Brecha Digital

La brecha digital, de género y la importancia de las nuevas tecnologías en el manejo de una empresa en Honduras

Cuando se habla de brecha digital, se refiere a la dificultad de acceso a la tecnología que pueden tener algunas personas; los motivos que la causan pueden ser muchos, por ejemplo, problemas económicos, conexiones digitales, puntos geográficos, situación política, género, aspectos socioculturales, edad de las personas, entre otros.

Al presentarse cualquiera de este tipo de obstáculos, una persona está sujeta a tener menos oportunidades, socavando las aspiraciones cuando compite con otras que si cuentan con un mayor conocimiento en el mundo tecnológico.

Hay un alto porcentaje de personas que se encuentran en esta brecha digital en América Latina, la CEPAL (CEPAL, 2013) en un informe presentado en 2012 mostraba cifras entre 7% a 46% de personas que no hacen uso de los medios digitales para llevar a cabo sus actividades laborales o educativas. Si bien es cierto, un porcentaje de la población cuenta con acceso a dispositivos móviles u otros medios electrónicos, esto no garantiza estén fuera de la brecha digital, porque, una cosa es tener la tecnología y otra aplicarla correctamente hasta el punto en el que se vuelve una herramienta indispensable en su diario vivir, y no solo para matar el tiempo.

Ahora bien, esta brecha digital se extiende a una brecha digital de género, es decir, las diferencias que existen en hombres y mujeres que tienen acceso a equipos informáticos y al uso que le pueden dar a los múltiples dispositivos electrónicos e internet; reflejando con esto una desigualdad en la sociedad, aún en pleno siglo XXI considerado un tiempo de modernización, igualdad, acceso a la información, etc.

Se ha realizo encuestas donde se refleja que el uso de aparatos electrónicos es utilizado en mayor medida por los hombres, esta brecha es marcada en tabletas, teléfonos celulares, etc. (INMUJER, 2008), lo que ha causado un mayor dominio de los hombres en este tema.

También, existen desigualdades que surgen dentro de una familia, en la educación formal, en los trabajos, esto crea un sesgo en cuanto al uso que puede dar una mujer a las tecnologías, es decir, paradigmas que las personas no superan, hacen más duro el camino de una mujer en cualquiera de los ámbitos en los que ella desee desenvolverse.

Por lo tanto, es tiempo superar esta brecha digital de género, ya que una mujer es parte activa en esta sociedad, aporta tanto a la misma, que en muchas ocasiones no reciben el mérito que les corresponde. Hablando digitalmente, una sociedad conectada puede maximizar su impacto en lo que realiza, tiene una ventaja competitiva, por el hecho de contar con este tipo de herramientas, entonces, ¿cuánto más no podría lograr una mujer si esta brecha se reduce significativamente? (INFOBAE, 2016)

Una mujer, tiene el mismo derecho que un hombre, de tratar de obtener mayor productividad en las actividades que realice, como ser optimizando su tiempo, acceso a los datos que le permitan obtener un mayor provecho en las distintas necesidades como ser información en educación o salud, productividad en el trabajo, etc.

Una forma de apoyar a reducir la brecha digital, sería, promover la creación de políticas de estado que ayuden en la capacitación de medios tecnológicos, reduciendo con esto el número de personas analfabetas digitalmente hablando, lo cual, realiza una inclusión de dichas personas, especialmente el género femenino, ayudándoles a desarrollar las habilidades que sean necesarias para el uso de la tecnología, adaptando esto, según las necesidades de quien así lo requiera, lo que finalmente se convierte en un derecho, integración social, empoderamiento, satisfacción personal, mayor comunicación, entre otros beneficios que ellas recibirán. (CEPAL, 2013)

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