Transferencia

TEMA:

TRANSFERENCIA (1)

AUTOR

Lie. Alfredo Luciardo

Buenas tardes. Vamos a tener dos clases para tratar el tema sobre TRANSFERENCIA. Es un tema que Uds. ya vieron el año pasado cuando trabajaron FANTASÍA INCONSCIENTE. Nos parecía interesante retomar algunas cuestiones sobre la transferencia, ya que a esta altura del año y dado el proceso de aprendizaje que Uds. están haciendo, con seguridad atraviesan por ciertas situaciones donde se juegan distintos efectos de la situación transferencial. En el inicio del año anunciamos los distintos campos o canchas en las que se iba a desarrollar el aprendizaje del ROL OBSERVADOR. Podríamos decir que el fenómeno de la transferencia es siempre uno pero se juega en estas distintas canchas produciendo diferentes efectos.

Me refiero a los distintos efectos que produce en cada uno de Uds. la situación transfe-rencial, por un lado, en el grupo de pertenencia de tercer año, por otro lado en el ROL específico de OBSERVADOR en los grupos de primero y segundo año y, por último, en los EQUIPOS DE COORDINACIÓN que conforman junto al coordinador de esos grupos; Siempre es complejo hablar de algunos conceptos que nacen y se desarrollan en el campo del PSICOANÁLISIS y no son específicos del ámbito de la PSICOLOGÍA SOCIAL Hay que ser muy cuidadosos para pensar los conceptos que pertenecen a un campo específico de la teoría y de la práctica y pensarlos en este campo que nos convoca de la PSICOLOGÍA SOCIAL

La transferencia, como concepto teórico y como fenómeno de la clínica, es absolutamente 'nuclear en el campo del Psicoanálisis. Podemos

decir que no existe situación analítica alguna si no es en relación al fenómeno de transferencia.

Vamos a intentar pensar qué es esta situación de transferencia en el ámbito del Psicoanálisis, para luego trasladar este concepto al campo de la PSICOLOGÍA SOCIAL e intentar comprender los efectos que produce en el ámbito del GRUPO OPERATIVO.

Pichón construye el ESQUEMA CONCEPTUAL, REFERENCIAL Y OPERATIVO (ECRO), que es nuestro punto de referencia y nuestra herramienta para el abordaje de la problemática grupal, apoyándose en dos pilares fundamentales: el PSICOANÁLISIS y el MATERIALISMO DIALÉCTICO.

De allí surge que nosotros, en esta PSICOLOGÍA SOCIAL, apelemos para comprender ciertos fenómenos a conceptos claves del PSICOANÁLISIS.

La cuestión a trabajar es que después del ECRO, en estos últimos años se ha pensado y producido mucho en relación al fenómeno de la transferencia en el marco del Psicoanálisis y también en relación al fenómeno transferencia! de los grupos, abriendo nuevos interrogantes.

El término TRANSFERENCIA evoca algo así como transporte, pero no exactamente un desplazamiento material de objetos, sino un desplazamiento de valores, de derechos, por ejemplo: transferencia de fondos o transferencia de propiedad, etc.

' Freud comienza a pensar el tema de la transferencia para explicar el fenómeno muy particular que se le presenta en los primeros años de su

•práctica clínica haciendo obs-táculo en el camino de la cura. A Freud las cosas nunca se le presentaron de otra ma-nera. Crea un saber que no existía previamente, que es el psicoanálisis y va alumbrando con el tiempo, a lo largo de 40 años de investigación, ciertos conceptos a medida que en la clínica algo impide el progreso de la cura. No debemos olvidar que el psicoanálisis es, básicamente, un método terapéutico.

Esta cuestión está situada muy temprano en la obra Freudiana, aunque la teorización de la transferencia le lleva muchos años y es reformulada y ampliada en varios escritos técnicos.

En esa relación tan particular entre analista y analizante, entre un sujeto que habla de su padecer y otro que escucha e interpreta ese padecimiento es que se produce una detención en las asociaciones del paciente. Freud dice:

"ESTA DETENCIÓN TIENE RELACIÓN CON LA FIGURA DEL ANALISTA"

Lo que se revive en la transferencia con éste "es la relación del sujeto con las figuras parentales, y especialmente la ambivalencia pulsional que caracteriza dicha relación".

Frente al decir del sujeto lo que el analista sabe es que en ese padecer que aparece como síntoma hay algo del orden de una representación reprimida de carácter inconsciente

Freud va a decir que allí, lo que se juega en el análisis, tienen que ver con una representación reprimida infantil de carácter sexual relacionada con las figuras parentales. Esa representación de la vida infantil cobra vigencia, se actualiza en el vínculo analítico. Ya veremos de qué manera y con qué características.

