ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Las tres preguntas, ensayo primera oarte ¿Quién soy?


Enviado por   •  10 de Marzo de 2020  •  Ensayos  •  834 Palabras (4 Páginas)  •  202 Visitas

Página 1 de 4

[pic 1]

                     Capítulo 1[pic 2]

                                 ¿Quién soy?

Para definir quiénes somos es importante señalar la importancia que tuvieron nuestros padres en nuestra formación ya que ellos tienen el porcentaje más alto de enseñanza pues nos aportaron conocimientos que llevaremos a lo largo de nuestra vida. En el mundo en el que vivimos los padres debería estar conscientes que no siempre van a estar para resolver nuestros problemas, ahora solo tienen una tarea esencial que es enseñar a los hijos a crear y construir sus propias herramientas. Pero aún sigue habiendo padres sobreprotectores, esa esencia es muy peligrosa porque si los padres hacen esto con tanta pasión, los hijos nunca van a poder aprender a resolver los problemas por sí mismos. Antes la adolescencia se daba de los 13 a los 22 ahora se da a partir de los 10 hasta los 27 años es indignante ver como los padres no dejan a los hijos que se vuelvan responsables, lo único que causan con esta actitud es volverlos caprichosos, inmaduros y la rebeldía y que pasa después, los hijos exigen su protección y su ayuda con simples palabras de tú me tienes que ayudar porque yo nunca pedí que me tuvieras o porque lo tuyo es mío.

Esto debería entender los padres que tarde o temprano los hijos se van pero depende mucho de ellos que puedan emprender el vuelo sin depender de nada ni de nadie. Para la autodependencia se necesita estar en sintonía con lo que sucede a nuestro alrededor, tener amor a uno mismo porque antes de amar a otra persona tenemos que amarnos primero, y así generar y nutrir el amor en distintas personas.

El autor nos hace «la alegoría del carruaje» que relata que un hombre un día recibe un regalo, un carruaje. Después sale su vecino quien le dice que le faltan los caballos para que el carruaje se mueva. El hombre va por unos caballos fuertes y los amarra al carruaje, entonces éste avanza. El dueño del carruaje disfruta del paisaje que cambia constantemente hasta que empieza a sentir que va muy rápido y por caminos peligrosos, es cuando su vecino aparece otra vez y le dice que le falta un cochero.


El hombre del carruaje consigue un cochero. Esta vez puede el hombre subir al carruaje y verdaderamente, disfrutar su viaje. Explica que nuestro primer regalo es nuestro cuerpo que es una especie de carruaje diseñado especialmente para cada uno de nosotros, capaz de adaptarse a todo y acompañarnos durante todo el viaje. También explica que para que nuestro carruaje se mueva necesitamos caballos, es decir, deseos, necesidades, pulsiones o afectos.

Como el autor lo dice en su libro, esta pregunta es la que te ayudara a definir con más seguridad el camino que tomaras, su dirección y también nos dará tantas herramientas como nosotros mismos queramos para recorrer ese camino y para compartirlo con alguien lo que te llevara a la última pregunta ¿ Con quién ? Y es que para alcanzar el éxito todos los días debemos conocer todos los aspectos de nosotros bueno o malos pero simplemente nuestros, para así definir de acuerdo a nuestros sentimientos limites e ideales, de acuerdo a nuestro ser, a nuestros intereses, para conocernos y aceptarnos, como somos, con limites, capacidades, defectos, tenemos que aprender a vivir y desarrollar los elementos suficientes para asegurar lo que tenemos y lo que no. Y así de esta manera Bucay nos propone el amarnos a nosotros mismos y el reconocernos frágiles pero capaces de hacer y llegar a lo que él llama una autodependencia, lo que significa “ … establecer que nos soy autosuficiente ni omnipotente, que me sé vulnerable y que no siempre consigo todo lo que quiero ; pero siempre estoy a cargo de mí … ”. Que importante resulta este nuevo concepto que propone Bucay, en el que nos invita a reconocernos capaces de vivir sin depender, en muchos aspectos, de los demás, aceptando que muchas veces necesitamos de los demás para vivir, sin embargo, somos nosotros los que seremos los que tengan la última palabra, somos nosotros quienes tenemos el control de nosotros mismos y con ello podemos alcanzar ese éxito que tanto buscamos y que no es otra cosa que el aprendizaje diario de todas las vivencias y que podremos llamarle éxito en la medida en que sea para nosotros un logro, el sabernos reconocer todos los días, que somos humanos y que esto que vivo hoy yo puedo controlarlo hasta cierto punto, y también puede estar fuera de mis manos, pero es un éxito para mí el entender precisamente eso, que controlo y a la vez está fuera de mi control y por ello puedo “ disfrutar ” de esta situación que estoy viviendo, buena o mala, pero disfrutable.[pic 3]

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (5 Kb) pdf (119 Kb) docx (423 Kb)
Leer 3 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com