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Monografía “La justificacion”


Enviado por   •  25 de Octubre de 2016  •  Monografías  •  4.154 Palabras (17 Páginas)  •  393 Visitas

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Seminário Teológico Presbiteriano

José Manuel Ibáñez Guzmán

Monografía

“La justificacion”

Alumno: Luis Serrano Huaitiao

Asignatura: Teologia Sistematica III

Docente: Vladimir pacheco

24 de Junio de 2016


Antes de iniciar el tema en sí necesitamos entender los conceptos de justificación antes de la reforma. En los tiempos de Pablo ya la justificación era algo que no se aceptaba tan fácilmente, en aquel tiempo, de hecho a Pablo lo tildaban de antinomista[1].En los tiempos de Pablo, los judios veian el evangelio como una nueva ley. Sin embargo los padres de la Iglesia utilizaban los terminos de Pablo, donde los terminos “gracia” y “fe” eran muy comunes en sus escritos como en las liturgias que ellos realizaban. Ya en la Edad Media siguio confundiéndose la justificación con la santificación, la iglesia de Roma en el concilio de Trento señala  que la justificacion es “apenas la remision de los pecados, tambien es santificacion y la renovacion del hombre interior por medio del recibiento voluntario de la gracia y de los dones”[2]. La justificacion para la iglesia de Romana es por tanto un hecho de Dios por el cual el no solamente perdona la culpa del pecados y lo absuelve de sus castigo eterno, sino tambien la regenera y la renueva internamente. Esta doctrina de la justificacion fue tomando erroneamente una forma, la idea de que el hombre se justifica, sobre la base de sus propias buenas obras. El confundir la justificacion con la santificacion los eruditos diferenciaban en un punto, donde algunos señalaban que la justificacion es un acto instantaneo de Dios y otros señalaban que es un proceso. El los Canones y decretos del concilio de Trento podemos ver en el capitulo XVI, Canon IX lo siguiente: “Si alguno dice que por medio  de la fe sola. Queda justificado eñ impio en forma tal como para que se entienda que ninguna cosa mas se requiere, en la que él coopere para obtener la gracia de la justificacion, y que tampoco se necesita en manera alguna que él esté reáradp y dispuesto por medio el movimiento de su misma voluntad: sea anatema”. Y en el Canon XXIV habla del proceso de la justificacion: “Si alguno dice que la justicia recibida no se conserva y se aumenta también delante de Dios mediante las buenas obras; sino que las mendcionadas obras son nada más los frutos y señales de la justificación alcanzada, pero no la causa de aquel aumento: sea anatema.”

La doctrina de la justificación en la Reforma fue un punto esencial con Martin Lutero cuando envuelto por las doctrinas Romanista se da cuenta del error de confundirla con la santificación, sino mas bien le da un sentido mas legal y explicando que es un acto libre y por gracia de Dios por el cuel Él nos perdona y nos acepta como personas justo ante su presencia, que esta justicia se encuntra en la justicia de Cristo, nuestro Redentor recibida totalmente por fe siendo un acto instantaneo y completa, negando la justificacion progresiva de los de Roma. Los reformadores negaron que la Justificacion signifique hacer justo, o bueno, o santo u honrado. La justificacion no hace la funcion de la regeneracion ni de la santificacion. En otras palabras “la justificacion es sencillamente una declaracion o pronunciamiento  tocante a la relacion de la persona con la ley que él, el juez, tienen que administrar”[3]

Calvino señala lo siguiente: “Nosotros explicamos a la justificación simplemente como una aceptación por la cual Dios nos recibe en Su favor y nos estima como personas justas; y decimos que ella consiste en la remisión [o perdón] de los pecados y la imputación de la justicia de Cristo... La justificación, por lo tanto, no es otra cosa que una absolución de culpabilidad de aquel que fue acusado, como si su inocencia hubiese sido probada. Ya que Dios, por lo tanto, nos justifica por la mediación de Cristo, Él nos exculpa, no por un reconocimiento de nuestra inocencia personal, sino por una imputación de justicia; de manera que, quienes somos injustos en nosotros mismos, somos considerados como justos en Cristo" (Juan Calvino, 1559).

