PORQUE TODAS LAS ORGANIZACIONES SON PÙBLICAS

UNIVERSIDAD DE SAN CARLOS DE GUATEMALA

FACULTAD DE CIENCIAS ECONÓMICAS

ESCUELA DE ESTUDIOS DE POSTGRADO

MAESTRÍA EN ADMINISTRACIÓN FINANCIERA  

SEGUNDO TRIMESTRE

ADMINISTRACIÓN Y TOMA DE DECISIONES

EDIFICIO S-12

SALÓN 209

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ENSAYO No. 1:

¿POR QUÉ TODAS LAS ORGANIZACIONES SON PÚBLICAS?

Licenciado Msc Armando Melgar Retolaza

                                                     200315434 Erick Daniel Román González

Guatemala, 14 de mayo de 2015

¿POR QUÉ TODAS LAS ORGANIZACIONES SON PÚBLICAS?

La administración ha sido utilizada durante mucho tiempo y ha sufrido cambios durante la historia de la sociedad, se llega a consolidar como una ciencia, ya que su estudio abarca muchos criterios, técnicas, procesos o sistemas que permiten controlar y dirigir las actividades de una persona u organización. A nivel individual, la persona utilizará la administración para ser organizado con sus ingresos, egresos y poder tener un panorama amplio de cómo encarar el futuro. De la misma manera, los negocios o cualquier entidad, necesitan de la administración para coordinar las distintas secciones y cumplir con los objetivos que se han planteado.

Tal como se acaba de mencionar, cuando se empieza con el estudio de la administración e incluso al profundizar más en la materia, se indica que los principios, técnicas y las buenas prácticas de la administración, son aplicables a todo tipo de organización, sólo se adaptan los elementos a los fines que persiga la entidad.  Se dice esto, puesto que de forma constante se escuchan la separación que se hace de "La administración Pública y la Privada", cuando es una misma ciencia y por lo tanto no debe hacerse una diferenciación. Esto lo han tomado así para colocar de un lado el sistema que aplican las entidades estatales y por otro, las organizaciones lucrativas (privadas), que tienen metas diferentes a las que pueden darse en el Estado.  Sobre este tema es que se desarrolla el presente ensayo, se indicarán los tipos de organizaciones que se conocen y cómo influye el pensar, interés y juicios de las personas para comportarse de una manera en instituciones estatales y en empresas lucrativas.

Se describirán algunos ejemplos de cómo algunas malas prácticas y malas decisiones surgen en las instituciones del Estado, que afectan al logro de objetivos y desarrollo de las instituciones, lo que puede generar cambios en la sociedad.  Así también, se hará notar la importancia de conocer y poner en práctica lo que enseña la administración, para tomar mejores decisiones en bien de la organización a la que se represente y el público a quien se le presta un servicio.  

Tanto las organizaciones lucrativas, las instituciones del Estado y las organizaciones benéficas tienen un carácter público, puesto que no están destinadas a servir a una sola persona, sino a un grupo importante dentro de la sociedad, por lo que resulta incorrecto entender a la administración pública como la que rige sólo para entidades de gobierno.  

Ahora se analizará cómo se comporta la administración dentro de los distintos tipos de organizaciones.  Por un lado, se encuentran los negocios lucrativos, los cuales persiguen obtener beneficios económicos en favor de los socios que aportaron capital para formar y dirigir la compañía, para lo cual diseñan y mejoran el producto o servicio que prestan a los diversos clientes, que conforman el público de la compañía y es acá donde no puede establecerse una administración privada.

Por lo regular, las empresas lucrativas estructuran las posiciones por medio de un organigrama, encabezado por un Gerente General o Presidente, de donde se desprenden varios gerentes, que tienen a su cargo personal, quienes entregar un producto o servir a su público.  La administración involucra la planificación, dirección y control, los cuales se aplican en este tipo de negocios, además es importante definir los objetivos, la misión y visión de la compañía, en donde la visión involucra llegar al punto en que el público encuentre satisfacción en lo que ofrece la empresa.

