NIVEL COMPRENSIVO

NIVEL COMPRENSIVO

En la entrevista se puede reconocer el problema central al que se enfrentó el entrevistado, siendo el dilema ético el siguiente:

        “Producto de los acontecido el 27 de febrero de 2010 en Chile, entraron en vigencia dos nuevos decretos estructurales (decreto 117 y decreto 118 del Ministerio de Vivienda y Urbanismo) que modificaron el procedimiento de cálculo de las aceleraciones sísmicas de los edificios, entre otras cosas, además de la forma en que se diseñan los muros. Antes del 2010, no estábamos obligados a confinar los muros, pero a partir de este año sí. Entonces, ocurrió lo siguiente. Como oficina, se nos encomendó el diseño de un edificio, y este edificio debía tener un mínimo de estacionamientos en el primer nivel de acuerdo a las indicaciones de la persona que envío a diseñar el inmueble. El problema era que muy pocos muros llegaban a nivel de fundación, recién en el segundo, tercer piso aparecía la estructura completa de edificio/departamento. En el primero era imposible apoyar el edificio. Entonces, ¿qué hicimos?, eliminamos dos o tres estacionamientos y reemplazamos con muros, muros con un mayor espesor al que ellos solicitaban, porque para confinar muros estos deben tener a lo menos 30 cm de espesor. Nosotros elaboramos el diseño de acuerdo a lo que pensábamos era lo correcto, ciñéndonos siempre a las normas estructurales, eliminando uno que otro estacionamiento y aumentado el espesor de los muros, lo que no fue del agrado del arquitecto. Aun así, como oficina nos apegamos a los decretos y normas de diseño vigente en ese entonces arriesgando el retiro del proyecto, que fue lo que finalmente ocurrió.” – Mario Moreno Moraga, Ingeniero de la consultora de ingeniería Pedro Escobar y asociados.

        El dilema en el cual estuvo enfrentado el entrevistado recayó en seguir o no los nuevos decretos establecidos por el Ministerio de Vivienda y Urbanismo, lo que conllevaba en que si seguía estas normas, existía la posibilidad de la pérdida del cliente que solicitaba el trabajo, pero a su vez corromper con las reglas que debía seguir para cumplir al pie de la letra los decretos planteados.

        A la consultora de ingeniería pedro escobar y asociados en donde trabaja el sr. Moreno se le encomendó el diseño de un edificio, el cual debía tener un mínimo de estacionamientos en el primer nivel de acuerdo a las especificaciones indicadas por el cliente, para el diseño del inmueble. El problema se presentó en que había muy pocos muros los cuales llegaban a nivel de fundación y recién en el segundo y tercer piso aparecía la estructura completa del edificio. Por lo cual tuvieron que eliminar un número de estacionamientos (dos o tres) y reemplazarlos con muros de mayor espesor de los que solicitaba el cliente, debido que para seguir con los nuevos decretos establecidos los muros deben tener al menos 30 cm de espesor. El sr. Moreno en base a sus valores de honestidad, responsabilidad, orden, trabajo y respeto hacia la humanidad elabora el diseño del departamento de acuerdo a lo que estaba éticamente correcto, siguiendo siempre las normas estructurales establecidas por el Ministerio de vivienda y urbanismo, pero debido a este hecho no lograron ser del agrado del arquitecto del proyecto, por lo cual se produjo un retiro del proyecto debido a no seguir las especificaciones del cliente por parte del número de estacionamientos que debía contener la estructura y que fueron eliminadas para seguir las normas de seguridad establecidas.

NIVEL ANALÍTICO

Los actores involucrados en el dilema ético anteriormente planteado son:

• Consultora de ingeniería Pedro Escobar y asociados: éstos son contratados para el diseño estructural de un edificio, pero como ven que en el diseño no siguen los decretos del Ministerio de vivienda y urbanismo con respecto a lo que debía contener la estructura, se ven enfrentados a la decisión de modificar el diseño siendo ésta no del agrado del cliente.
• Arquitecto: contrata a la consultora antes mencionada para el diseño estructural de un edificio, éste no está de acuerdo con el diseño éticamente correcto que sigue las normas establecidas por el Ministerio de vivienda y urbanismo, por lo cual retira el proyecto.

        Aquí se puede observar ambas partes disyuntivas que provocan el dilema ético, por un lado el arquitecto sabiendo las consecuencias a largo plazo que podrían atraer la mala estructuración del edificio. Circunstancias y principios que no son esperadas en un profesional como lo es un arquitecto, que por medio de su trabajo debería velar por la seguridad de la sociedad urbanizada.

        Aplicando el modelo de conciencia ética es posible profundizar en la toma de decisiones, siendo este un análisis comprensivo paso a paso de cómo actuar conforme a valores morales de modo de tener la capacidad de sentir, juzgar y deliberar.

1. Nivel de la conciencia sensorial:

        Se observa como la consultora trabaja conscientemente sobre sus proyectos, tomando decisiones que velan por el bien común de la sociedad. Es posible percibir que el arquitecto está en lo incorrecto y él lo sabe. Se siente que es posible o casi seguro que la estructura del edificio será un problema si no se lleva a cabo como debiera ser.

1. Nivel de conciencia inteligente:

        Podría ser que el arquitecto solo obedecía órdenes superiores en las cuales la estructura del edificio debía ir con una cantidad de estacionamientos y debía ser así, quizás él sabía que estaban por hacer un proyecto cuya vida útil iba a ser nula tras algún movimiento telúrico. Hipótesis como estas son las que uno puede preguntarse, porqué la gente hace lo incorrecto sabiendo y siendo consciente de ello, ¿será por dinero? He aquí donde pasamos al siguiente nivel.

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