Más Allá De Un No

En nuestro diario vivir podemos observar como el 90% de nuestro tiempo es utilizado para negociar, ya sea en el hogar con nuestros familiares o saliendo de casa para ir tomar nuestro transporte o con nuestros compañeros al hacer un trabajo en grupo.

Dentro de las habilidades que tengamos para negociar encontraremos las puertas para llegar al éxito, ya que la negociación es el principal proceso para llegar al mismo.

Según William Ury, la clave para tener una negociación satisfactoria es poner en práctica las tres etapas necesarias que requiere la misma, estas son:

- La atención sobre las personas

- El movimiento hacia los problemas

- Intercambio de propuestas

Lo primero que tenemos que hacer para llegar a esto es escuchar activamente, tratar de comprender lo que la otra parte necesita; debemos lograr que crean que estamos interesados en sus ideas y expectativas sobre lo que se negocia. Si esto se llega a entender entonces tendremos grandes posibilidades de que ambas partes salgan ganando, ya que al escuchar atentamente las opiniones de los demás nos garantiza que las nuestras también serán escuchadas.

De otra manera, si no hacemos lo anteriormente mencionado y mostramos una actitud de oposición o que solo nosotros tenemos la razón de ganar pues esto no sucederá y no se llegara al punto de que ambos lados ganen, lo cual es la idea en mente.

Luego de haber escuchado lo que tiene para decir la otra parte debemos enfocarnos en el problema a negociar y reconocer el punto de vista del lado opuesto. Quizás a nosotros no nos parece lo que la otra parte piense pero el hacer que no nos importa es un grave error que se tiende a cometer, ya que si tratamos de ponernos del lado de ellos entonces será más fácil que puedan aceptar nuestras sugerencias.

Esto más que nada es tratar de hacer una buena relación de trabajo entre ambas partes para poder llegar a un mutuo acuerdo. Al hacer este tipo de relación podemos ser capaces de apoyar a la oposición cuando esta crea que las cosas se ven tan difíciles para llegar a un acuerdo.

Cuando ya hayamos escuchado el punto de vista opuesto y aceptado la propuesta entonces llega el momento de exponer nuestras ideas que ya tienen más probabilidades de ser aceptadas por el lado contrario.

Al momento de exponer estas ideas debemos ser bastante precavidos en la forma en que vamos a exponerlas, tenemos que hacer ver que ellos tienen razón según su experiencia y que nosotros también podemos tener razón según la nuestra.

La clave para presentar nuestro punto de vista con cualquier tipo de palabras que utilicemos está en presentarlo como algo que se quiere agregar a lo ya hablado y no que parezca que estamos en contra del punto de vista de la otra parte.

No debemos dudar en defender nuestros puntos, siempre

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