Hasta aquí, ¿qué nos dice ésto?. No nos dice mucho. ¿Porqué?. Porque la transferencia como situación donde algo del pasado vuelve a situarse en el presente, sin tener conocimiento de esto, es un mecanismo que se produce normalmente. Freud dice:

"LA TRANSFERENCIA, EN EL SENTIDO AMPLIO, SE PONE A JUGAR MUCHAS VECES: REPETIR ALGO DEL PASADO EN VÍNCULOS O SITUACIONES DEL PRESENTE, SIN SABER QUE SE ESTÁ REPITIENDO"

La transferencia, ésta que se da en el ámbito del análisis, es una situación del pasado con las características que mencionamos que es vivida con un intenso sentimiento de actualidad, que tiene relación con la figura del analista, que va a ser interpretada por éste y es allí donde se encuentra el núcleo de la dirección de la cura. Vamos a leer la definición de TRANSFERENCIA que dan LAPLANCHE y PONTALIS en el "DICCIONARIO DE PSICOANÁLISIS":

"Transferencia designa, en psicoanálisis, el proceso en virtud del cual los deseos inconscientes se actualizan sobre ciertos objetos dentro de un determinado tipo de relación establecida con ellos y de un modo especial dentro de la relación analítica".

Sigue así: "Se trata de una repetición de prototipos infantiles vivida con un marcado sentimiento de actualidad. Casi siempre lo que los psicoanalistas denominan transfe-rencia, sin otro calificativo, es la transferencia en la cura". "La transferencia se reconoce clásicamente como el terreno en el que se desarrolla la problemática de una cura psi-coanalítica, caracterizándose ésta por la instauración, modalidades, interpretación y re-solución de la transferencia". Esto último nos importa menos. Volvamos al comien-zo:"...el proceso en virtud del cual los deseos inconscientes se actualizan sobre ciertos objetos dentro de un determinado tipo de relación establecida con ellos y, de un modo especial, dentro de la relación analítica".

Podemos decir, en principio, lo que aparece como central en el fenómeno de transferencia es que hay allí dos instancias temporales en juego: el pasado y el presente. Si pensamos donde se despliega esta situación afirmamos que es siempre en el presente. Aquello del pasado va a presentarse en la situación presente del análisis. ¿De qué manera ?.

Con características muy especiales, enmascarado, encubierto y, básicamente, sin que esto sea consciente para el sujeto que está viviendo la situación. Lo que parece enton-ces es lo que Freud va a llamar una falsa conexión o un falso enlace entre aquello de allá y entonces y esta situación de la actualidad. Ya veremos más adelante que esto va a ocurrir también en el ámbito del grupo operativo es por eso que nos interesa el tema de la transferencia. Como dije antes, estas representaciones inconscientes reprimidas cobran actualidad en el marco del tratamiento pero no pueden ser reconocidas por el sujeto como proviniendo del pasado, sino como totalmente presente, como un presente total. Veamos porqué. ¿Qué es el recordar?. Es un ejercicio de la memoria, más allá de lo engañoso de ésta y que ocupa tanto espacio en la literatura (*).

(*) Borges, Proust y otros autores escribieron novelas y cuentos memorables en relación al recuerdo, la memoria y el olvido.

Los fragmentos que se recuperan al recordar, son fragmentos de una película propia que puede diferir con lo que pasó, que tiene deformaciones, pero que aún así puede reconocerse como formando parte del pasado. Uno dice: Yo recuerdo cuando iba a la casa de mi abuela..., etc. con plena conciencia que se trata de un recuerdo traído al presente pero que corresponde al pasado. Es exactamente esto lo que no sucede en la situación de la transferencia. Se juegan en la transferencia el pasado y el presente, pero ambas instancias quedan encubiertas. El pasado queda encubierto por el presente, porque no se lo recuerda y el presente aparece enmascarado sin posibilidad de discriminar aquello del pasado. La otra característica de la transferencia es que esta falsa conexión, este falso enlace tal como Freud lo denomina no sólo desconoce que esta situación corresponde al pasado y tiene que ver con otros personajes, sino que el monto de afecto que estaba ligado a aquella representación del pasado reaparece intacto. Es por esta característica que tanto en la situación de análisis como en el ámbito de los grupos, el amor y el odio, esta ambivalencia que nos constituye, sea vivida con

tal sentimiento de actualidad y con tal carga afectiva.

La representación se reprime y el afecto desligado de ella busca ligarse a otra representación. Esta puede ser el analista en la situación. De análisis o el coordinador en el grupo operativo.

Repito: el afecto, entonces, no sufre disvalor alguno, se presenta en la actualidad con la misma intensidad que en el pasado.

Decíamos que el recordar en el sentido más amplio de la palabra es la de recuperar ciertas escenas

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