La obsesión del ser humano

Ana Rábade Carús

LA OBSESIÓN DEL SER HUMANO

¿Qué es la obsesión? ¿por qué el ser humano se obsesiona? ¿es la obsesión algo bueno malo y hasta qué punto?

Según la psicología la obsesión es un problema que logra afectar a muchos seres humanos y puede presentarse de muchas formas: obsesión por un objeto, una meta, un deseo o por una persona. La obsesión es una idea fija que se desea con tenaz persistencia, incluso más allá de los esfuerzos por liberarse de el problema. Algunos dicen que cuando la obsesión es pequeña puede ser, incluso, algo bueno que puede ayudarte a crear una virtud, que la obsesión de alcanzar algo puede, incluso, ser mejor que tener talento, por ejemplo: alguien que tiene talento tocando el violín y practica una hora al día no será mejor que alguien que se obsesiona con ser el mejor violinista y que para ello practique 4 horas al día. El problema con las obsesiones comienza cuando estas van más allá de lo saludable y sobre todo cuando las obsesiones son por personas. Cuando un ser humano se obsesiona con otro, ya sea por una idea de ella, por odio o por supuesto amor, puede arruinar la vida, no solo del obsesionado, sino del que se está obsesionado por. Algunas personas que tienen este problema desean complacer a toda costa al otro, mientras que otros simplemente les deseas el mal. Sin embargo, sea cual sea, en todos los casos el obsesionado pasa gran parte de su tiempo, si no es que todo, pensando en ese otro, y jamás hacen cosas, de forma desinteresadas, todas sus acciones son para conseguir algo más, buscan que lo “quieran” de igual forma, el poder controlar al otro, tenerlo cerca siempre que ellos quieran, chantajearlos, desean ser notados, que ellos se vuelvan tan importantes para el otro como el otro lo es para ellos.

Tras leer estas tres novelas, El Gran Gatsby, Noches Blancas y Abel Sánchez, pude ver tipos diferentes de obsesión: obsesión posesiva, obsesión soñadora y obsesión de envidia, se puede ver cómo cada personaje va desarrollando su obsesión cada vez más y qué decisiones toma basándose en este problema. Y a través de este ensayo quiero debatir y tratar de contestar las preguntas, decidir si la obsesión de alguno de los personajes es buena, si alguna de sus actitudes y/ o decisiones fue correcta, o si en los tres casos su obsesión fue mala, y los cegó por completo.

Por un lado tenemos la obsesión ilusa y caprichosa de Gatsby por poseer a Daisy. Gatsby es un hombre que al principio se pensaría que lo tiene todo, que consiguió todo aquello que quería, reputación, dinero, fama, etc… Es alguien que ha conseguido el sueño americano de los años 20’s. Sin embargo te das cuenta con el tiempo que, aunque sí tenía todo esto, él no es feliz, ya que todo eso no era suficiente. Él en realidad siente que no tiene nada, simplemente porque aún no ha podido conseguirla a ella, a lo que desea en verdad. Todas las cosas que Gatsby empezó a hacer con el propósito de ser alguien, ya que desde pequeño siempre pensó que él había nacido para algo importante, al final se terminan haciendo cosas que necesita para conseguir una meta mayor, para tenerla a ella.  Todo lo que ha hecho, al final del día, ha sido por perseguir la fantasía de una mujer perfecta, de esa chica de la alta sociedad que lo vio, de un amor verdadero y único que tuvo y que perdió hace cinco años, el ideal de una joven que, según lo que él cree ciegamente, lo amo, lo ama y siempre lo amara. “Había pagado muy alto precio por haber vivido demasiado tiempo con un solo sueño”.  Cuando logra tener el dinero que quería, lo usa para comprar un a casa justo enfrente de ella, cuando logra tener la fama para poder hacer fiestas enormes a las cuales todo el mundo quiere asistir, las hace para verla, todo lo que logra y consigue lo mueve alrededor de ella, siempre pensando en poseerla. Pero Daisy es simplemente algo bello que tuvo una vez, sin embargo, como dice la novela, “Todas las cosas bellas y llenas de luz se desvanecen tan rápido... Y jamás regresan”. Gatsby es un personaje que pierde totalmente su inocencia y su bondad simplemente por no dejar a esa cosa llena de luz irse. Está tan obsesión que ni siquiera puede ver la realidad, no siente que esté en una competencia por ella, que además va perdiendo, ya que, a sus ojos ella siempre ha sido suya y el suyo, jamás ha habido ni habrá espacio para alguien más en sus corazones. Incluso cuando ella acepta huir con él porque “si lo ama”, él necesita oírla decir, enfrente de todos, que a jamás amo a Tom, que siempre fue él, pero cuando ella no es capaz de hacerlo, lo cual no hubiese sido nada malo en el caso de que ahora Gatsby si fuera el único, algo en Gatsby se rompe. “Ha perdido para siempre la mejor parte de su vida; la más pura y la mejor”.  Sin embargo su obsesión es tan fuerte, que se convence a sí mismo que Daisy solo dijo eso por presión. Ninguna de las cosas que haga Daisy, ver cómo escoge a otro sobre él, su actitud ante la muerte de Myrtle, nada, lo hará cambiar su opinión sobre ella. “Se había aferrado a una última esperanza, y no podía zafarse de ella”.

