ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

LA PSICOLOGÍA SOCIAL, CIENCIA DE LA INTERACCIÓN HUMANA

alex_uasEnsayo4 de Noviembre de 2018

10.536 Palabras (43 Páginas)657 Visitas

Página 1 de 43

LA PSICOLOGÍA SOCIAL, CIENCIA DE LA INTERACCIÓN HUMANA

Introducción:

Psicología social, psicosociología y sociopsicología son algunas de las denominaciones que casi indistintamente se emplean para designar un mismo campo científico, siendo entre nosotros los más frecuentes la primera de ellas.

Cuando se quiere indicar un año, para la aparición de la psicología social suele darse el 1908, porque en él aparecieron dos manuales de la materia, uno a cargo de McDougall desde la psicología y otro desde la sociología por Ross.

Desarrollo histórico y situación actual:

Los antecedentes filosóficos de la psicología social son los de la ciencia social en general.

Wilhelm Wundt, considerado padre de la psicología experimental, escribió un monumental tratado de Psicología de los pueblos, donde explicaba aquellos productos culturales como la expresión del alma popular creados por los procesos mentales superiores de los individuos.

La psicología de las masas. Gustave Le Bon escribe un famoso libro con este título. En él, se refiere al alma de las masas y estudia el comportamiento irracional de éstas desde una ideología reaccionaria y un enfoque patológico, que influyó en las concepciones de Freud y de Hitler al respecto. Otra fuente importante son los estudios de la criminología italiana, interesada por las masas como factor criminógeno. También en este caso, se trataba patológicamente el fenómeno masivo.

La psicología social pasa a ser vista ya como una interpsicología ya como el estudio de la interacción entre la conciencia individual y la sociedad.

La introducción de McDougall explicaba la conducta social a través de los instintos, entendidos como impulsos innatos hacia la lucha y el deseo.

Elton Mayo estudió la productividad en la industria y descubrió el clima del grupo y la importancia de las relaciones humanas en la empresa. Jakob Moreno creó la sociometría, que es tanto una terapia basada en la representación teatral del problema por el propio paciente como una prueba para medir las relaciones de atracción y rechazo entre los miembros de un grupo. Kurt Lewin, desde su psicología topológica o del campo, concibió la persona en función de sus interacciones con el medio.

Los años treinta representaron la consolidación de los estudios psicosociales.

LA SEGUNDA MITAD DEL SIGLO, la guerra mundial fue una causa perversa que estimuló la investigación social en muchos aspectos, extendiendo el abanico de intereses a nuevos temas.

La psicología de los grupos fue profundizada en el contexto militar en un extenso estudio sobre el Soldado Americano.

Fritz Heider inaugura una nueva temática: cómo atribuimos causas a lo que hacemos o pensamos nosotros en los demás. También se interesa por cómo conseguimos conservar nuestra coherencia cognitiva, lo cual le lleva a estudiar en este aspecto el cambio de actitudes.

En el conductismo social se afirma sobre todo a través de la propuesta de George Homans de entender la conducta social como un intercambio en términos de ganancias y costos, y de la modificación de la conducta a través de modelos estudiada por Albert Bandura en sus principios de modificación de la conducta.

En Rusia, luego de un período de inactividad forzada, se intenta construir una psicología social de base materialista dialéctica e histórica.

El hecho más importante de los últimos años está en la llamada crisis de la psicología social. El origen de esta crisis está en la acusación de que las investigaciones psicosociales son socialmente irrelevantes, porque entre otras cosas que emplean el método experimental poco antes cuestionado por entender que banaliza la interacción social.

La polémica fue inmediata y culminó en los setenta con la publicación en cadena de El Contexto de la psicología social, La Explicación de la conducta social y La Reconstrucción de la psicología social.

En realidad esta crisis no fue sino una más de las crisis propias del proceso constitutivo de cualquier ciencia.

Es más, cada vez que emerge un nuevo paradigma se produce una crisis más o menos intensa y ya se ha visto que en la última crisis no han faltado propuestas en este sentido, lo que delataba que en buena parte era una crisis de identidad.

El punto de vista de la psicología social:

Reduccionismos y autonomía. En la construcción de la psicología social como ciencia han intervenido distintas disciplinas, desde la sociología y la psicología hasta la psiquiatría y la antropología.

