MILAGROS MODERNOS DE CRECIMIENTO
Cristopgarrido18Documentos de Investigación2 de Agosto de 2017
5.082 Palabras (21 Páginas)376 Visitas
UNIVERSIDAD DE CONCEPCIÓN
ESCUELA DE ADMINISTRACIÓN Y NEGOCIOS
Ingeniería Comercial
[pic 1]
MILAGROS MODERNOS DE CRECIMIENTO
Autores:
Aldo Borotto Cerna
Tamara Bórquez
Cristopher Garrido
Fabián Díaz
Felipe Lagos Baeza
Profesor:
Roberto Herrera Cofré
Primer semestre del 2017 – Chillán.
Índice
1. Introducción 3
2. Milagro económico alemán 4
3. Milagro económico chino 5
4. Milagro económico coreano 6
5. Una mirada a Chile 8
5.1 ¿Existió milagro económico en Chile? 8
5.2 Implicancias de los milagros económicos en Chile 9
5.3 Qué debería aprender Chile de los milagros económicos expuestos 10
6. Vinculación con el modelo de Solow – Swan 10
7. Conclusión 11
8. Anexos 12
9. Referencias 18
Introducción
El crecimiento económico ha sido un tema relevante para todos los países desde periodos pasados hasta el día de hoy, por consiguiente, analizar qué ha sucedido con el paso del tiempo ha cobrado una gran importancia, tanto a nivel país como a nivel mundial.
Milagro económico se define como un proceso inusual de crecimiento sostenido en la economía de una nación, categóricamente superior al resto de sus competidores. Esto supone el incremento de ciertos indicadores macroeconómicos como la producción de bienes y servicios, el ahorro, la inversión, una balanza comercial favorable. Pero lo importante de lo dicho anteriormente es que estos incrementos se vean traducidos en un alza de los estándares de calidad de vida de las personas (Kuznets, 1958).
En consecuencia, este informe desarrolla el tema de milagros modernos de crecimiento en Alemania, China, Corea y un análisis de comparación con respecto a Chile, a través de una investigación en base a información proporcionada por autores relacionados con el área de la economía. De esta forma, se pretende conocer las causas que dieron paso a estos milagros y sus posteriores efectos, así como también conocer que implicancias han tenido para Chile.
Este informe, se distribuye de la siguiente manera, en donde como primer punto se resume la historia económica de cada país a tratar por separada, procurando abarcar en su mayoría aquellos tópicos macroeconómicos tratados en la asignatura. En segundo lugar, se aborda el tema del milagro económico en sí, a través de índices relevantes de la historia de cada uno por ejemplo, niveles de pobreza, niveles de exportación, niveles de inversión e inflación y niveles de crecimiento a lo largo de los años. Luego se establece una mirada actual de cada país y finalmente se elabora un resumen con las implicancias de cada milagro con respecto a Chile y qué debería aprender de los milagros ocurridos nuestro país.
Milagro económico alemán
Después de la Segunda Guerra Mundial, Alemania quedó destrozada como consecuencia de los bombardeos que dejaron las ciudades aniquiladas, la industria quebrada, el comercio estancado, la fuerza laboral muerta en los campos de batalla o desempleada (Palacios, Marcos y Zedillo, 2011). Es por esto que, en ese entonces la economía alemana se caracterizaba por poseer una caída de la producción junto con una pobreza generalizada, disminución de la confianza en la moneda y restricciones a la actividad comercial (Cerda, 1987).
El milagro alemán tiene su asentamiento en la economía de libre mercado, pero también sobre la economía social de mercado, la cual consiste en que el Estado sí interviene en el proceso económico para proteger a los débiles y limitar el poder del mercado utilizando la política social, económica y financiera (Palacios, Marcos y Zedillo, 2011). Esta reconstrucción económica alemana se inició con el gobierno del canciller Ludwig Erhard, quien aplico la economía social de mercado. Para llevar a cabo esta implementación fue de vital importancia la ayuda de los préstamos norteamericanos y el plan Marshall para inyectar en la economía el dinero necesario para restaurar lo antes posible la economía y así volver a la prosperidad. Alemania Federal recibió 4.047.700 millones de dólares (Véase tabla 1). Sin embargo, esto no fue lo único que explica este milagro, también se realizaron modificaciones a la política económica vigente, donde se establecieron límites al gasto fiscal, se prohibió cualquier tipo de déficit, se eliminó cualquier restricción al ejercicio económico de sus habitantes lo que produjo que los productos existentes volvieran a recuperar su valor.
