Factores Sociograficos De La Poblacion
paulrosasc29 de Noviembre de 2013
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Factores sociodemográficos y ambientales
asociados con la actividad física deportiva
en la población urbana del Perú
Juan A. Seclén-Palacín1 y Enrique R. Jacoby 2
Objetivos. Determinar la frecuencia de la actividad deportiva en la población urbana del
Perú e identificar los factores sociodemográficos, económicos y ambientales asociados con ella.
Métodos. Se utilizó la información recogida por la Encuesta Nacional de Hogares del segundo
trimestre del año 1997, Perú (ENAHO 97-II), a cargo del Instituto Nacional de Estadística
e Informática del Perú. ENAHO-97 se basó en un muestreo probabilístico, multietápico y
estratificado de todo el territorio nacional urbano dividido en ocho regiones geográficas: Lima
metropolitana, costa norte, costa centro, costa sur, sierra norte, sierra centro, sierra sur y selva.
En total se visitaron 14 913 hogares y fueron entrevistadas 45 319 personas de 15 años o mayores.
La información sobre la frecuencia de la práctica deportiva fue clasificada en diaria, interdiaria
(en días alternos), semanal u ocasional. La actividad deportiva regular (ADR) se definió
como la práctica de cualquier deporte con una frecuencia diaria o interdiaria. Además se examinaron
las preferencias y obstáculos para la práctica deportiva. Se realizó un análisis descriptivo
de los niveles de ADR según el sexo mediante la prueba de ji al cuadrado. Se analizaron los factores
asociados con la ADR mediante regresión logística múltiple condicional y análisis de residuos,
multicolinearidad e interacciones. El nivel de significación utilizado fue de 0,05.
Resultados. La práctica de deportes al menos una vez a la semana y de ADR fue mayor entre
los hombres (44,5 y 12,8%, respectivamente) que ente las mujeres (32,4 y 10,5%). El grupo de
edad en que hubo una mayor práctica de ADR fue el de 50–55 años en los hombres (20%) y el
de 40–45 años en las mujeres (18%). Se encontró que en la zona de la selva, sierra centro y costa
centro se practica más deporte (15,3, 12,8 y 12,1%, respectivamente), mientras que en Lima metropolitana
y sierra sur se observan los valores más bajos (10,6 y 9,7%, respectivamente). El
nivel de ingresos no mostró asociación con la práctica de ADR, aunque otras variables asociadas
indirectamente con el nivel socioeconómico —como el mayor nivel educacional, tener empleo y
tener acceso a Internet o a televisión por cable— y el consumo de información deportiva estuvieron
significativa y directamente asociados con la práctica de ADR. Las barreras más frecuentes
para la práctica del deporte fueron la falta de tiempo y de infraestructura y el desinterés
de la población. La práctica de ADR por parte de los miembros de un hogar estuvo significativamente
asociada con la presencia de un jefe de hogar que practicaba deportes activamente.
Conclusiones. La práctica de ADR en las zonas urbanas del Perú es escasa. Los más afectados
son los menores de 30 años, las mujeres y los residentes del área metropolitana de la capital.
Esta insuficiente práctica de ADR constituye un reto para la salud pública y reafirma la
necesidad de promover estilos de vida activos. La influencia positiva observada cuando el jefe
del hogar es un deportista activo y la mayor ADR encontrada en zonas urbanas fuera del área
metropolitana de Lima deben ser objeto de estudios más profundos y deben tomarse en consideración
para el diseño de intervenciones específicas.
Actividad física, deportes, estilo de vida, Perú.
RESUMEN
Rev Panam Salud Publica/Pan Am J Public Health 14(4), 2003 255
Palabras clave
1 Organización Panamericana de la Salud, Proyecto
Desarrollo de Sistemas y Servicios de Salud. La correspondencia
debe ser dirigida a Juan A. Seclén-
Palacín, Representación de la OPS en Brasil, Setor
Embaixada Norte Lote 19, CEP 70800-400, Brasilia,
Distrito Federal, Brasil. Correo electrónico: seclenj@
bra.ops-oms.org.
2 Organización Panamericana de la Salud, Programa
de Alimentos y Nutrición, Washington D.C.
Correo electrónico: jacobyen@paho.org.
De acuerdo con la Organización
Mundial de la Salud, el sedentarismo
es uno de los factores de riesgo más
importantes de sufrir enfermedades
crónicas no transmisibles, junto con
la alimentación inadecuada y el tabaquismo.