En este caso, la obsesión es algo completamente dañino, algo que le destruye la vida a un buen hombre, a alguien que solo buscaba tener las cosas que él creía lo harían realmente feliz. Es algo que va más allá del amor, ya que ni siquiera la quiere realmente, nunca piensa en ella, en lo que quiere, lo que necesita o lo que realmente la hará feliz. En su cabeza él es lo único que ella puede querer, lo único que necesita, lo único que la puede hacer feliz, incluso si ella no se da cuenta.

Después tenemos la obsesión soñadora de el Narrador en Noches Blancas. El Narrador de esta historia es un joven soñador que no tiene a nadie, no tiene amigos, familia, ni siquiera con quien hablar. Se pasa los días de aquí para allá soñando con el amor y con lo que no tiene, en vez de hacer cosas para conseguir estas. Una noche, rescata a una joven llamada Nastenka y de ahí nace su obsesión. Desde el primer momento que habla con ella nos podemos dar cuenta de cómo la obsesión empieza. “Soy un soñador. Hay en mí tan poca vida real, los momentos como este, como el de ahora, son para mí tan raros que me es imposible no repetirlos en mis sueños. Voy a soñar con usted toda la noche, toda la semana, todo el año. Mañana vendré aquí sin falta, aquí mismo, a este mismo sitio, a esta misma hora, y seré feliz recordando el día de hoy. Este sitio ya me es querido”. Está es una obsesión completamente diferente, este es un hombre con una personalidad que podría parecer mucho más normal el nacimiento de una obsesión, ya que este no tiene absolutamente nada ni a nadie, por lo que sería un poco comprensible que se apegue profundamente a la primera persona que le ha prestado atención, sin embargo su obsesión es mucho más inofensiva, más pequeña. Puede que sea porque para él, el simple hecho de ser escuchado por ella lo hace feliz, a sus ojos eso es más que suficiente. El narrador, de hecho, sí se procura a lo largo de la novela por Nastenka y si busca hacerla feliz, a diferencia del resto. Él no desea poseerla, de hecho la ayuda y la obedece cuando ella le pide que la ayude a buscar al hombre al que ella amó en el pasado. Gatsby no puede aceptar que no haya sido el único en el pasado, mientras que el narrador acepta que el puede no ser el único ni ahora ni nunca.  Se podría debatir diciendo que el amor de el Narrador no se puede comparar al de Gatsby, ya que él ha conocido a Nastenka por solo algunos días, mientras que Gatsby y Daisy fueron novios y si estuvieron enamorados por un tiempo. Pero aún cuando ambos buscaban lo mismo, la mujer perfecta y el amor que esta da, las decisiones que toman y la forma en las que hacen todo son completamente diferentes. El Narrador, incluso después de conocer por tampoco a Nastenka, piensa más en ella, de lo que Gatsby por Daisy.

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