TRASTORNOS DEPRESIVOS EN NIÑOS Y ADOLECENTES

Trastorno Psicológico (incluir subclasificaciones)

Etiología

Criterios de Diagnóstico

Características principales

Posibles tratamientos

Originalmente, a este trastorno se le considera como personalidad pasivo-agresiva, pero en la actualidad se distinguen dos trastornos dependiendo de la edad del sujeto; los niños al no poder ser diagnosticados como un trastorno de personalidad, que se le diferencia de los adultos por un negativismo desafiante.

Clínicamente se pueden diferenciar 2 tipos de negativismo: el pasivo y el activo, en el primero el comportamiento del niño se caracteriza por lo que se ha llamado la huelga de brazos caídos, que es decir que el niño no realice las órdenes o peticion4es de los otros. Por otro lado los niños con negativismo activo se resisten en forma abierta a realizar a realizar las peticiones de otros, mostrando una actitud constante de enojo y resentimiento y desplegando conductas francamente hostiles y agresivas.

    En algunos niños, la sintomatología negativista puede aparecer como reacción a un accidente, enfermedad, después de un evento traumático, o  puede ser una defensa contra sentimiento de incapacidad, incompetencia, ansiedad, pérdida de autoestima o tendencias de sumisión. Barias teorías tratan de explicar la teoría como:

Teoría biológica – fisiológica,

Teoría cognitiva

Distorsiones cognitivas, deficiencia cognitiva, teoría psicodinámica o algunas influencias familiares.

Factores de riesgo en el niño es el temperamento como una característica constitucional es un factor que determina de manera importante el ajuste del niño en su ambiente y se definen tres constelaciones de temperamento en los bebes a saber:

1. Temperamento fácil: son aquellos en los que predomina una combinación de regularidad  biológica, adaptabilidad a lo nuevo y a los cambios y humor predominante positivo. Estos son muy fáciles de manejar.
2. Temperamento difícil: es lo opuesto del temperamento fácil, irregularidad biológica, rechazo de lo nuevo, pobre adaptabilidad al cambio, expresiones emocionales negativas frecuentes y d alta ansiedad. Estos niños son difíciles de manejar y cuando se les enfrenta a situaciones o a estímulos nuevos se estresan y se irritan.
3. Temperamento de reacción lenta:
4. En esta categoría se incluyó a los niños que presentaban las mismas características del temperamento difícil, p0ero a diferencia de ello, los niños con temperamento de reacción lenta se caracterizan por tener una adaptación gradual.

Clasificación del DSM IV-TR:

A. Un patrón de enfado/ irritabilidad, discusiones/actitud desafiante o vengativa que dura por lo menos seis meses, que se manifiesta por lo menos con cuatro síntomas de cualquiera de las categorías siguientes y que se exhibe durante la interacción por lo menos con un individuo que no sea un hermano.

Enfado/irritabilidad

 1. A menudo pierde la calma.

 2. A menudo está susceptible o se molesta con facilidad.

 3. A menudo está enfadado y resentido.

 Discusiones/actitud desafiante

 4. Discute a menudo con la autoridad o con los adultos, en el caso de los niños y los adolescentes.

 5. A menudo desafía activamente o rechaza satisfacer la petición por parte de figuras de autoridad o normas.

 6. A menudo molesta a los demás deliberadamente.

 7. A menudo culpa a los demás por sus errores o su mal comportamiento. Vengativo

 8. Ha sido rencoroso o vengativo por lo menos dos veces en los últimos seis meses

   Como lo establece el DSM IV –TR, el trastorno negativista desafiante es un trastorno recurrente de comportamiento  oposicionista, desafiante y desobediente, hostil dirigido a las figuras de autoridad, que persiste por lo menos durante 6 meses.

El trastorno negativista se manifiesta generalmente en el ámbito familiar, aunque con el tiempo puede hacerse extensivo a otras áreas como la escuela y las relaciones sociales. La agresión es un asunto focal del negativismo y se evidencia de maneras diversas en ambientes diferentes. Lavietes menciona que cuando la agresión se expresa indirecta o pasivamente los síntomas son:

• Terquedad persistente.
• Desobediencia
• Berrinches conducta provocativa sin violar los derechos básicos de los demás
• Rencor y venganza
• Resistencia al cambio
•  Manifestaciones de quejas continúas.
• Renuencia a acceder o a negociar con la autoridad.
• Rebeldía.
• Conducta molesta.
• Estado de ánimo irascible y enojoso.

Lo que ha resultado más efectivo es una combinación de psicoterapia individual para el niño y asesoría de los padres, el alterar el medio del niño puede ser útil