Antes de finalizar estos conceptos de “justificacion” antes y despues de la Reforma protestante, debo pronunciar otros conceptos “post – reforma” tomadas de la sistematica de Berkhof. Concepto de Osiander: que queriendo revivir la iglesia Luterana tomando el concepto de justificacion de la iglesia catolicarromano, pero con una diferencia. La justifica que nos justifica es la justicia eterna de Dios el Padre, que es impartida dentron de nosotros por Jesucristo, negando la justificacion imputada a la justicia vicaria de Cristo[4]. El concepto Arminiano señala que Cristo no dio plena satisfaccion a la justicia de Dios, sin embargo ofrecio una vervadera propiciacion por el pecado, la cual fue recibida conforme de parte de Dios y que esta nos sirve para el perdon de los pecados y así justificar al pecador.[5]

Concepto Legal.

En el Antiguo Testamento , el termino hebreo para “justificacion” es Hitsdik, que significa declarar judicialmente que el estado de uno está en armonia con las demanda de la ley[6], este termino tiene un significado totalmente forense o legal. Este concepto fue cambiado por los romanista por un concepto moral “hacer recto o justo”. En el Nuevo Testamento tenemos el verbo dikaio-o, que significa  declarar justa a una persona. Este concepto pablo lo utiliza de forma soteriologica. Es declarar juridicamente que las demandas de la ley como condicion para vida están totalmente  satisfechas con respecto  a una persona[7] . el termino forense queda claro en este sentido ya que no se puede encontrar otro sentido a la palabra y ademas muchas veces va en antitesis a la palabra condenacion en Rom. 8:33-34.

Podemos entender entonces que justificar quiere decir que absuelve al que estaba acusado, como si hubiera probado su inocencia, nos absuelve por la intercesion de Cristo, negando nuestros meritos, Pablo lo señala en su sermon “Por medio de Él se os anuncia perdon de pecados, y que tdo aquello de que por la ley de Moises no pudisteis ser jsutificados, en Él es justifiaco todo aquel que cree” (Hechos 14:38-39). Los simbolos reformados apuntan a un aspecto netamente legal con respecto a la “justificacion” El Catecismo de Westminster responde la pregunta ¿Qué es la justificacion?. Respuesta: “: la justificación es un acto de Dios de libre gracia hacia los pecadores, en el cual Él perdona todos sus pecados, acepta y considera justa a sus personas delante de Sus ojos; no por alguna cosa producida en ellos, o hecha por ellos, sino solamente por la perfecta obediencia y la completa satisfacción de Cristo, imputadas por Dios a ellos, y recibidas por la fe sola”. Podemos ver que incluye el perdon, pero incluye tambien una declaracion de que el creyente es justo ante la ley. Asi la justificacion es un cambio de estado por el cual uno, que siendo culpable ante Dios, por lo tanto bajo la sentencia condenatoria de su ley y merecedor de un apartamiento de la presencia de Dios, es recibido en su favor y se la un derecho a las bendiciones que Cristo ha adquirido para él, por su perfecta y plena satisfaccion. Podemos entonces entender como difiere de la santificacion. La santificacion es moral o experimental, la justificacion  es legal o judicial. . La santificación resulta de la operación del Espíritu en mí, la justificación está basada en lo que Cristo ha hecho por mí. Una es gradual y progresiva, la otra es instantánea e inmutable. Una admite grados, y nunca es perfecta en esta vida; la otra es completa y no admite adición. Una tiene que ver con mi estado, la otra tiene que ver con mi posición delante de Dios. La santificación produce una transformación del carácter, la justificación es un cambio de status [estado] legal: es un cambio desde la culpa y condenación al perdón y aceptación, y esto solamente por un acto de gracia de parte de Dios, fundado sobre la imputación de la justicia de Cristo, por medio del instrumento de la fe solamente. Aunque la justificación está totalmente diferenciada de la santificación, sin embargo la santificación siempre la acompaña.

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