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Presentación


Enviado por   •  9 de Julio de 2013  •  2.391 Palabras (10 Páginas)  •  245 Visitas

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Contexto Religioso de Jesús

En el mundo mediterráneo del siglo I, judíos y gentiles coincidían en muchas cosas. La mayoría de ellos creían en seres sobrenaturales, en alabar a Dios (o a Dioses) sacrificando animales, y en diversas clases de ritos y purificaciones En cuestiones éticas también había un amplio campo común: Todos estaban en contra del asesinato, el hurto, el robo y el adulterio.

El judaísmo común

1. Monoteísmo: Los judíos creían que solamente existía un Dios verdadero. Había creado el mundo y todavía lo gobernaba. Muchos judíos creían en otros seres sobrenaturales, ángeles y demonios (Pablo consideraba que la deidades paganas eran demonios (1 Cor. 10, 20)). Tales creencias, en la mentalidad de os judíos de siglo I, no constituían una negación del monoteísmo. Al final, Todos los demás poderes cederían ante el único Dios (1 Cor. 15, 24-26). Mientras tanto, solo ese Dios era digno se adoración. Los gentiles pensaban que los judíos debían de haber sabido ver esto, del mismo modo que una cerámica prueba la existencia de un alfarero. Los judíos, en cualquier caso, eran los receptores de la revelación y les estaba estrictamente prohibido tener trato con los dioses paganos.

2. La elección divina y la ley. Los judíos creían que Dios había escogido a Israel y había establecido una alianza con el pueblo judío, una alianza que obligaba al pueblo a obedecer a Dios y obligaba a Dios a guiar y proteger al pueblo. Los tres momentos más importantes en la historia del establecimiento de esta alianza fueron:

• La llamada de Abraham (Gn 17)

• El éxodo de Egipto (Ex 14)

• La revelación de la ley divina a Moisés en Sinaí (Ex10, 16)

3. Arrepentimiento, castigo y perdón. Quienes transgredían la ley debían hacer reparación si sus delitos perjudicaban a otros, arrepentirse y ofrecer un sacrificio. Las transgresiones que no perjudicaban a otros exigían arrepentimiento y sacrificio. Quienes no se arrepentían quedaban sujetos al castigo divino, que se manifestaba, por ejemplo, e n la enfermedad. Si aceptaban esto como correctivo divino por sus delitos, seguían siendo dignos miembros de la alianza. El mismo sistema, en general, se aplicaba a la nación en su conjunto Sus transgresiones conducían al castigo nacional, como la cautividad de Babilonia, y las calamidades conducían a la contrición humilde. Dios siempre redimía a su pueblo, y, pese a sus faltas, su pueblo siempre permanecía fiel a él.

Estas creencias constituían el núcleo de la “ortodoxia” judía. Inherente a ellas es la exigencia de la “ortopraxis”. Vamos a enumerar algunas de las principales prácticas que caracterizaban a los judíos observantes, señalando también de manera especial lo que distinguía a los judíos de los gentiles.

1. Los judíos tenían que adorar y servir a Dios. Esto suponía, sobre todo, adorarle en el Templo de Jerusalén. La Biblia exige que los varones judíos acudan al Templo tres veces al año, en las fiestas de peregrinación. En el siglo I, la dispersión de la población judía hacía esto imposible; los judíos procedentes de las regiones más remotas de Palestina probablemente iban al templo una vez al año, pero los que vivían en otros países muy raras veces realizaban esta peregrinación. Acudieran o no, los judíos pagaban el impuesto del Templo, que sufragaba los sacrificios ofrecidos en nombre de toda la comunidad. El culto judío, sin embargo, no estaba limitado al templo. Dt 6, 4-6 exige que los judíos recuerden los mandamientos principales dos veces al día (“cuando te acuestas y cuando te levantas”). La mayoría de los judíos probablemente obedecían las instrucciones de este pasaje. También utilizaban estos momentos de la mañana y del atardecer para la oración. La mayoría de las comunidades judías tenían sinagogas donde el pueblo se reunía el sábado para estudiar la ley y orar. Así los judíos adoraban a Dios ocasionalmente en el templo de Jerusalén, semanalmente en la sinagoga y diariamente en sus casas.

2. Los judíos circuncidaban a sus hijos varones al poco de nacer. Éste fue el requerimiento impuesto al pueblo por la alianza con Abraham (Gn 17).

3. Los judíos no trabajaban e sábado, el séptimo día de la semana (cuarto mandamiento. Ex 20, 8-11; Dt 5, 12-15). La Biblia hace extensivo el descanso a la familia entera, a los siervos, a los extranjeros que vivían en poblaciones judías y al ganado. Además, cada año séptimo los agricultores judíos de Palestina se abstenían de c7ultivar sus campos, y hasta la tierra descansaba.

4. Los judíos evitaban ciertos alimentos por considerarlos “impuros” y “abominables” (Lv 11; Dt 14). El cerdo y los mariscos son los dos alimentos más famosos prohibidos por la Biblia, pero hay muchos otros, como las aves de presa, los roedores y la carroña.

5. Antes de entrar en el Templo, los judíos tenían que purificarse. Las principales fuentes de impureza eran el semen, la sangre menstrual, otras emisiones de la zona genital, el parto y los cadáveres (Lv 11; 15; Num 19). La purificación religiosa previa al culto en el templo era parte integrante de toda religión en la antigüedad. La religión judía requería que los procesos corporales más íntimamente ligados con la vida y la muerte se mantuvieran alejados de lo que era santo e inmutable: la presencia de Dios. En el siglo I, algunos grupos ampliaron las normas de pureza más allá de los requerimientos bíblicos fundamentales. Por ejemplo, algunos se lavaban las manos antes de la oración; otros, antes y después de las comidas.

Diferencias con otros pueblos

• En la antigüedad todos los pueblos adoraban a sus dioses sacrificando animales, y todos mantenían templos. Los judíos se distinguían por tener solamente un templo y por adorar solamente a un Dios.

• Asimismo, en el mundo grecorromano todos guardaban días santos, pero no el día séptimo de cada semana.

• Casi todas las culturas tienen leyes alimentarias, aunque pocas las atribuyen a Dios.

• La circuncisión es un rito practicado también por otros semitas. Pese a ello, los judíos eran famosos por exigir la circuncisión, pues ésta ocupaba un lugar muy importante en su cultura.

Cómo veían esto los gentiles

Los gentiles consideraban las observancias judías dignas de atención, y algunos las ridiculizaban.

• Pensaban que era raro tener un templo sin ídolo, y antisocial

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