La obesidad, la diabetes, las
enfermedades del corazón y algunos
cánceres se asocian con 40% de la morbilidad
y 60% de la mortalidad general
en el mundo y han dejado de ser problemas
exclusivos de las sociedades de
mayor poderío económico (1).
Cerca de dos tercios de la población
mundial mantiene prácticas sedentarias
como resultado de la urbanización,
que trae consigo el predominio
de trabajos con bajo gasto energético,
un mayor uso de transportes motorizados
y un mayor empleo del tiempo
libre en actividades sedentarias, como
mirar televisión (1). Por ejemplo, en las
zonas urbanas del Perú, cerca de tres
cuartas partes de los trabajadores de
uno u otro sexo están empleados en
actividades básicamente sedentarias.
En América Latina y el Caribe no se
cuenta con suficiente información
acerca del sedentarismo y sus causas.
Está documentado que el sobrepeso3
afecta a cerca de la mitad de la población
adulta (2, 3) y se observa un
aumento de la incidencia de enfermedades
no transmisibles (4). Como se
sabe, una de las causas fundamentales,
tanto del aumento de la prevalencia
de estas enfermedades como del sobrepeso,
es el incremento del sedentarismo,
que se considera uno de los
cinco factores de riesgo más importantes
para la salud (5). Según los resultados
de un estudio realizado en siete
ciudades de América Latina, 65% de
los adultos mayores realizan poca actividad
física (6).
El Perú no es una excepción a esta
realidad. El sobrepeso empezó a manifestarse
como fenómeno social a inicios
de la década de 1990 (7, 8) y se ha
extendido rápidamente hasta abarcar
a dos terceras partes de la población
adulta (9). Sin embargo, aún no se
dispone de información sobre los niveles
de inactividad física de los distintos
grupos de la población peruana.
Estudios epidemiológicos han demostrado
la existencia de una relación directa
entre la inactividad física y diversas
enfermedades crónicas e incluso la
muerte prematura (11). Se ha demostrado
también el efecto protector de la
actividad física regular contra las cardiopatías
isquémicas (12, 13), la diabetes
mellitus (14, 15), los trastornos cerebrovasculares
(16), la obesidad (17), la
osteoporosis (18), la ansiedad y la depresión
(19), y algunos tipos de cáncer
(20). Para corroborar dicho efecto, diversos
estudios experimentales han demostrado
los beneficios de la actividad
física en relación con algunos factores
de riesgo, como la hipertensión, el perfil
lipídico, la tolerancia a la glucosa, la
densidad ósea, etc. (21).
De estos trabajos surgió durante las
décadas de 1970 y 1980 el concepto de
fitness (correspondiente a “buena condición
física”), con un hincapié especial
en mejorar la capacidad cardiorrespiratoria
mediante ejercicios como medio
para lograr beneficios para la salud.
Este concepto se tradujo en la recomendación
de realizar al menos tres sesiones
semanales de ejercicios, con una
duración mínima de 30 minutos cada
una y una intensidad equivalente a 60–
90% del pulso cardíaco máximo (11).
En la década de 1990, sin embargo, se
demostró que la cantidad de ejercicio
necesaria para producir beneficios de
salud es menor que la requerida para
alcanzar una condición física óptima.
En este sentido, se recomienda practicar
30 minutos diarios de actividad
física moderada —como caminar, bailar,
subir escaleras o montar bicicleta—
por lo menos cinco veces a la semana.
Según esta recomendación, los 30 minutos
de este tipo de actividad no necesitan
realizarse en una sola sesión, pues
pueden acumularse durante el día en
tandas de 10 minutos cada una (11).
De lo anterior puede concluirse que
mediante la evaluación de la práctica
de deportes de una población se puede
hacer un cálculo aproximado de su actividad
física, específicamente de aquella
que es capaz de producir beneficios
de salud. El presente estudio tiene
como objetivo determinar la frecuencia
de la actividad deportiva en la población
urbana del Perú e identificar los
factores sociodemográficos, económicos
y ambientales asociados con ella.
MÉTODOS
Población de estudio
El Perú tiene una población de 26 millones
de habitantes, de los cuales 65%
viven en zonas urbanas de 2 000 habitantes
o más. Cincuenta y cuatro por
ciento de la población total se considera
pobre
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