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La educación de la sexualidad


Enviado por   •  7 de Noviembre de 2013  •  Ensayos  •  3.342 Palabras (14 Páginas)  •  236 Visitas

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CAPÍTULO I

EL PROBLEMA

Planteamiento del Problema

A nivel mundial es conocido que la educación de la sexualidad constituye un fenómeno social que posibilita la asimilación de los patrones históricos y culturales que circundan al individuo y que deben integrarse armónicamente al desarrollo de su personalidad; es por ello que no se puede ver desligada del contexto social, familiar y escolar, pues es precisamente en estos espacios donde se conforma, educa y evalúa la sexualidad dados los niveles de desempeño, interacción y comunicación que en ellos se establecen, todo ello como un premisa aceptada en todas partes del mundo por diferentes investigadores del tema, sobre todo en lo referente a las personas con diversidad funcional intelectual.

Es así como, el indetenible desarrollo de la sociedad mundial, el avance constante del conocimiento humano, la acumulación de experiencias valiosas en la actividad de hombres y mujeres y el consiguiente empuje de la ciencia y la técnica, han posibilitado una transformación de la cultura con respecto a la sexualidad en las personas con diversidad funcional.

Sin embargo, gracias a la crítica dirigida a los prejuicios represivos; estas realidades colocan a la educación ante una gran responsabilidad que es el de preparar a las nuevas generaciones para que puedan enfrentar con independencia las transformaciones que les impone el mundo contemporáneo y el vertiginoso desarrollo social con respecto a la sexualidad.

Además de este planteamiento general es necesario superar numerosas falsas creencias concretas sobre la sexualidad de las personas con diversidad funcional intelectual. Entre ellas se destacan las siguientes: Que son asexuadas, son como niños, también sexualmente, no resultan atractivas sexualmente para otras personas, no debe despertarse su interés sexual ya que son inocentes, la actividad sexual es para tener hijos, sólo los casados tienen derecho a la actividad sexual, en ningún caso conviene que formen pareja y menos aún que tengan hijos, las chicas con diversidad funcional intelectual no tienen intereses sexuales, entre otras.

Es indudable, que la vida sexual de las personas con diversidad funcional intelectual tienen una especificidad, bien en sí misma y bien por las condiciones en que pueden vivirla. Así cada diversidad funcional supone una cierta especificidad en la forma de vivir la sexualidad, cada persona y cada contexto familiar y social también. Por ello, que se puede decir sobre este tema que las personas con diversidad funcional tienen posibilidades y formas muy diferentes de vivir la sexualidad.

Por otro lado, los jóvenes y adolescentes con diversidad funcional intelectual, con frecuencia no tiene oportunidades para relacionarse con iguales en situaciones normalizadas, limitando su vida al contexto familiar y al contexto de un centro especial. Por ello las condiciones de socialización en general, y, sobre todo, sexual, son carenciales.

De hecho, algunos estudios reflejan que estos niños tienen menos juegos sexuales prepuberales de imitación, exploración, seducción, caricias, intentos de coito, otros. La explicación de este hecho parece ser fácil: tienen menos oportunidades de interactuar con los iguales, especialmente en situaciones en las que no estén vigilados. Es necesario decir en este sentido que muchos de ellos aprenden pronto que estos juegos no son deseados por los adultos.

De igual manera, se encuentra la sobreprotección de la familia, en donde por supuesto ésta con la mejor de las intenciones, suelen sobreproteger a estos hijos y minusvalorar sus posibilidades de relación. Dicha sobreprotección suele provocar un empobrecimiento del entorno y, lo que no es menos importante, un control mucho mayor de las conductas, especialmente las que se consideran peligrosas, como las sexuales.

Asimismo, la ausencia de espacios y tiempos privados íntimos, en los que estos jóvenes y adolescentes con diversidad funcional intelectual puedan tener determinadas conductas sexuales autoeróticas o con los iguales. Es decir, no solamente tienen un entorno pobre en el que son muy controlados, sino que carecen, en muchos casos, de tiempos y espacios de intimidad, con lo que su sexualidad, si lo es, debe ser pública, y con ellos sólo quedan dos posibilidades: la represión o el escándalo.

En este orden de ideas, en la sociedad actual ha cobrado fuerza la idea de que la sexualidad es parte inseparable de la personalidad y un hecho esencial en la vida del hombre, por lo que se considera como un aspecto más de la cultura humana, de ahí, la necesidad de que se considere parte del trabajo educativo como tantos otros aspectos de la cultura, en que se transmiten conocimientos, valores, actitudes, conductas, ya sea de manera consciente o no y tomando en consideración los objetivos de la educación dentro de ese contexto histórico.

Cabe destacar, que es desde la década de los 90 se le está otorgando un importante lugar a la sexualidad en el desarrollo de la personalidad, sobre esa base es que Castro, P. (2003), expresar que “la madurez en el desarrollo psicosexual se produce como formación motivacional rectora de la personalidad, que en unidad de lo afectivo y lo cognitivo, orienta y matiza emocionalmente el comportamiento en esta esfera”. (p/sn).

En consecuencia, se considera que el comportamiento humano cambia con la historia y en este sentido, las ideas, las costumbres y las leyes, en relación con los comportamientos sexuales, han cambiado mucho en los últimos 25 años. Así, se puede decir que en la actualidad, se aceptan discursos muy diferentes sobre la sexualidad y que ésta es parte de la vida privada de las personas y que cada quien puede pensar lo que quiera al respecto y hacer lo que le gusta si respeta los derechos de los demás, aquí se incluyen por supuesto a las personas con diversidad funcional intelectual.

