Exegesis Mateo 1

LA IGLESIA PRIMITIVA – PERÍODO HISTÓRICO I

Autor: Luvin Pérez Bohórquez

C.I.: 20.860.854

“Después Bernabé siguió hasta Tarso para buscar a Saulo. Cuando lo encontró, lo llevó de regreso a Antioquía. Los dos se quedaron allí con la iglesia durante todo un año, enseñando a grandes multitudes. (Fue en Antioquía donde, por primera vez, a los creyentes [discípulos en griego] los llamaron «cristianos») – Libro de los Hechos de los Apóstoles, Capítulo 11, versículos 25 y 26.

“El cristianismo (del griego Χριστός, Christós, Cristo, literalmente 'ungido') es una religión abrahámica monoteísta basada en la vida y enseñanzas atribuidas a Jesús de Nazaret, presentadas en el canon bíblico y otras escrituras del Nuevo Testamento. Los cristianos creen que Jesús es el hijo de Dios, así como el Mesías (o Cristo) profetizado en el Antiguo Testamento, que murió para la redención de los pecados del género humano, y que resucitó tres días después de su muerte.” – Wikipedia la enciclopedia libre

El Cristianismo tiene una historia extensa y compleja, por lo cual tomando como base la obra “Bosquejo de la historia de la Iglesia” por el autor Justo L. González (1995) se pretende realizar un sencillo ensayo didáctico con enfoques dedicados a la Iglesia Antigua y el Imperio Cristiano, buscando realizar un aporte literario sencillo y fácil de entender, a fin de obtener la atención y comprensión de este gran e intensos periodos donde la Iglesia pasó por duros momentos, con el propósito de hacer llegar el mensaje de salvación del nuevo pacto de Dios, el evangelio, dado por su Hijo unigénito (Juan 3:16) Jesucristo, cordero sacrificado (Juan 1:29), profeta (He 1:1-3), gran sumo sacerdote (He4:14), autor y consumador de la fe (He 12:2).

Este trabajo no pretende alcanzar una conclusión doctrinal, ni tocar temas referentes a aspectos teológicos, doctrinas, reformas, profecías, o temas de alcance personal; Se tiene por objetivo la narración comentada de este periodo histórico de la Iglesia Cristiana.

LA IGLESIA ANTIGUA O PRIMITIVA

(Alrededor del Año 33 d.C – año 313 d.C)

La Iglesia antigua según lo relatado en el libro de los Hechos 1:1-9 en orden cronológico inicio su rumbo aproximadamente en el año 33 d.C, desde el día de Pentecostés (del griego Πεντηκοστή que significa quincuagésimo día) festividad del pueblo judío que desarrolla el quincuagésimo día después de la pascua, anunciando el fin de esta; anteriormente a estos acontecimientos según el calendario festivo, anterior a esto el Señor había resucitado al tercer día pasada su muerte conforme a lo dicho por Él mismo (ver: Juan 2:13-22; Mt 21:12-13; Mr 11:15-18; Lc 19:45-46).

El Señor estuvo enseñándole a sus discípulos por cuarenta días, luego ascendió a los cielos culminando sus enseñanzas sobre el reino de Dios, para luego diez días mas tarde enviar al consolador de la promesa, el Espíritu Santo el día que se celebraba el Pentecostés y luego el primer discurso de Pedro (Hechos 2) inicia el periodo de la Iglesia Antigua. (Todo sucedió en un total de 50 días después de la resurrección del Señor).

Para este tiempo la práctica predominante en Israel era el Judaísmo, el cual defendían celosamente aunque ya no era la misma doctrina que había sido plantada en el Antiguo Testamento pues había sido dividida por conflictos del pasado, donde mas de 300 años antes de Cristo Alejandro magno había establecido un Imperio (desde Grecia hasta Egipto y parte de la India). De modo que se habían formado 3 clases de judíos para el momento, los cuales eran los hebreos o puros, helenistas o judíos~griegos y los prosélitos, los cuales eran de sangre extranjera que luego de abandonar sus prácticas pecaminosas e idolatras se disponen a sujetarse a la Ley judaica. Aparte de esto ya los mismos judíos se habían sometido a posturas diferentes, fracturando la doctrina original, entre estas resaltan los zelotes, los fariseos, los saduceos y los esenios.

Estos grupos religiosos se diferenciaban en las interpretaciones de las profecías y la ley, también la manera en la que se realizaban los cultos y sus posiciones políticas con el Imperio Romano, el cual sometía al Pueblo de Israel.

Por muchos años se intentó mezclar el cristianismo con otras prácticas religiosas e incluso imponer normativas legales, pero al ser esto rechazado por los discípulos terminaba el asunto en disputas, luchas, acusaciones, persecuciones, prisiones

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