La inyección de dinero en la economía tuvo un efecto positivo en el sector, ya que se desarrollaron en gran medida las empresas y se redujo de forma considerable el desempleo existente, el cual era de un 11% para el año 1950 pasando a un 1,3% en el año 1960. Además, el PIB de Alemania creció en términos reales a tasas de 8% durante la década de los 50, mientras que la productividad creció a tasas de un 11% debido a la reactivación del comercio alemán. Por último, los salarios y los sueldos se levantaron sobre 80 % entre 1949 y 1955 (Véase gráfico 1 y tabla 2).
Otro hecho importante es que se reemplazó el antiguo Reichsmark por el marco alemán como moneda oficial de Alemania. Con esto se protegió al país de una segunda hiperinflación junto con el creciente mercado negro. Con esta reforma se dio paso a que los productos de consumo mostraran su verdadero valor, además gracias a la autorregulación de la oferta y la demanda de productos se impulsó la competencia lo que trajo como consecuencia una reactivación de la productividad y el comercio. Así como también fue importante para la recuperación el aumento de la productividad de los trabajadores provocando con esto que las empresas compitieran con productos extranjeros, y es así como en el corto plazo las exportaciones del país pasaron de un 10% a un 20%.
En la actualidad Alemania es la mayor economía de la Unión Europea y la cuarta del mundo, estando por bajo Estados Unidos, Japón y China. Alemania es uno de los países con mayor ocupación de la Unión Europea y el país que posee el índice de desempleo juvenil más bajo, además, se caracteriza por la disponibilidad de trabajadores especializados y calidad en infraestructura. En cuanto a los últimos indicadores macroeconómicos Alemania creció un 1,7% en el año 2015 tras un alza de un 1,6% en el año 2014 mientras que tuvo un superávit fiscal del 0,5% respecto al PIB del año pasado, una tasa de desempleo en un 3,9%, los salarios medios en 47.809 Euros, la inflación se mantiene controlada y el gasto interno se ha convertido en el principal impulsor del crecimiento económico. Las exportaciones crecieron un 5,4% y se vieron superadas por las importaciones, que aceleraron su crecimiento hasta un 5,7%. Además, el consumo privado se ha incrementado un 1,9% (Véase gráfico 2).
Milagro económico chino
China era un país rural con la agricultura como su principal actividad económica, ya que poseía un desarrollo industrial bastante deficiente. Además, sus índices macroeconómicos eran poco alentadores teniendo por ejemplo, una tasa de inversión muy baja lo que provocaba grandes fluctuaciones en su economía producto de años secos y lluviosos, esto a su vez producía grandes desequilibrios en los mercados. Según estimaciones de las ONU, en 1947 la renta per cápita china era de 40 dólares al año, la cual estaba muy por debajo del promedio mundial, fijado en torno a los 250 dólares.
El desarrollo económico en China arranca con un periodo de reforma y apertura de su economía al exterior, una reforma formulada por Deng Xiaoping en 1978 que se basaba en modernizar la agricultura, la industria, la tecnología y la defensa. Estas cuatro áreas permitirían mejorar la economía (Quiroga, 2009).
Sebastián Claro (2004) señala que la economía China ha experimentado un crecimiento impresionante desde fines de la década de los 1970s. Este notable desempeño reflejado en una tasa promedio de crecimiento del producto de 9.4% entre 1981 y 2003 coincide con un profundo proceso de reformas económicas impulsadas en 1978 (Véase gráfico 3).
El objetivo final de las políticas antes mencionadas era que China volviera a ser una potencia mundial y destacada producto del crecimiento económico y desarrollo tecnológico alcanzado. Y así sucedió, ya que a partir de 1978 no ha hecho más que superar todos los pronósticos que le ha llevado al año 2007 un crecimiento del PIB de un 11,4%, y en promedio el PIB durante los últimos 28 años ha crecido a una tasa de 9,7%. Además, la economía ha registrado un impresionante cambio estructural durante esos veinte años y para rectificar esto, Pablo Bustelo (2002) señala que las exportaciones se han multiplicado por catorce, alcanzando en el año 2000 casi 250.000 millones de dólares, así la cuota de China en las exportaciones mundiales ha pasado de 1% en 1980 a casi 4% en 2000 (Véase tabla 3). Por otro lado, la inversión directa extranjera, que rondaba apenas 1.000 millones de dólares anuales a principios de los años ochenta, alcanzó un máximo de 45.000 millones en 1998 y ha bajado ligeramente en 2000. Y, lo que es aún más notable, China ha conseguido reducir espectacularmente la pobreza, según las estadísticas oficiales el número de personas pobres habría pasado de 270 millones en 1978 a 42 millones en 1999.
...