Desarrollo infantil. Dos meses a 24 meses

Desarrollo físico

Dos meses a 24 meses.

Neuronal.

Por medio de la vinculación entre la corteza prefrontal y la emoción y recompensa, los niños evocan de manera selectiva el habla por las voces femeninas y es posible que sirva como sustrato neuronal para la atención y preferencia por las madres. (Sulpizio, Doi , Bornstein, Marc, Cui, Esposito, y Shinohara, 2018)

Visión

Inicia la proyección de imágenes llamadas dispares binoculares que ayudan a proyectar información distinta en ambas retinas para permitir la percepción de la profundidad y la forma. (Braun,  y Kasevk, 2018).

Audición.

Capacidad de procesamiento para beneficiarse de su rima natural de entrada para el desarrollo de sus capacidades fonológicas. (Hahn, Benders, Sniiders y Fikkert, 2018).

Capacidad para codificar y relacionar las señales del habla audiovisual y utilizarlas para guiar su comportamiento visual, gracias a los patrones de prosodia. (Dom, Weinert, y Falck,  2018).

Motor/Sensorial.

Demuestran conocimiento emergente sobre la configuración de su cuerpo al producir patrones de movimiento específicos asociados con el área corporal estimulada. (Somogyi, Jaquey, Heed, Hoffmann, Lockman,  Granjon, Fagard, y O´Regan, 2018)

Conciencia topográfica diferenciada del cuerpo (Somogyi et al, 2018).

Los bebés detectan correspondencias temporales y espaciales entre eventos que involucran su propio cuerpo y eventos visuales. (Somogyi et al, 2018).

Hasta los 4-5 meses de edad, los bebés producen principalmente respuestas motoras generales al tacto localizado. (Somogyi et al, 2018).

Etapa Preescolar (2-5 años)

Desarrollo Motor

En este periodo se da la transición desde habilidades motrices fundamentales refinadas hasta el inicio y posterior establecimiento de los primeros juegos y habilidades deportivas (Campo, L. et al,  2011).

Entre los 2 y 6 años el cuerpo infantil pierde su apariencia anterior y cambia en tamaño, forma y proporciones, cambiando así su desarrollo cerebral que lleva a la capacidad de un aprendizaje más perfeccionado y complejo y a un refinamiento de las habilidades motoras gruesas y finas (Campo, L. et al,  2011).

Desarrollo Neuronal

Zahler (2008), plantea que el desarrollo de las áreas sensoriales de la corteza cerebral y las conexiones adicionales entre el cerebelo y la corteza cerebral, se suman a una mayor capacidad pulmonar, muscular y esquelética, lo que se ve reflejado en las habilidades motoras y motrices de los niños que se encuentran en esta etapa.

Desarrollo cognitivo y del lenguaje

De acuerdo con lo planteado por Dorr, Gorosteguia y Bascuñan (2008), en esta etapa, el niño comienza a experimentar cambios en su manera de pensar y resolver los problemas, desarrollando de manera gradual el uso del lenguaje y la habilidad para pensar en forma simbólica. De este modo, se puede decir que el desarrollo cognitivo en la niñez temprana es libre e imaginativo, pero a través de su constante empleo la comprensión mental del mundo mejora cada vez más. (Berger, K., 2007).

Vinculo materno

La inestabilidad de la relación materna, en particular la disolución de una relación, está relacionada con los cambios en el hogar (por ejemplo, la crianza de los hijos, el conflicto entre padres) que puede conducir a una disminución en la seguridad emocional del niño. La inseguridad emocional resultante puede aumentar la excitación emocional y fisiológica, lo que puede servir para reducir la calidad del sueño del niño y, posteriormente, su bienestar (Rudd, 2018).

La Co-regulación emocional materna y la expresividad emocional se relacionan con la capacidad de los niños para regular sus emociones, por lo tanto las madres que muestran niveles más altos de emociones positivas y niveles más bajos de emociones negativas pueden crear un clima emocional más óptimo para que los niños aprendan y practiquen la regulación de las emociones (Tan & Smith, 2018).

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