La transición en lo social. Ensayo

La transición en lo social

El grupo social espera que el adolescente domine cuatro tareas evolutivas: debe establecer un comportamiento socialmente responsable; desarrollar las habilidades y conceptos de mayor autonomía por medio de la independencia emocional y respecto de sus padres y de otros adultos.

Las adolescentes, incluso es mayor medida que los varones, se interesan por mejorar sus ajustes sociales. No es que los varones tengan mayor éxito, sino que hay diferencia cuyo origen puede deberse a dos factores, a saber: primero, las muchachas son más maduras en sus actitudes que los muchachos de su misma edad y en consecuencia, ven antes que estos problemas desde una perspectiva adulta; segundo, la vida social de las chicas es más dependiente del tipo de adaptaciones sociales que logren.

La socialización es el proceso de aprendizaje de la conformidad a las normas, hábitos y costumbres del grupo. Es la capacidad de conducirse de acuerdo con las expectativas sociales.

Puede emplearse cuatro criterios para juzgar a un adolescente social: 1) una conducta que se conforme a las normas aprobadas por el grupo; 2) un desempeño correcto de la función social prescrita por el grupo; 3) actitudes sociales que lleven a la conducta aprobada, y 4) satisfacción personal derivada de la conducta social.

Un adolescente asocial es aquel que, debido a su ignorancia de las expectativas sociales, no puede adaptarse a uno o más de los criterios de una persona social. Por el contrario, un individuo antisocial es consciente de las expectativas sociales, pero no se conforma a ellas porque por una u otra cosa no lo desea.

Función de las expectativas sociales en la socialización

Desde una perspectiva de largo alcance, el valor de la socialización no se limita a la delicada y a los autos conceptos favorables; influye en el grado de éxito que la persona logra en la vida. La razón más importante para fomentar la socialización en el adolescente es que el patrón de adaptación social establecido en la adolescencia quizá determine su nivel de socialización para el resto de su vida.

Dificultades que presenta la transición social

Bases defientes La preparación insuficiente y la identificación con personas mal adaptadas en los años formativos proporcionan bases deficientes sobre las cuales no es posible construir en la adolescencia las pautas de conducta social propias del adulto.

Falta de guía Padre y docentes creen a manudo que el adolescente se convertirá automáticamente en un individuo mejor socializado. Con frecuencia, los jóvenes a quienes “no gusta ser mandados” rechazan el consejo adulto.

Falta de modelos aptos para la imitación Muchas veces los modelos proyectados por los medios masivos son inadecuados porque sus pautas de conducta no siempre se conforman a las normas grupales aprobadas. La imitación de un compañero que goza de popularidad significa de ordinario el aprendizaje de pautas de conducta que se adaptan a las normas juveniles, no a las adultas.

Falta de oportunidades para los contextos sociales El adolescente que no disfrute de aceptación social y que no tenga tiempo o dinero para participar en las actividades propias de su edad estar privado de oportunidades para aprender a ser social.

Falta de motivación El adolescente que obtuvo poca satisfacción de los contactos sociales cuando era niño tenga escasa motivación para dedicarse a las actividades sociales.

Diferentes expectativas sociales Dado que los diferentes grupos sociales cuentan con normas distintas de conducta aprobada, con frecuencia el adolescente piensa que debe ser como el camaleón y cambiar de color cuando se enfrenta con personas y situaciones diferentes.

Nuevas clases de grupos sociales Remplazan a la pandilla infantil, el adolescente debe aprender a adaptarse a miembros del sexo opuesto así como también a compañeros de distintos antecedentes, valores e interés.

Cambios en los agrupamientos sociales

Cuando salen de la transformación física que acompaña s la pubertad, los jóvenes adolescentes sienten otra vez la necesidad de una vida social. Entonces intentan crear una sociedad particular capaz de satisfacer sus intereses y necesidades más maduros.

Camaderia Son compañeros y confidentes inseparables. Se conocen desde la infancia y descubrieron quien tiene interés común. Solo tiene dos o tres camaradas, que pertenecen a su mismo género.

Camarillas Se constituye con grupos unisexuales, más tarde, se despiertan las citas. Sus actividades son sociales y ocupan el tiempo sus miembros tanto fuera y dentro del salón,

Barras Varias camarillas unidas por interés y valores análogos. Las barras son los grupos más numerosos.

Grupos formalmente organizados Grupos creados por las iglesias, escuela a fin de proporcionar actividades sociales a todos los adolescentes. Los participantes no son elegidos por sus pares, pero se congregan debido a interés comunes

Pandillas adolescentes Se componen de individuo s despreciados o rechazados, con frecuencia participan personas de ambos sexos y predomina en sus actividades el tono perturbador a manera de venganza por la repulsa de sus pares.

Cambios en las amistades

Los amigos desempeñan un papel crucial en la socialización. La clase de amistades que tenga el adolescente determinara en gran parte si ha de convertirse en una persona social, insocial y antisocial.

Autonomía en la selección de amigos.

El adolescente insiste en elegir el mismo sus amigos. Cuando sus padres tratan de persuadirlo de que intime con personas que ellos consideran correctas, el joven se resiste no porque considere que la selección paterna es incontable sino porque lo ofende la interferencia paterna.

Cantidad de amigos

El adolescente de menor edad considera que contar con una gran cantidad de amigos es un signo de popularidad. A medida de decrecer el número de amigos del adolescente, se ensancha su esfera de relacionarse.

Cualidades que desean en sus amigos.

Un amigo debe ser alguien en quien se pueda confiar y de quien sea posible depender, alguien con quien se pueda conservar y cuyos intereses sean similares a los propios. Además, debe tener una buena apariencia, ser simpático con la gente y vivir lo bastante cerca como para que selo pueda ver con frecuencia.

Dos factores explican la causa de que el adolescente revise sus criterios para escoger sus amigos, el primero es un cambio en las necesidades sociales.

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