraron sentados en la misma posición en que comenzaron el viaje alucinante.

A la mañana siguiente el grupo del International Geográphic viajó en una avioneta hasta la vasta reserva natural, sonde los aguardaba Michael Mushaha.

Capítulo 2

Una banda de media docena de mandriles embriagados se las había arreglado para demoler las instalaciones. El efecto era como si el campamento hubiera sido barrido por un tifón.

Después de organizar de vuelta el campamento alguien descubrió que Timothy Bruce había sido mordido por uno de estos animales. Por la noche el fotógrafo tiritaba de fiebre y Mushaha no estaba seguro de si era la causa de la herida o un súbito ataque de malaria.

A media tarde llegó un grupo de nómadas masai al cual Mushaha les dio lugar para quedarse, ellos aceptaron porque tenían un niño enfermo y tenían que esperar a una curandera que venía en camino.

Al ponerse el sol ella llegó; la curación del paciente se llevó a cabo a pocos metros del campamento. La curandera dijo que había un antepasado ofendido y debía identificarlo para mandarlo de vuelta al otro mundo. El procedimiento duró varias horas en las cuales, absorbió espíritu maligno y lo incorporó

a su cuerpo.

Angie Ninderera se presentó al día siguiente para llevar a Timothy Bruce al hospital

Después se enteraron por radio que el fotógrafo seguía en el hospital con una combinación de malaria y mordedura de mano infectada.

En la última noche en el safari, todos lamentaban tener que despedirse de sus nuevos amigos y de aquél paraíso donde habían pasado una inolvidable semana.

Poco antes del amanecer Kate despertó sobresaltada porque creyó haber oído un ruido, cuando estaba por encender al luz Nadia se lo impidió por que le dijo que eran leones, entonces la escritora armó tal escándalo que despertó a todo el campamento.

Capítulo 3

Todos estaban muy tristes por tener que irse del safari.

Cuando habían terminado de colocar el equipaje en el avión, surgió de unos arbustos un hombre que hasta entonces nadie había visto y que se presentó como “el hermano Fernando”, un misionero católico.

El misionero dijo que necesitaba que Angie lo llevara hasta una aldea llamada Ngoubé, que quedaba en otro país. Ella se negó, pero Alex y Kate la convencieron para que los llevara a todos hasta ese lugar.

E l viaje fue muy tranquilo y Angie manejó tomando cerveza y fumando.

Cuando el misionero les indicó el lugar donde tenían que aterrizar Angie anunció que no era la primera

vez que aterrizaba en menos de doscientos metros y eso causo que se rompieran las hélices.

Capítulo 4

Al caer la noche los expedicionarios decidieron acampar cerca de los árboles, donde estarían mejor protegidos.

Nadie estaba recorriendo la playa y encontró varios pedacitos de sogas, se los mostró a Alex y juntos concluyeron que alguien había estado allí y no estaban tan desamparados.

Llegó la noche y se organizaron para dormir por turnos, Nadia que no tenía esa responsabilidad por ser la más joven, insistió en acompañar a Alexander durante su turno.

Cuando amanecieron,

...