Los Espejos Venecianos Una habitación sombría

Joan Manuel Gisbert

Los Espejos Venecianos

Una habitación sombría

En este capitulo, Giovanni Conti llego a Padua desde Nápoles  para asistir a un curso de documentación histórica impartido por el ilustre profesor Giacomo Amadio. Nada más llegar se acerca a la Universidad que estaba cerrada, después a la hostería Veneciana en la que busca alojamiento, pero estaba completo. Cuando acaba de hablar con el hombre una anciana le ofreció su casa, el joven le dijo que no disponía de mucho dinero, fueron  a ver la habitación, era triste pero acepta quedarse con la habitación. Cuando se instala, sale a la calle a dar una vuelta donde vio un palazzo que estaba junto a la casa de Alessandra, de pronto un hombre borracho se le acerca y le dice que malos vientos soplaron sobre esa casa, esto le hizo pensar pero se va calle abajo.

La desaparición de un legajo

Giovanni Conti va a ver a su profesor para contarle que llega con cinco días de retraso. Tras una charla se reúne con su grupo para ir a la biblioteca; después de verla y que el profesor explicara como utilizarla, Giovanni no dejaba de mirar a Lena una compañera. Ve a Paolo de Ferrara con quien entabla conversación. Tras proseguir la clase tuvieron que elegir un tema y buscar información. Giovanni busca a la familia Balzani que se encontraba en la biblioteca pero su asombro es que no se encontraba en la estantería.

¿Una Ventana Hipnótica?

Una vez en la habitación, Giovanni se queda observando el atardecer desde su ventana hasta que Alexandra le llama para darle velas. Poco después sale para buscar un sitio tranquilo donde cenar y encuentra una taberna sucia donde la comida es muy mala y los hombres que la frecuentan no le apartan la mirada; cuando se marcha ya casi llegando a la puerta de su casa ve que uno de los hombres de la taberna le siguen, pero rápidamente entra. Da las buenas noches a Alessandra que no se encuentra en su habitación. Así que decide retirarse a su habitación para descansar.

La carta inacabada

En este capitulo, Giovanni sigue interesado por el libro de los Balzani pero tampoco lo encuentra. Entabla buenas relaciones con Lena y Paolo pero detesta a Amadio. En su habitación en uno de los cajones encuentra una carta  del caballero que estaba hospedado anteriormente en la habitación; la carta le da mucho que pensar, tanto que se va a la calle para investigar el misterio que rodea a la casa de los Balzani.

La maldición del astrólogo

Giovanni está empeñado en saber qué pasa en la casa. De noche, va a casa de Lena para preguntarle, ella se viste y sale. Caminan calle abajo y ella le cuenta que el palazzo era de la familia balzani unos banqueros muy importantes en Padua pero que estafaron a mucha gente. Un astrólogo les echó una maldición que suponía que un día los Balzani se extinguirían de la faz de la tierra. Quedó solo Beatrice que padecía la enfermedad del sueño, en ella se basaba la leyenda ya que se decía que nunca murió. Tras el camino de regreso a casa de Lena le sigue preguntando, una vez en su casa se despiden y Giovanni se  dirige hacia su habitación, al entrar en la estancia ve la ventana entreabierta y un olor a  cera que despierta su curiosidad. Busca la carta y la encuentra de forma diferente a como él la había dejado. Se propone esconderla fuera de allí y se acuesta.

El rostro de Beatrice Balzani

Al día siguiente en la Universidad, Giovanni se muestra desorientado y pensativo. Lena le comenta que estuvo hablando con su madre y lo lleva a una galería donde encuentran un retrato de Beatrice. Giovanni descubre que hay dos cuadros representando a Beatrice en edades diferentes. Camino a su casa acompañando a Lena, ésta le da más información que su madre le ha dado, también le dice que la persona que mejor conocía la leyenda de los Balzani es Alexandra su casera, él le respondió que no le inspiraba confianza.

Huellas en el polvo de años

Giovanni decidido a averiguar lo que pasaba se propuso llegar hasta el palazzo por la cornisa de su ventana dejando antes un bulto en su cama para que pareciera que dormía, dentro del palazzo encendió una vela y siguió visitando las salas, que habían sido saqueadas pero la planta inferior todavía había sido mas saqueada cuando de repente encontró dos espejos venecianos incrustados en la pared uno frente de otro.  Los examina y cree ver algo en el espejo de enfrente pero era el mismo distorsionado, ya sin apenas vela examino los muros, la vela no tardo en consumirse con lo cual puso rumbo a su habitación pero en la barandilla del palazzo vio un bulto asomarse por su ventana el cambio su posición para verlo mejor, pero no volvió a salir, tras esperar un largo rato volvió a su habitación y se dio cuenta de que lo que se asomaba por la ventana era sólo la cortina. Con el temporal que empeoró no podía volver a al palazzo por la cornisa así que desistió y se fue a dormir.

Desalojo por oscuras causas

Al día siguiente cuando Giovanni baja de su cuarto para ir a la Universidad, Alessandra le espera para comunicarle que tenía que desalojar la habitación, porque el caballero volvería esta noche, el joven intenta convencerla pero ya le había buscado una habitación en la hostería Veneciana, el tiene que aceptar como un caballero. En la universidad pide ayuda a Lena y Paolo. Tras recoger sus cosas y instalarse en la hostería busca a Paolo que vigila a Alexandra para saber sí el caballero va a venir de verdad. No llega, así que llama a Alessandra para recoger un libro que dejo olvidado y mientras la anciana sube a buscar el libro, Giovanni abre una ventana para que se pudiera abrir desde afuera.

Volver como un extraño

En este capitulo, Giovanni se cuela en la casa para comprobar si esta el caballero; entra a oscuras y sube a su habitación muy convencido de que no habría nada. Entra y cree ver al caballero en la cama; al acercarse se da cuenta de que parece estar muerto. Sale de la casa por la ventana y al día siguiente a las 8 vuelve a recoger el libro y tras tener una discusión Alexandra lo echa de allí.

De los espejos venecianos

Ya en la universidad mientras que los demás hacían los trabajos que Amadio les mandó Giovanni sube hacia arriba para leer con tranquilidad el libro que robó en la hostería. Allí se dispone a leerlo; mientras lee tocan a la puerta. Es el profesor Amadio Conti que se preocupa por él y le hace un pequeño interrogatorio.

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