Cuando se crean entidades estatales, se asignan tareas, se plantean objetivos y metas para beneficiar a la población que integra el país al cual representan. En esta organización se distribuyen las fuerzas del estado en tres categorías: organismo legislativo, ejecutivo y judicial.  Cada uno de ellos cuenta con poder suficiente para coordinar y dirigir de una buena manera a una República, aunque por lo regular se presta más atención al organismo ejecutivo, por ser la cara más visible de los estados, representada en primer lugar por el presidente de la República.

La forma de seccionar las fuerzas del estado parece la correcta, ya que para dirigir a un grupo grande de personas, como lo es un país, se necesita hacer una distribución semejante y con ello se pueden promulgar leyes para hacer justicia en un país, además de crear instituciones que ejecuten toda la buenas obras y velen por los derechos constitucionales de los ciudadanos (vida, salud, educación, etcétera).  En este momento se dice que se utiliza una administración pública y se le separa de las otras organizaciones, pero como ya se mencionó, las otras también son públicas.

Lo que varía de las entidades estatales y las que no lo son, es que las primeras abarcan un grupo de usuarios más amplio y las segundas se limitan a satisfacer las necesidades de ciertos sectores o industrias.  Se podría suponer con esto, que en las instituciones del Estado se colocan a los mejores profesionales, capaces de dirigir, controlar y satisfacer a la población, que en países de gran desarrollo sostenible, así ha de aplicarse, pero en lugares no tan desarrollados, como lo es Guatemala, es evidente que existen instituciones de Gobierno, en donde sus dirigentes no son tan aptos para la labor que desempeñan y sucede algo curioso, la administración que utilizan si es menos pública y casi podría encasillarse como privada, por situaciones que se abordarán en seguida.

En muy común escuchar y saber de casos que entidades estatales, existen personas que han adquirido puestos y alcanzado altos mandos, por medio de ciertas influencias con familiares o amigos que ya trabajan en puestos similares o de mayor rango y aunque esto también ocurre en las demás organizaciones, son más los casos que se logran conocer dentro del Gobierno.  Esta forma de contratar, hace que exista alta probabilidad de que no se escoja a la persona idónea para el puesto y que las tareas no se cumplan de la mejor manera, lo que puede ocurrir hasta en personas que integran el Congreso Nacional.  Así también, el pensar del individuo estará demasiado sujeto a cumplir sus fines personales, administrará para sus propios beneficios, poco se hará por satisfacer las necesidades de la población y por ello se dice que podría llegar a ser una administración privada.

Otro punto que se observa dentro de muchas instituciones estatales, es que algunas personas conocen que juegan un papel importante para toda la sociedad y cuando son requeridos para una gestión, lo vuelven un proceso tardado, engorroso y casi imposible de hacerse, si no existe alguna remuneración agradable para la persona que deba realizar dicha gestión.  En ocasiones un ciudadano llega a realizar un trámite en cierta entidad estatal y se da cuenta que hay trabajadores que están en actividades ajenas al trabajo y gastan el tiempo de ellos, la organización y sobre todo de la persona que los visita.  Al ocurrir esto, la persona podría decir que es la burocracia que se maneja en el gobierno, lo que es erróneo, puesto que la burocracia es el poder que se ejerce desde el escritorio, con el fin que desde este lugar se puedan empezar a realizar las gestiones que den respuesta a las solicitudes de las personas; en dado caso habría una falta de burocracia.

Lo anterior no quiere decir que no suceda en las demás organizaciones, sin embargo, es menor el abuso que se hace de la posición del trabajador o trabajadora.  Se percibe como que algunos colaboradores del Estado pensaran que un favor hacen a la población, cuando realizan alguna determina gestión, lo cual es contradictorio, porque las entidades se crean con el compromiso de brindar un servicio de calidad para cada ciudadano y no para hacer favores.

Para que los trabajadores de las instituciones estatales conozcan y traten de cumplir las tareas de una forma adecuada, se crean códigos, normas o leyes; una de estas, es la del servicio civil, que muestra lo comprometidos que deben estar los colaboradores al formar parte de alguna entidad de gobierno, aunque a veces como ya se hizo notar, existen malos elementos que no cumplen con esto.  Por otro lado están las empresas lucrativas, que también crean reglamentos y normativas para que sean seguidas por los empleados, en donde habrá integrantes que igual manera no las respeten, pero será mucho mayor el grado de compromiso que se alcance de los colaboradores de este sector.

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