El proceso de cambio y transformacion

El proceso de “cambio y trans-formación” en el counseling

Lic. Juan Lombardini

El proceso de cambio y trans-formación en counseling constituye un eje importante para abordar tanto desde la teorización (marco del enfoque y de la concepción filosófica-antropológica) como del que-hace operativo dentro del ámbito de la relación de ayuda.

En términos generales, cambio hace referencia a una “mutación”, a “mudarse” de una estado a otro. Es una trans-formación , un pasar de una forma a otra.

Sin embargo, cambio y trans-formación constituyen junto al concepto de persistencia una paradójica relación por lo cual no pueden ser considerados por separado. No puede pensarse el cambio y la transformación si no hay algún estado de persistencia. Comparación y contraste entre estos dos términos es lo que les da sentido mutuamente (por ej. Si imaginamos un universo donde todo es azul, el concepto de azul no podría desarrollarse debido a la falta de contraste).

El cambio y la trans-formación no pueden ser pensados ni experimentados como un acto sino mas bien como un proceso.

Llevemos ahora estas ideas al ámbito del counseling.

Cuando recibimos a un consultante, encontramos en su discurso (en todos o en cualquiera de sus niveles: consciente-inconsciente; verbal; gestual; postural etc.) una cierta “queja”. Insinúa que hay algo que quiere “cambiar”. Esta queja tiene distintas intensidades subjetivas, que van desde una pálida sensación de molestia hasta una intensa angustia.

Pero es la “queja” el elemento subjetivo que debemos sondear para encontrar la clave de la motivación para que el consultante haya buscado un espacio de counseling. Podríamos afirmar: sin una mínima “queja” sobre si mismo o sobre alguna circunstancia de su vida no hay motivación para el cambio, luego no hay “consultante”.

Preguntarnos si hay consultante frente a nosotros es ir mas allá de que solamente haya una persona que concurre a la sesión. Es preguntarnos si es posible establecer una relación de ayuda profesional.

Esta pregunta es fundamental sobre todo para la tarea del counseling. Veamos porque.

Aunque cambio y trans-formación son conceptos similares, es importante que establezcamos una diferencia. Si bien ambos suponen la mutación de un estado a otro, el cambio puede ser operado desde afuera del sujeto u objeto que cambia, sin que por ello implique una trans-formación. Supongamos que una consultante relata que en las ultimas semanas ha sido victima de fuertes golpizas por parte de su marido y que no encuentra modo de defenderse dado que el la supera en fuerza. El counselor podría indicarle que es importante que por algún tiempo se vaya a vivir a la casa de un familiar o amigos de modo de quedar a salvo de la emergencia. Sin duda, esta intervención implicara un cambio, pero no nos asegura que la mujer comprenda y decida “desde adentro” que podría modificar para que estas situación no se repitan. Podríamos decir: el cambio solo puede ser una variable que el counselor introduce “desde afuera” y que opera como una

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