El Liderazgo

El liderazgo en un enfoque muy utilizado para definirlo en situaciones muy formales, ha sido identificar a la persona con un rol directivo. También se considera líder a la persona que ocupa un puesto en un nivel de alta jerarquía en una organización. A los líderes solo podemos conocerles después de la realización de actos de liderazgo. Para Homans (1961). El líder de un grupo es el individuo con mayor autoridad, entendida como la capacidad de una persona en influir a un gran número de miembros en el grupo de manera regular.

El líder es la persona o centro de atención del grupo, el que ocupa la posición del liderazgo, el que adopta una conducta durante una situación y dirigida por medio del proceso de la comunicación, hacia el logro de una o varias metas específicas, el líder ejerce influencia interpersonal.

Dentro de las características de un Líder encontramos las de un mal líder: Autocrático (dominante, autosuficiente, absorbente) entre otros, el Paternalista (quiere quedar bien con todo el mundo, no quiere tener conflictos con el grupo, es el protector, quiere hacerlo todo) entre otros, existe el que suele no tener Normas (líder sin iniciativa, no dirige ni coordina, es inseguro) entre otros, así como encontramos también características de un buen líder: Participativo y exigente al mismo tiempo (no manipula al grupo, fomenta la participación, llega a lograr objetivos) entre otros. Existen 3 razones para que seamos mejores líderes: adaptarnos rápidamente a nuevas situaciones, rapidez ante una situación perjudicial para otros, Brindar la oportunidad de beneficiar e impactar positivamente a otros.

Dentro de los enfoques del estudio del Liderazgo encontramos los siguientes: teoría situacional del liderazgo; Esta teoría establece que la situación dada, posibilita que cualquier miembro del grupo pueda asumir responsabilidades de liderazgo en un momento dado, el líder es una persona que en un momento y en un lugar determinado muestra aptitudes o cualidades necesarias para el grupo. Teoría de la interacción; Este enfoque se caracteriza por la importancia que le aseguran a las interacciones entre el líder y el seguidor. Surge un planteamiento ¿Cómo influye uno en otro? puesto que es factible suponer que el jefe y el resto del grupo imaginan e interpretan de modo diferente una misma situación objetiva, entre líder y seguidor existe un flujo continuo de interacciones; así un miembro del grupo puede aparecer como líder en una circunstancia nueva.

En la teoría de los rasgos; se basa en la proposición de que todos los líderes eficaces poseen rasgos o características personales comunes que influyen causalmente sobre el éxito, si todos los líderes que tienen éxito alcanzaran una altura mayor de un metro noventa, esta teoría sostendría que por lo menos parte de ese buen resultado responde a tal característica. Por supuesto, se admite que estos líderes deben tener más de un rasgo común; pero existe una relación causal entre éstos y el éxito del líder. Seguidamente se presenta la teoría del adepto; esta es en realidad una modificación de la teoría de los rasgos. Si un líder consigue crear un equipo de subordinados competentes que tienen iniciativa propia y confían en sí mismos, ello es un indicio de buen liderazgo. Por otra parte, si los subordinados dependen excesivamente de la orientación del líder y carecen de competencia, puede afirmarse que el líder no logra cumplir bien con el conjunto de las obligaciones de liderazgo.

La teoría ecléctica; Es sintética, es una combinación de componentes de otras teorías. Aporta fases explicativas o información originada en otras teorías. Quizá La teoría ecléctica es la más útil, pues obtiene información de varias fuentes para explicar el liderazgo. Esta teoría puede ser de provecho para los estudiantes y los profesionales del liderazgo, porque les permite ampliar y combinar en

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