IDENTIDAD AMIGONIANA

IDENTIDAD AMIGONIANA

En medio de la constante búsqueda de un significado de la existencia del hombre, surgen continuamente respuestas positivas y otras no tanto, a cerca de por qué estamos en este mundo y cuál es nuestro papel dentro de una sociedad, en la que encontramos diferentes comportamientos y maneras de pensar, pues bien, en concordancia con lo que dice la biblia en Lucas 6:45 “ El hombre bueno, del buen tesoro de su corazón produce lo bueno, pero el hombre inicuo produce lo que es inicuo de su tesoro inicuo, porque de la abundancia del corazón habla la boca”. Si se toma como referencia las enseñanzas sagradas de este libro sagrado que para muchos hace parte de nuestro día a día, se convertiría así en un manual de conducta, sabríamos realmente cual es nuestro papel en la sociedad que por mas paradigmas de orden social, cultural, religioso y económico que existan es ahora el elemento existente de convivencia.

Cuando hablamos de un ser llamado “ Luis Amigo”, estamos hablando de un ejemplo de vida, que a pesar de vivir en épocas de revolución, su misericordia, el respeto por los seres humanos y su humildad; son enseñanzas de vida. Y ahora que nos encontramos en proceso de formación en una academia que promueve la enseñanza sobre Dios y el hombre, los principios morales, las buenas costumbres y la ética del bien, es preciso acogernos a estas enseñanzas y lograr ser cada día mejores personas.

El ser humano pasa por etapas de formación y en cada etapa, es necesaria una orientación espiritual encaminada a ver en el otro sin importar la raza, la clase social, el sexo o religión una igualdad, donde la palabra “AMOR” tome el sentido verdadero y completo; donde cada vez seamos más humanos, esto es, cada día más “AMIGONIANOS”

Existe una pregunta en la que es necesario detenerse y pensar ¿Qué clase de personas queremos realmente para nuestra sociedad? Existen entonces unos entornos en lo que constantemente interactuamos con los demás y es allí donde día a día, creamos una Identidad que nos hace diferentes y únicos en el mundo.

La familia como núcleo central de amor, educación y respeto; es la fuente donde nacen todos los valores, es allí donde nos enseñan a ver el mundo desde lo humano, buscar el beneficio del otro y la felicidad del otro; amar al otro desde todos los ámbitos; exaltando las bondades de cada ser humano y ayudando sin ningún tipo de contraprestación.

El amor es el mandamiento que nos impulsa a la aceptación incondicional del otro, este es realmente el espíritu amigoniano; pues Luis Amigo a través de su pedagogía manifiesta que solo creyendo en el otro lograremos adelantar la vida espiritual y alcanzaremos la justicia divina.

La autonomía se manifiesta en el pensamiento la opinión y la acción, cuando el sujeto es dueño de

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