DISOMNIA- INSOMNIO

DISOMNIAS

Los pacientes con este tipo de problemas se preocupan no solo por la aflicción y la incomodidad inmediatas que provoca la incapacidad para dormir, sino también por los efectos de la falta de sueño en la vida familiar, la condición de empleo y el ajuste social en general. Los trastornos del sueño también ocurren comúnmente en varios trastornos definidos.

Las disomnias y parasomnias son los dos tipos de trastorno del sueño que se estudian más extensamente. Las disomnias incluyen anomalías en la cantidad, calidad y horario del sueño y las parasomnias se caracterizan por la conducta anormal o eventos fisiológicos que ocurren en relación con el sueño, ciclos específicos del sueño o las transiciones sueño-vigilia.

El DSM- IV- TR describe estos dos conjuntos de condiciones como trastornos primarios del sueño porque no se pueden atribuir a otras condiciones como trastornos primarios del sueño porque no se pueden atribuir a otras condiciones mentales o médicas o a abuso de sustancias. Existen muchos tipos de disomnias, que van desde el insomnio relativamente común hasta la hipersomnia menos frecuente.

INSOMNIA PRIMARIA

Ocasionalmente todos sufrimos cortos periodos de insomnio. Para muchas personas es difícil conciliar el sueño o mantenerse dormidos, y se quejan de no sentirse restablecidos o descansados al despertar. Aproximadamente 10% de los adultos experimenta dificultad persistente para dormirse o mantenerse dormido. Si la condición persiste durante un mes por lo menos, estas personas pueden sufrir de insomnio. El insomnio es el trastorno de sueño más común. Las consecuencias del insomnio son:

• La irritabilidad

• la ansiedad

• la depresión

• la dificultad al concentrarse

• Preocupación por los problemas del sueño

Tiende a prevalecer más en la edad avanzada y entre las mujeres. El curso del insomnio es variable va desde un mes o dos hasta un patrón de toda la vida, y con frecuencia ocurre en el contexto de otros problemas, como la ansiedad y la depresión.

Como síntoma, el insomnio refleja la percepción inadecuada de duración, continuidad o calidad o dificultad para conciliar el sueño.

Algunos individuos parecen ser enspecialmente susceptibles a problemas de sueño persistentes, aun así no padecen de estrés. Estas personas por lo común, tienden a manejar un nivel de excitación emocional elevado.

La activación emocional, el estado de animo, los hábitos del sueño, el ritmo circadiano y los procesos fisiológicos pueden jugar diferentes papeles en el trastorno del sueño. Por esta

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