RESEÑA DE: LA TOMA DE DESICIONES Y LA INTERVENCIÓN DEL SECTOR PÚBLICO EN LA ECONOMÍA.

RESEÑA DE:

LA TOMA DE DESICIONES Y LA INTERVENCIÓN DEL SECTOR PÚBLICO EN LA ECONOMÍA

El sistema económico, como estructura de producción, distribución y consumo de bienes y servicios, a lo largo del tiempo ha desarrollado una serie de fallos estructurales que alejan a éste mecanismo de su problema fundamental: “resolver las necesidades básicas”, es decir, se muestra ineficiente en la asignación de los recursos. Por ello, el mercado requiere de la asistencia de un agente externo, como lo es el Estado, que implante una serie de medidas para intentar corregir los problemas que presenta el sistema. Es aquí donde podemos apreciar claramente la intencionalidad del texto anterior, exponer “por qué” se requiere la intervención del sector público en la actividad económica, con objetivos que van más allá de la regulación de ésta por medio del establecimiento de reglamentaciones legales y políticas públicas.

Por consiguiente, expone que el comportamiento de algunos mercados resulta muy inestable, es decir, los precios suben y bajan constantemente, en ocasiones de manera exagerada, afectando así a consumidores y ofertantes. Cuándo el precio sube excesivamente, afecta a los consumidores que adquieren o aspiran a consumir un determinado bien, ya que dependen de su capacidad monetaria para poder adquirir el producto. Por el contrario, si el precio baja exageradamente, puede producir la quiebra de muchos negocios. Por otro lado, cabe aclarar que la economía no se comporta de manera estable, sino que es un ente dinámico, que responde a un proceso cíclico que se desarrolla en dos puntos sucesivos: las épocas de expansión y la crisis.

Posteriormente, el texto desarrolla la idea de “bien público”, explicando la dicotomía entre un bien puro – no existe una rivalidad en el consumo y nadie está exento de su uso – y no puros – a pesar de que tampoco existe una rivalidad en el consumo, se pueden excluir personas de su uso, para lo que generalmente su usa la exigencia de un precio para poder adquirir el bien-. Por otro lado, se afirma que los bienes públicos se suministran a través del sector público de distintas maneras: Por producción propia, es decir, lo ofrecen directamente organismos estatales; por adquisición a empresas privadas y posterior suministro gratuito, en el que el bien lo produce una empresa del sector privado pero con la iniciativa del sector público y por adquisición subvencionada en parte, en la que una parte del bien es producido por iniciativa privada, pero el Estado facilita el ingreso a éstos mediante subsidios y conciertos.

El texto también expone que existen elementos que el mercado no determina, como lo son las externalidades, pues son situaciones en las que la producción–consumo de un bien se ve afectada por un elemento ajeno o sin relación directa a la actividad económica.

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