Problemas Socioculturales

El ser humano ha intentado darle paso al lenguaje por medio de infinidad de métodos y prácticas, pero lo curioso de esta capacidad del hombre es la manera como moldea y crea a favor de sí mismo, un lenguaje que connota rasgos característicos de una cultura que no permaneció en un pasado, por el contrario ha tenido su evolución y un medio por el cual se puede evidenciar cierto progreso se sitúa en el lenguaje.

Para poder comprender lo que este texto quiere abarcar debemos retomar la niñez, época cargada de anécdotas con una característica particular: “la fantasía”. Pero es desde este momento donde accionamos nuestra capacidad de relación con ese otro, empezando por un lenguaje puro, tranquilo y tímido, que nos suscita en un lugar de oyente y a su vez de mediador. ¿A cuántos de nosotros un buen cuento nos hacía pasar una linda noche? Su mundo fantástico rodeado de hadas y seres con súper poderes le empezaba a dar un sentido a nuestras vidas, cierto sentido que encaminaría nuestra forma de ver la vida hacia un mundo más amplio, con un lenguaje estructurado donde un “Mama” podría acompañarse gracias a la experiencia con un “Te amo”.

Pero ¿Qué sucede con el mundo interior que habita en cada pequeño? Como se mencionaba en el texto “la lucha por el significado” de Bruno Bettelheim, cada individuo crea su mundo, es dueño de sus pensamientos que directamente lo hacen acreedor de su lenguaje, un lenguaje subjetivo que le facilita razonar sobre cierto interrogante que a diario nos planteamos ¿qué sentido tiene mi vida?, una noción que solo se hallará por medio de nuestro lenguaje, proporcionándome entrar en el mundo de ese otro, y así comprender que ese sujeto no es solo su apariencia física, sino, por el contrario, lo que intenta transmitir lleva consigo ese toque afectivo, haciéndome alusivamente una invitación a su mundo particular.

Es preciso esclarecer que el cuento tiene una capacidad original de ser transmitido de manera oral en una forma tradicional de leyenda, mito etc., aún antes de que existiera la escritura. Teniendo cierta información seria totalmente verídico afirmar que el cuento participa como medio, por el cual el ser humano expresa momentos vitales de su existencia; tal es la excelencia del lenguaje inmerso en esta narración que cuenta con la facultad de ingresar al mundo de los estados esenciales del ser.

Retomando un poco lo inicial me cuestionó de la siguiente manera ¿cuál es el papel de nosotros como adultos en la búsqueda del sentido de la vida en estos pequeños? Todo tiene su inicio en un hogar, donde el acompañamiento de los seres mas cercanos instruyen aspectos morales que serán determinantes para que la criatura se contextualice en un espacio concebido a partir de múltiples significados.

Con lo anterior se puede determinar que la niñez no es solo una etapa más del desarrollo humano, diferente a esto, se convierte en la base fundamental donde la identificación hacía el otro, la experimentación de un mundo subjetivo, el surgimiento de interrogantes tales como: ¿quién soy yo?, le otorga al lenguaje la facultad de proporcionar al hombre un sentido a su vida con cierta dirección (¿hacia dónde?) y significado (¿Por qué? ¿Para qué?); que con experiencia se transforma en un elemento esencial del lenguaje intersubjetivo.

De igual manera, existen múltiples perspectivas que emanan distintos significados sobre la concepción de lenguaje, es así como nos vamos a centrar en un texto muy particular “Pragmática del lenguaje y lenguaje de la pragmática” de Jerome Bruner. Este escrito tal vez nos va aislar un poco del tema que se venia abordando, situándonos en un lenguaje estructurado que posee normas gramaticales y su contenido se sustenta significando y resignificando lo expresado por el ser humano. Se incursiona en un lenguaje donde se establece la importancia que cumple los símbolos y signos, siendo este una representación totalmente perceptible de la realidad, de igual forma, es necesario resaltar que el concepto de pragmática contiene el estudio de signos y sistemas en relación al uso semántico que los usuarios le conceden, pero entonces ¿qué es la pragmática del lenguaje? Desde una postura personal, se logra comprender como la disciplina de la lingüística que estudia los principios encargados de regular el lenguaje en la comunicación, es decir, va incluir tanto el empleo de un enunciado concreto por parte del hablante en una situación comunicativa como su interpretación por parte del destinario.

De cierto modo, esta pragmática del lenguaje nos posiciona en un contexto extraverbal siendo este el conjunto de circunstancias que se perciben directamente y que a su vez son conocidas por el hablante, es decir, todo aquello que física o culturalmente nos rodea.

Después de haber retomado un poco el lenguaje desde un carácter orientado a lo teórico, nos vemos obligados a entrar en un tema esencial para la vida de cualquier sujeto que coopera de manera sin igual, en esta ocasión, la autobiografía. Surge de la necesidad por recurrir aquellas singularidades que nos constituyen como seres humanos, especialmente, nos apoyamos en nuestro pasado que lleva consigo una historia de vida creada y narrada bajo un lenguaje cotidiano.

Por ende, la autobiografía contiene no solo mi forma de percibir la realidad, por el contrario, está influenciada por aquellas personas que han hecho parte de nuestro discurso, puesto en práctica cotidianamente. ¿Qué importancia guarda la autobiografía para el hombre? Mediante este relato que permite una vez más ratificar el hecho “nadie nos conoce mejor que nosotros mismos”, nos facilita ejecutar un ejercicio mediante el cual proyectamos un recuento amplio incluyendo nuestros logros y fracasos en un beneficio constante a nuestros lectores. Tal es el contenido subjetivo que

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