Concepto de formacion en Gadamer

El Concepto De Formación En Gadamer Y Su Relación Con La Pedagogía

Marcos Disla Guzmán

Daniel Eduardo Calderón Martínez

        Mayo 2021

Universidad Pontificia Bolivariana

Escuela de Teología, Filosofía y Humanidades

Epistemología de la Pedagogía

Introducción

En el siguiente escrito se dará una aproximación al concepto de formación de Gadamer ofrecido por Ríos Acevedo en su escrito “Un acercamiento al concepto de formación en Gadamer” en la Revista Educación Y Pedagogía, esta aproximación al concepto de Bildung se realizará a partir de las definiciones ofrecidas de distintos filósofos como Herber, Kant y Hegel y por su puesto el punto de vista del mismo Gadamer respecto a lo que estos pensadores ofrecen.

Este concepto tan relacionado con la enseñanza y el aprendizaje desde la cultura en que el individuo se desenvuelve como sujeto histórico, nos ira guiando desde lo más externo que es el aprendizaje de las habilidades hasta lo mas profundo del ser, la formación de la identidad como individuo en ese ascenso de la humanidad a las ciencias del espíritu, donde Hegel nos propone esta ley natural en el que el hombre necesita de la formación para llegar a ser, lo que en el devenir va siendo.

Teniendo en cuenta lo que nos acerca Clara Ríos en el escrito acerca del concepto de formación, se mostraran las implicaciones en la pedagogía y como ha influido en lo que se debe y como enseñar y demás elementos a tomar en cuenta en la formación, así como el saber practico y el teórico, expresado en el escrito como phrónesis y la episteme.

Concepto de Bildung

Comprender al individuo es mirarlo en todas las esferas en que desarrolla y justo a eso apunta el concepto de Bildung, a la cultura que posee el individuo producto de la formación que le ha brindado el medio en que se ha desarrollado, entonces el Bildung pasa a ser no solo el proceso mediante el cual se adquiere la cultura misma (Ríos, 2010, pág. 17), la cual implica un desarrollo de todas las facultades que lo caracterizan e individualizan, dándole una identidad, dicha identidad que no depende de la presencia física es decir el cuerpo, sino de la formación del espíritu, que en Hegel apunta a cómo ha llegado a ser lo que es y no de saber cómo es posible que sea así lo que así siempre ha sido.

Este concepto está estrechamente ligado a la enseñanza, el aprendizaje y la competencia personal por lo que implica también esa carga o patrimonio cultural que el individuo expresa en el medio en que se desenvuelve.

Para Herder el Bildung fue denominado como “ascenso de la humanidad”, esto debido a que el hombre no es por naturaleza lo que debe ser y por ello está necesitado de formación. Esta formación en su carácter lo lleva a salir de los deseos privados, de la inmediatez de la necesidad personal, pero este proceso formativo se sigue nutriendo de las circunstancias históricas, de la cultura. "La formación pasa a ser algo muy estrechamente vinculado al concepto de la cultura, y designa en primer lugar el modo específicamente humano de dar forma a las disposiciones y capacidades naturales del hombre. (Ríos, 2010, pág. 17)

 En Kant se hace evidente la influencia de Herder en el concepto de formación y aunque él no emplea el término ascenso de la humanidad, explica que la formación consiste en darse forma, esto como una obligación consigo mismo, el cultivo de los propios talentos, en otras palabras, es una responsabilidad personal y que desemboca en esa autoformación de la identidad y el cúmulo de saberes que conforman al ser.

Gadamer difiere de Kant se opone a esta concepción del término de formación como un mero cultivo de las capacidades, entiende que es algo que va mucho más lejos de las meras habilidades y destrezas del ser humano, consiste en que "uno se apropia por entero aquello en lo cual, y a través de lo cual uno se forma", de una manera tal que "en la formación alcanzada nada desaparece, sino que todo se guarda. "En este sentido, formarse es un "constante desarrollo y progresión" que permite ser capaz de ver de otra manera, pero cada vez más abarcante: precisamente en esto consiste lo que Hegel nombra como ascenso a la generalidad. . (Ríos, 2010, pág. 18)

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