Exodo Rural

IMPLICACIONES SOCIALES Y PSICOLÓGICAS DE UN INDIVIDUO QUE VA DEL CAMPO A LA CIUDAD

Actualmente es relativamente fácil definir lo que es el éxodo rural, esto es la emigración de, por lo general, jóvenes y adultos jóvenes del campo a la ciudad. Pero dentro de tal definición es necesario mencionar que se incluyen fenómenos sociales de tipos muy diversos y adentrándome en este tema mi pregunta es, ¿Cuáles son las implicaciones sociales y psicológicas de un individuo que va del campo a la ciudad?

Tomando esta pregunta como punto de partida, en el presente ensayo me adentrare a desarrollar este tema que muchas veces no tomamos en cuenta, pero en realidad resulta muy interesante e importante para su análisis.

Las principales causas que encontramos para que se desarrolle el éxodo rural es la pobreza en los lugares de origen, el entorno social, los agentes económicos, los elementos políticos, el concepto de prosperidad y el derecho a la supervivencia, pero la emigración también tiene otros factores relacionados con los aspectos psicológicos y sociales que muchas veces no se toman en cuenta. Uno de ellos es la desintegración familiar, esto es importante ya que la familia constituye la célula fundamental de la sociedad, la mujer cuando se queda sola, debido a que su esposo ha emigrado, suele estar afectada por el acoso sexual, doble rol de jefa de hogar, baja autoestima, depresión, abusos familiares por los recursos económicos, intervención familiar, estigmatización social, pérdida de bienes y deseo de emigrar para recuperar al esposo. En el caso del varón que se queda sólo con los hijos porque su esposa ha emigrado, también es afectado por: doble rol, tendencia al alcoholismo, depresión, maltrato a niños/as y adolescentes, abandono a hijos/as, sentimiento de culpa, se siente mantenido, baja autoestima, sufre estigmatización, busca compañía, aprovechamiento de los recursos económicos, angustia, inseguridad. Los niños, niñas y adolescentes se enfrentan a: sentimiento de abandono, rebeldía, depresión, agresividad, inseguridad, incertidumbre, apatía hacia la escuela, pocas relaciones interpersonales, ausencia de valores, deserción escolar, bajo rendimiento escolar, baja autoestima, pérdida de identidad, abuso sexual, estigmatización, no visión de futuro, precocidad, trastornos en el aprendizaje, y pérdida de valores culturales.

Viéndolo desde el punto de vista del emigrante sea la mujer o el varón, podemos observar que este individuo se convierte en una persona socialmente vulnerable debido a su condición de “emigrante” y a que muchas veces no cuentan con las herramientas necesarias (lenguaje, conocimiento de la cultura urbanizada, redes sociales, recursos económicos) que les permitirían tener una adaptación exitosa a la ciudad de destino, por lo cual pueden ser objeto de discriminación. Como podemos ver, tanto la situación de las familias que quedan en las comunidades de origen, como de la persona que emigra es altamente preocupante y genera una desintegración familiar.

Cambiar de lugar de residencia no es fácil, pasar a ser un emigrante es un proceso que a veces genera tenciones internas ya que se da un cambio en torno a las responsabilidades, aspectos de cultura, de costumbres, en pocas palabras cambias drásticamente la manera de vivir y eso causa un desequilibrio que lleva consigo tristeza, estrés, insomnio o exceso de sueño, trastornos somáticos que incluyen dolores lumbares, alergias y el llamado “trastorno adaptativo”. Este trastorno consiste en manifestaciones o reacciones que se producen en el proceso de adaptación a la nueva sociedad, son estados de mal subjetivo y este depende de cómo cada individuo perciba el cambio, este es un proceso de duelo natural que viven los emigrantes ya que pierden en cierto grado su estatus, cultura y familia.

La adaptación del emigrante, se dará probablemente

...