El psicólogo reduce la psicología social a una rama, más o menos especializada de la psicología, mientras que el sociologismo hace lo mismo con respecto a la sociología, en cuyo caso hay cierta confusión entre la psicología social u la microsociología.

La interdisciplinariedad considera la psicología como un campo producto de un área del conocimiento común a la psicología y a la sociología, y en este sentido distinto al de una y otra.

EL EJE INDIVIDUO-SOCIAL.        

La psicología se ocupa del comportamiento humano de carácter unipersonal, mientras que la psicología social y la sociología se ocupan del comportamiento social, el objeto de cada una de estas ciencias es cualitativamente diferente.

Una comprensión global del comportamiento parece inaccesible al conocimiento científico, por limitaciones metodológicas y probablemente también por limitaciones epistemológicas, ésta es la razón del ser de los diversos campos disciplinares. El problema está en que estos campos trocean el comportamiento y al final en vez de estudiar a la persona estudiamos un cadáver.

A menudo, el individuo y sociedad son tratados como dos realidades en oposición, cuando de hecho son complementarias.

La multidimensionalidad del comportamiento:

El eje tempoespacial.

Hay al menos otras dos ciencias que tratan de un modo general el comportamiento. Son la antropología cultural y la historia.

La antropología se propone estudiar integralmente el ser humano como tal y sus productos a través del fenómeno cultural.

En cuanto a la historia, ocurre lo contrario, porque tiene su razón de ser en la dimensión temporal del comportamiento social.

Si la psicología, la psicología social y la sociología se mueven en diferentes planos de la observación, la antropología y la historia responden al eje tempoespacial de la realidad, eje que hay que relacionar con aquellos planos.

El eje bioecológico. Desde Grecia, la discusión de si nuestro comportamiento es un producto de la herencia o del ambiente, o lo que es lo mismo si el ser humano como tal es un producto biogenético o sociogenético, dio lugar a sendas tradicionales del pensamiento filosófico.

Al partir radicalmente de los instintos, la teoría de McDougall vino a reducir lo social a lo biológico.

Aparentemente, la nueva etología surgida en los años treinta, le ha dado un impulso, especialmente a través de los patrones fijos de conducta. Estos patrones requieren una pauta motora fija heredada, pero esta pauta no entra en acción sin unos determinados estímulos del medio que orientan la respuesta.

Últimamente, ha surgido un biologismo radical con la sociobiología o estudio sistemático de las bases biológicas de cualquier comportamiento social. Con base en los datos de la genética de las poblaciones, se afirma que dicho comportamiento está genéticamente determinado. Los genes, que gobiernan la selección natural, son “egoístas”; su razón de ser es sobrevivir y propagarse en competencia con otros genes. Y el ser humano como animal está programado a tal fin.

La acusación de determinismo biológico no es correcta, porque en realidad se trata de un probabilismo que no relaciona conductas y genes particulares.

Otra disciplina reciente se interesa también por el vínculo entre lo biológico y lo psicosocial. Actualmente en formación, la psicofisiología social se ocupa de los eventos fisiológicos, reales o percibidos, y de los efectos verbales o comportamentales de la asociación humana a través de procedimientos psicofisiológicos de carácter no lesivo.

La perspectiva psicosociofisiológica, moderna y operativa, puede indagar aspectos inéditos del vínculo indicado.

En la historia del pensamiento son constantes dos líneas bien definidas: una biologicista y otra ambientalista, teniendo la primera del pensamiento político de la derecha y la segunda al de la izquierda.

Puede concluirse que no hay oposición entre la naturaleza y la cultura, y que para entender el multidimensional comportamiento humano es preciso tener en cuenta, además del eje individuo-sociedad y del eje tempoespacial, el eje bioecológico.

Un modelo integrador. La multidimensionalidad del comportamiento humano implica que en las relaciones interpersonales intervienen los tres ejes descritos.

El punto de mira de la psicología social:

Relación, interacción e influencia. La comparación de la psicología social con la psicología y la sociología ha permitido identificarla con el estudio de las manifestaciones interpersonales del comportamiento humano. Esto puede entenderse, como relaciones interpersonales que conllevan una interacción.

El objetivo de la psicología social está, constituido por los tres aspectos a la vez. Así, la psicología social como ciencia que se ocupa, desde el plano de las relaciones interpersonales, de la interacción a través de los efectos de ésta.

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (67 Kb) pdf (245 Kb) docx (40 Kb)
Leer 42 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com