¿A quién creer?

Francis A. Vélez                                                                        A00582225                                                

Caso para estudio:

Después del paso del huracán “María” un comerciante del pueblo llamado “Vituperio” abrió para que los compueblanos pudieran comprar aquellos alimentos de primera necesidad. Mientras hacían fila llegó el deambulante del pueblo. Este estaba solicitando que le ayudaran para comprar dos galones de agua. Uno para bañarse y otro para tomar cuando lo necesitara. Algunas personas le dieron dinero, pero otros lo insultaron. Le dijeron que era un sucio, que apestaba, que se fuera a otro lugar a pedir dinero y hasta se quejaron al comerciante. Le dijeron que, si no lo” echaba del lugar”, ellos no volverían a comprarle. El comerciante lo agarró por el brazo, lo empujó y lo tiró cerca del zafacón y le dijo “este es el lugar al cual tu perteneces, porque tú eres una basura”.

1.Por el simple hecho de existir y ser un ser  humano es digno de ser  tratado como persona.

2. Porque fuimos creados a a imagen y semana de Dios. Todos somos iguales y debemos amar al prójimo.

3. Reconocer como ser que piensa   él tiene el mismo derecho que todos y la misma necesidad porque estamos pasando por un proceso de recuperarnos de un huracán .

4.Como un ser libre, que puedo tomar mis decisiones , lo ayudo  por que según mis criterios morales   debo hacerlo

5. Porque al final  todo  ser humano que tiene moral  y tomo sus propias decisiones debería realizar un acto ético correcto.

Como dice Ricardo Arjona “vale más una mentira a una verdad que me amerge la vida” . Quizá no tanto por su duda razonable ante la posibilidad de conocer el mundo como es , como a la contradicción entre el mensaje de que toda cultura y toda interpretación de la realidad es legítima, y el intento de establecer una verdad absoluta. Es posible que la naturaleza humana, en última instancia, necesite certezas (“verdades”, existan o no). Por ello e independientemente de la aproximación a la “verdad”, frente a la racionalidad y positivismo, pasando por los posibilidades  o las limitaciones de lo que como  humano ante una realidad existente  podamos entender, lo cierto es que todas las corrientes se han querido apropiar de ella (LA Verdad), en última instancia. Se da entonces el resultado paradójico de que los dos sectores que más desprecian la “verdad”  establecen reglas sobre lo que está bien y lo que está mal, como sus opuestos  . Finalmente para quienes la “verdad” es sólo un bien, son quienes más atención le prestan.

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