VALORACIÓN DE EMPRESAS

TEMA: REFLEXIONES SOBRE VALORACION DE EMPRESAS

INTRODUCCION

Los libros nos proporcionan conocimientos y nos dotan herramientas necesarias para lograr ampliar nuestro espectro educativo y de cultura general, este trabajo se ha realizado con la finalidad de tomar citas de autores importantes y especializados que han aportado su valioso contingente intelectual en lo que se refiere a Valoración de Empresas, y considerando que es una materia relativamente nueva que se nos está impartiendo la búsqueda de información es más imperiosa e incesante.

La Valoración Empresas busca cuantificar en medidas monetarias los elementos que conforman el patrimonio de la empresa, de la actividad que realiza, las potencialidades y otras características destacables. El resultado final es la estimación del valor de la empresa.

MARCO TEORICO

“El buen valorador se distingue por su capacidad de análisis de comprensión del negocio en el que está inmersa la compañía, que le permite anticipar amenazas y oportunidades, evaluando sus puntos fuertes y débiles” (ADSERÁ Y VIÑOLAS, 2003, p. 9).

El profesional o la persona que está a cargo de la negociación de la empresa, debe tener un amplio conocimiento de la compañía a la que representa, distinguir y evaluar todos los puntos con absoluta conciencia y ecuanimidad.

“La valoración de una empresa es un ejercicio de sentido común que requiere unos pocos conocimientos técnicos” (FERNANDEZ Pablo, 1998, p.27).

Cualquier persona que se atreva a valorar una empresa, puede hacerlo con solo tener conocimientos básicos de la materia, y un poco de sentido común.

“La carencia de una formación específica en la universidad sobre valoración; la diversidad de valoradores con formación muy diferente; la falta de bases de datos para los profesionales que les faciliten su labor; así como las continuas aportaciones investigadoras a este campo, hacen de la valoración una materia a un tiempo comprometida y atractiva, desconocida e interesante, laboriosa e intrigante” (ROJO, Alfonso, 2008 XV).

Valorar una empresa no es fácil, toda vez que hacerlo implica entrega de tiempo, de mucho sacrificio y entereza. En las universidades no se imparte los conocimientos necesarios para tal cometido, hay muy poca información en base de datos para facilitar la gestión, diferentes criterios de valoración y los continuos aportes de expertos hacen que valorar sea una tarea laboriosa.

“A la hora de valorar una empresa, se debe tener en cuenta la situación en la que se encuentra y lo que se quiere valorar. No es lo mismo valorar unos activos en funcionamiento, que una empresa en quiebra” (CASANOVAS Y SANTANDREU, 2011, p. 14).

Claramente podemos

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