Investigacion Cualitativa

INTRODUCCIÓN

En muchas oportunidades podemos ver que los alumnos universitarios se ven desgastados frente a las exigencias que requieren los ramos de su carrera, es por esto que consideramos importante saber qué pasa con la motivación de los estudiantes que en ocasiones tienden a bajar sus notas.

Hay diversos componentes que afectan a la motivación, estos son el afectivo, el de valor y el de expectativas propias de cada persona.

El diseño de investigación que se abordará es de enfoque cualitativo, no experimental, de corte transversal correlacional-descriptivo, basándose en describir si existe relación entre las variables motivación y rendimiento académico de los estudiantes universitarios.

FORMULACIÓN Y JUSTIFICACIÓN DEL PROBLEMA

 Se formula la siguiente interrogante sobre el fenómeno o problema a investigar:

¿Qué relación existe entre la motivación y el rendimiento académico de los alumnos universitarios?

 Justificación del problema a investigar:

La relación existente entre motivación y rendimiento es de gran importancia para la psicología, ya que la motivación es una variable que afecta y repercute activamente en los procesos como: la enseñanza y el aprendizaje, conceptos abordados ampliamente por distintos autores en la psicología, entre los más conocidos encontramos a Watson y Banduras.

OBJETIVOS

 Objetivo General:

 Determinar la relación que tiene la motivación con el rendimiento académico en estudiantes universitarios.

 Objetivos Específicos:

 Identificar el desarrollo de las interrelaciones sociales con la influencia que tiene sobre la motivación el rendimiento académico de los alumnos universitarios.

 Determinar el rendimiento académico en relación con la motivación extrínseca que tienen los alumnos universitarios.

 Establecer la relación que existe entre las emociones personales y la motivación académica de los alumnos universitarios.

HIPÓTESIS

 La motivación está relacionada al rendimiento académico en estudiantes universitarios.

MARCO TEÓRICO

Con la “revolución cognitiva” en los años 60 se empieza a desplazar los modelos de aprendizaje como la caja “caja negra”. Se enfatiza el interés por estudiar lo cognitivo del sujeto en donde existen variables importantes como la motivación.

Durante los años 70 estas dos líneas de investigación, venían componentes en propuestas integradoras sobre cómo tiene lugar el aprendizaje. Como resultado, surge un conjunto de preceptos teóricos acerca de la práctica educativa, los cuales asignan un valor importante a las relaciones e interacciones entre la motivación, las estrategias de aprendizaje y el rendimiento de los estudiantes, en diferentes niveles académicos (Dweck, 1986; Nicholls, 1984; Weiner, 1985).

En la década de los 80 y hasta hoy en día se debe de mencionar que el componente afectivo, que se refiere a la ansiedad, tiene mucha importancia en relación a la motivación del alumno en consecuencia de las expectativas que influyen poderosamente en ellos (Dweck, 1986; Nicholls, 1984; Weiner, 1985).

Los componentes motivacionales incluidos en estos modelos se corresponden con una concepción cognitiva de la motivación, en la que las percepciones y cogniciones de los estudiantes son consideradas cruciales para rendir en las tareas académicas (Dweck, 1986; Nicholls, 1984; Weiner, 1985).

Motivación

Según Gerrig y Zimbardo (2005) la motivación es el termino general para designar todos los procesos implicados en el inicio, dirección y mantenimiento de las actividades físicas y psicológicas, la palabra motivación proviene del latín moveré, que significa “mover”.

Según Naranjo (2009) la motivación es un aspecto de enorme relevancia en las diversas áreas de la vida, entre ellas la educativa y la laboral, por cuanto orienta las acciones y se conforma así en un elemento central que conduce lo que la persona realiza y hacia qué objetivos se dirige, como cita Naranjo a Santrock (2002), “la motivación es el conjunto de razones por las que las personas se comportan de las formas en que lo hacen. El comportamiento motivado es vigoroso, dirigido y sostenido” (p. 432).

Por lo cual Herrera, Ramírez, Roa y Herrera

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