Historia De Vida

No quería me decían que los acompañe a Guanare del estado portuguesa, a la comandancia general de policía porque allí es donde van a presentar los exámenes para el curso. Los acompañe; al llegar visualice que habían varias personas y que también Iván presentar no me preocupe, al pasar aproximadamente una hora llaman a todos los interesados a quienes los ubican un unas aulas para clases improvisadas.

Al pasar como unos 15 minutos me acerco por curiosidad en una de las aulas, en ese momento llega un policía uniformado, que me dice. Oye tu ¿vas a presentar o que carajos haces aquí? Respondí, no voy a presentar acompaño a mis amigos que están haciéndolo, vuelve a decirme ¿Por qué no presentas? Conteste no me gusta eso. Me pregunta ¿de dónde eres tú? Le dije de Turén. El policía de forma irónica responde: ¡de turen tenía que ser! Esos solo sirven para flojos, trabajar como esclavos en el campo y en qué carajo van a servir si son puros campesinos y analfabéticos, esa manera despectiva hizo que me disgustase y conteste; no soy analfabeta, tengo 3er año de bachillerato, además tengo estudios en la Escuela Técnica de la Marina de Guerra, es más soy reservista. El policía solo dijo “Pura Coba” además esto es para hombres y ni para niñitos mimados como tú, conteste, de todo lo que usted dice no soy, ahora para demostrarle que no tengo miedo, si voy a presentar y así lo hice

Después de haber aprobado las exámenes fácilmente, como a la media hora llega un policía uniformado que dijo llamarse Comisario BERMUDEZ, este se dirigió a todos amistosamente y sobre todo muy decente, este informo: los que aprobaron la evaluación escrita deben seguir viniendo porque hay otras evaluaciones

Regrese a casa donde me entreviste con mi madre contándole lo que hice y que había decidido hacer; asistí a otras evaluaciones y pose en orden los documentos que me entregaron, sin embargo para llegar a esa meta hubo que pasar mucho trabajo, ya que éramos de escasos recursos en unas ocasiones hubo dinero para ir y venir a Guanare, en oras era en cola, cuando había que esperar evaluaciones en la tarde e íbamos con poco dinero, nos reuníamos para comprar pan de panadería y suero para almorzar, siempre que sucedía eso lo hacíamos en el histórico parque los amanes en la cuidad de Guanare.

Fui trasladado a la escuela de policía de la Ciudad de Coro Estado Falcón, nos recibieron los instructores; los cuales en la primera semana dieron instrucciones presentaron profesores unos eran civiles, otros militares y cada uno de ellos reunía el perfil de la unidad curricular que le asignaron, por eso la escuela policial fue como un periodo de transición que me llevo a obtener conocimientos y así conocer más de la profesión policial.

Puedo indicar que al llegar a trabajar como funcionario, nos colocaban las barrera que éramos nuevos, recién llegados, de la escuela, haciéndonos la vida imposible, pero había llegado con sueños y proyectos al igual que funcionario que tenían más tiempo trabajando, uno de mis proyectos era sacar el bachillerato, pero los jefes me impidieron estudiar, cosa que cambio con la llegada de las misiones impulsando para entrase Presidente Hugo Chávez Frías que impulso los estudios y de esa manera cumplí unos de mi proyectos, graduándome de bachillerato de la república, además las misiones estudiantilizaron ayudaron también entre ellos misión sucre, obtuve mis título de Técnico Superior Universitario y Licenciado, esto con esfuerzo entre el trabajo y los estudios en mis 29 años de servicio desempeñando varios cargos importantes como Jefe de la Selección de Investigaciones, Jefe de puesto en la Parroquia Canelones, Comandante de la Sub-Comisaria de Playón (Santa Rosalía), Jefe de Los Servicios, Jefe de Patrullaje, Supervisor General de los Derechos Humanos, lo que si hay erradicar de la policía sobre todo en el nuevo modelo es el vicio de los altos Jefes que siempre utilizan funcionario en actividades que no guardan relación con la verdadera función policial, solo para satisfacer sus necesidades particulares, cabe señalar, que en mi tiempo en la policía siempre mi trato a mis superiores, sub-alternos y demás compañeros ha sido y será de respeto y cordialidad, con relación a la mujer policía existía mucha discriminación hacia ellas no solo de los jefes sino de la mayoría.

Con respecto a los asensos, era avaluados por los superiores y políticos quienes siempre daban el visto bueno, pero siempre existía los que siempre ascendían porque eran los protegidos ya sea de un político como de un jefe, por ejemplo un curso mío a los 14 años fue sargento mayor, existiendo según “la normativa cada 4 años eran los ascensos”, a propósito de irregularidad, fui uno de esos que no eran tomado en cuenta para ascenso, pues mi primera jerarquía (DISTINGUIDO) la obtuve el 15 de julio del 1992, es decir hace ocho (8) años después de mi ingreso a la policía del estado portuguesa. En materia de cursos y entrenamientos para lograr ascenso no había, aunque si existían cursos para oficial o inspector, en este sentido también había mafias, ya que los hijos de los jefes, políticos, en ocasiones personas (civiles) que no conocíamos en la policía eran los afortunados. De igual manera en el paso del tiempo hemos sido invadidos por funcionarios de los cuerpos policiales que decían que eran: por ejemplo comisario y así quedaban, quien le daba ese ascenso no sabíamos y algo a veces eran funcionarios dado de baja en otras policías y eran recibidos por todo lo alto.

Respecto al arma de reglamento y su uso; en muy pocas ocasiones hecho uso de ellas, resalta también que las veces que lo hice fue en causa resaltante, también que las veces que lo hice fue en causa justificada y en defensa propia por ejemplo: cuando la use en un enfrentamiento el 02 de febrero del año 1992, que fue un día domingo en la mañana cuando en labores de patrullaje a la altura del caserío Paricua-Turen-Portuguesa, interceptamos un vehículo sospechoso de robo y al darle la voz de alto los ocupantes del vehículo en mención, nos dispararon en varias oportunidades, donde uno de mis compañeros recibió un impacto en la cabeza repetí el ataque disparándole dos veces, a pesar que no es costumbre usar el arma sentí un poco de nervio; hay que tener muy en cuenta que el arma de fuego solo debe usarse, cuando se hayan agotado los de más recursos, de defensa de terceros y último caso para salvar una vida incluso la nuestra.

En toda mi estancia como policial del estado portuguesa jamás y nunca he llegado integrar un grupo de elite o espacial.

Cabe decir, que mi familia siempre se ha mantenido al margen de si soy no soy policía, siempre tenemos poco tiempo para compartir con la familia, quedándome poco tiempo también para llevar a

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