ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

EL PROPÓSITO DE DIOS DETRÁS DE LOS PROBLEMAS


Enviado por   •  8 de Julio de 2013  •  1.382 Palabras (6 Páginas)  •  450 Visitas

Página 1 de 6

La vida es una oportunidad para resolver problemas. Los problemas que enfrentamos nos derrotan o nos desarrollan dependiendo de cómo respondamos a ellos. Solo tenemos dos opciones a escoger:

1. Podemos pretender ignorarlos 2. Reconocerlos, aprender y crecer

Enfrentar los problemas desde la segunda opción, nos permite ver a los problemas como oportunidades. Desafortunadamente, la mayoría de las personas fallan en ver como Dios desea utilizar esos problemas para bien de nosotros.

Las reacciones apresuradas, el abandono, los resentimientos, son algunas de nuestra respuestas a los problemas que detienen el proceso de crecimiento, en lugar de considerar el beneficio del problema. Cada adversidad la podemos cambiar o transformar de amargura a un beneficio, ¡La elección es nuestra!

En Biblia encontramos la siguiente recomendación: Entonces dijo así el Señor: Si vuelves, yo te restauraré, en mi presencia estarás; si apartas lo precioso de lo vil, serás mi portavoz. Que se vuelvan ellos a ti, pero tú no te vuelvas a ellos (Jeremías 15:19 LBLA).

Dios desea que aprendamos a sacar cosas preciosas, lo mejor de entre lo vil o difícil. Todo proceso de maduración requiere TIEMPO y Dios lo tiene. El tiempo en si mismo no hace madurar a nadie, solo las responsabilidades. Las adversidades nos enseñan mas que los éxitos. Las personas que ven los problemas como oportunidades, es porque han desarrollado las capacidades necesarias y porque han pagado un precio.

Veamos cinco formas en las que Dios usa los problemas en nuestras vidas.

1. Dios usa los problemas para darnos DIRECCIÓN. Algunas ocasiones Dios enciende un fuego debajo de nosotros para que continuemos en movimiento. Los problemas frecuentemente nos apuntan a una nueva dirección y nos motivan a cambiar, nos desafían a aprender nuevas habilidades, nos sacan de nuestra comodidad o “status quo”. Es Dios tratando de llamar nuestra atención.

En ocasiones es una situación dolorosa, para hacernos cambiar nuestro camino, ¿porqué sucede así? simplemente porque Dios nos ama. La Biblia dice: La maldad se cura con golpes y heridas; los golpes hacen sanar la conciencia (Proverbios 20:30 DHH). Cuando reconocemos a Dios en nuestros caminos, nuestro corazón será y estará agradecido. …los que aman a Dios TODAS las cosas ayudan a bien…. (Romanos 8:28 RV60).

2. Dios usa los problemas para INSPECCIONARNOS. Las personas somos como bolsas de Té. Si quieres saber que es lo que hay dentro de ellos, ¡Solo sumérgelos en agua caliente!

Dios quiere tratar con nuestro orgullo, y es bueno que entendamos que él hizo al hombre para su deleite y no a la inversa. ¿Ha probado Dios tu fe con algún problema? ¿Qué es lo que revelan los problemas acerca de nosotros? La Biblia dice: Tened por sumo gozo, hermanos míos, el que os halléis en diversas pruebas, sabiendo que la prueba de vuestra fe produce paciencia, y que la paciencia ha de tener su perfecto resultado, para que seáis perfectos y completos, sin que os falte nada (Santiago 1:2-4 LBLA).

Cuando no actuamos con integridad, tarde o temprano se revertirá el engaño. ¿Quién aprende en la teoría? Lo cierto es que nadie, es en las pruebas y a través de las pruebas donde crecemos. Así que recuerda, cada problema y adversidad es una oportunidad para triunfar y ser vencedor.

3. Dios usa los problemas para CORREGIRNOS. Algunas lecciones solo las aprenderemos a través del dolor y los fracasos. Es como aquel niño que le dicen sus padres que no toque el horno caliente, y este lo hace y sufre las consecuencias de la desobediencia.

Algunas veces aprendemos el valor de algo solo al perderlo, como la salud, el dinero, las relaciones entre otras cosas. Una lección en este punto es aprender a valorar a las personas que pensamos están en nuestra contra. ¿Puedes creer que muchas de éstas personas son un instrumento divino para tu crecimiento? La Biblia dice: Bueno es para mí ser afligido, para que aprenda tus estatutos. Mejor es para mí la ley de tu boca que millares de piezas de oro y de plata. (Salmo 119:71-72 LBLA).

El hierro con hierro se afila, y un hombre aguza a otro hombre (Proverbios 27:17 LBLA). Esta verdad también aplica a los que estamos casados. Si estás casado, ¿sabias

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (8.3 Kb)  
Leer 5 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com