Tipos de Psicoterapia.

Tipos de Psicoterapia

El término psicoterapia proviene de dos  palabras griegas, por un lado “psiche” que quiere decir alma, espíritu o ser, y por otro lado “therapeutikos”, que se refiere a quien cuida o asiste a otra persona. Contextualizando  la psicoterapia; “es el tratamiento por medios psicológicos de problemas de naturaleza emocional en los cuales una persona entrenada y capacitada para esta función establece una relación profesional con el paciente con el propósito de 1) remover, modificar o retardar síntomas ya existentes, 2) de modificar patrones perturbadores de comportamiento, y 3) de promover un crecimiento y desarrollo positivo de personalidad”. (Kriz 1990). El anterior concepto enuncia que la psicoterapia es una herramienta muy importante para ayudar a solucionar problemas emocionales.

Los profesionales utilizan diferentes técnicas al realizar la psicoterapia, dependiendo del enfoque que se presente,  generalmente las herramientas utilizadas son el diálogo, darle importancia al paciente y el punto principal el poder brindar a partir de su conocimiento y experiencia soluciones eficientes a los problemas, obteniendo como resultados cambios en el paciente tanto internos como externos, es allí donde se han dado efectos psicoterapéuticos.

El propósito de los diferentes tipos de psicoterapia son  los mismos, el ayudar a recuperar estados de salud (objetivos), el poder vivir en armonía con la sociedad, cambiar la forma de ver la realidad, el que la persona se pueda desahogar al exteriorizar la situación, el desarrollar nuevas habilidades para enfrentar las dificultades.

Generalmente hay cuatro fases terapéuticas primarias: la relación, evaluación y establecimiento de metas,  selección - aplicación de estrategias y evaluación –conclusión. Estas fases ayudan a tener una idea clara de lo que sucede, que se desea lograr, y por supuesto el evaluar las acciones si están inculcando el cambio, o por el contrario hay que modificarlas.

Seguidamente nos enfocaremos  en los diferentes tipos de terapia que se pueden realizar desde la Psicología Clínica, estos son terapia individual, terapia de pareja, terapia familiar y la terapia grupal, el tipo de terapia se escogerá teniendo en cuenta la necesidad del paciente.

Terapia Individual (De tú a tú con los problemas)

La terapia Individual propone la relación con encuentros periódicos entre el paciente y el psicólogo, a través de un entorno adecuado de cordialidad, confianza y confidencialidad,  el paciente expresará su situación, sus sentimientos e inquietudes, con el objetivo de recibir ayuda profesional para superar el o los  conflictos.

Durante el proceso, el terapeuta guiara al paciente a que deduzca la situación,  reconozca sus dificultades y sus fortalezas para poder enfrentarlos, además se establecerán las metas y objetivos, el terapeuta ayudara a que el paciente adquiera un profundo conocimiento interior, ensaye nuevas formas de ser, formas que le den tranquilidad, estabilidad emocional, claridad mental, valoración de sus sentimientos y emociones.

El final del proceso terapéutico será exitoso cuando se evidencia los cambios emocionales, o se tenga la seguridad que el paciente cuenta con herramientas suficientes para enfrentar las situaciones.

La psicoterapia está indicada para situaciones de ansiedad, estrés, depresión, tristeza prolongada, obsesiones, problemas con el sueño, con la alimentación, dificultad en la sexualidad, situaciones de violencia, pérdida de confianza en sí mismo etc.

Terapia de Pareja (oportunidad para el “nosotros”)

Esta terapia está orientada a manejar las dificultades que pongan en riesgo la relación de pareja,  en el desarrollo de esta terapia se deben revisar aspectos importante como los hábitos, el dialogo, reforzar la confianza, realización de situaciones placenteras, resolución efectiva de conflictos.

El terapeuta de pareja mantiene una posición de neutralidad, escuchando a ambos miembros, teniendo en cuenta, y admitiendo por igual las opiniones de la pareja ante la situación.

El trabajo terapéutico, se desarrolla mediante el diálogo, durante las sesiones se buscaran diferentes alternativas para la solución de la situación.

La pareja debe acudir a terapia cuando existe un deterioro progresivo en la situación, se evidencia un círculo vicioso, dificultad sexual, cambia desfavorable en uno de los miembros, cuando el entorno está influyendo de forma negativa en la relación, por dificultades que aparecen en el trascurso de la relación y no han podido encontrar la solución.

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