En lo que respecta, a las libertades públicas y el reconocimiento de los derechos de los ciudadanos han dado lugar a actitudes más permisivas y a pautas de comportamiento muy variadas en este terreno. La sociedad civil ha ganado mucho en calidad de vida en este tema, a pesar de lo que digan los oscurantistas en la actualidad, sin dejar de lado los viejos o nuevos problemas que se plantean, como son el los malos tratos, vejaciones, crímenes contra las mujeres y hombres, violaciones, esta problemática refleja la vulnerabilidad de los jóvenes y adolescentes con diversidad funcional intelectual.

En Venezuela la situación antes descrita también está presente, sin embargo la integración social de las personas con diversidad funcional intelectual y la normalización de su vida en la sociedad, con los apoyos que resulten necesarios, representa una conquista política reciente que hay que reforzar y mejorar. En efecto, se replantea radicalmente toda la concepción sobre la vida de estas personas, el derecho a su expresión afectiva y sexual, al control de natalidad, a las relaciones de pareja, a la posibilidad de tener hijos o no tenerlos, se expresa ahora con mayor conocimiento de causa y con sustento legal.

En particular, hay que recordar los cambios en la política educativa y social para las personas con diversidad funcional intelectual, que han supuesto la Ley de Integración Social de las Personas con Discapacidad (2007) y la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (2009). Se trata de un hito histórico de enorme trascendencia para el futuro de las personas con diversidad funcional intelectual de sus familias.

Es oportuno señalar, que se debe apoyar y fortalecer a la familia con respecto a la educación de la sexualidad de los jóvenes y adolescentes con diversidad funcional intelectual, porque ningún cambio social, por positivo que sea, perdura por las buenas, y es por ello que en la historia de la educación de la sexualidad han predominado diversas tendencias, concepciones y enfoques que tienen que ver con el desarrollo histórico de los seres humanos, de la cultura, las concepciones generales sobre la educación, entre otros.

A partir de la segunda mitad del siglo XX, las cuestiones relacionadas con la educación de la sexualidad de los jóvenes y adolescentes con diversidad funcional intelectual, han tenido una mayor representatividad en el pensamiento científico, lo cual ha derivado en el desarrollo de numerosas investigaciones, lo que ha permitido ir enfrentando de una forma más humana todo lo relacionado con la sexualidad es este grupo de personas.

La situación antes planteada, también está presente en el estado Monagas, y resulta de gran interés y beneficio para los jóvenes y adolescentes con diversidad funcional intelectual abordar el tema de la sexualidad. Por otro lado, los docentes, padres y representantes de estas personas, presentan una gran incertidumbre y angustia de no saber qué hacer cuando sus hijos/as tienen inquietudes y manifestaciones sexuales. Esto motivado a que existe muchos tabúes y mitos al respecto, teniendo como consecuencia la desinformación e incapacidad del manejo de las situaciones presentadas en la vida de éstas personas. Toda esta situación aun y cuando ha habido grandes adelantos e investigaciones referentes al tema.

Sobre este particular, en la Escuela Primaria para la Diversidad Funcional Intelectual “Monagas” ubicada en el Municipio Maturín del Estado Monagas, está presente tal situación con los padres y representantes de los jóvenes y adolescentes con diversidad funcional intelectual. Donde se puede apreciar y vivenciar que los padres y representantes expresan mucha incertidumbre ante el tema, ya que cuando se presentan estas manifestaciones de índole sexual, ellos actúan de forma empírica, procurando sacarlos de la situación, desviándole su atención en otra cosa; pero sin saber realmente qué hacer, porque desconocen hasta dónde deben respetar lo biológico, psicológico y social de la sexualidad en las personas con diversidad funcional intelectual.

Asimismo, se ha observado en las y los educandos ciertas inquietudes, emociones y manifestaciones sexuales que los padres y representantes no han abordado de forma efectiva en el hogar, generándose en ellos niveles de angustia por la incertidumbre de no saber cómo atender esta situación ya que se debe considerar la madurez mental de la persona para poder reorientar éstas conductas.

Estas personas con diversidad funcional intelectual al igual que todas las demás, sienten las mismas manifestaciones sexuales, impulsos y curiosidades al respecto, así como emociones, que por lo general carecen del conocimiento adecuado para poder manejarlas y expresarlas satisfactoriamente. Sin embargo, lamentablemente los padres y representantes no han contado con las herramientas apropiadas para atender dichas situaciones y poder ayudar a sus hijos en prepararlos para obtener una madurez sexual satisfactoria y socialmente productiva, tomando en consideración su nivel de funcionamiento intelectual.

A muchas de estas personas se les niega información sexual que pueden entender y se las supone incapaces de tener cualquier tipo de relaciones sexuales y de pareja. Por ello no son informadas, no son educadas en un sentido positivo, sólo quedan recibiendo únicamente mensajes negativos sobre la sexualidad por parte de otras personas, medios televisivos y otros, que no le ofrecen o dan ayudas específicas a estos jóvenes y adolescentes con diversidad funcional intelectual. Por supuesto que todo esto les lleva con frecuencia a tener expectativas no realistas, especialmente en relación con la pareja, no teniendo la oportunidad de observar modelos cercanos que pudieran servirles.

En otras palabras, las limitaciones objetivas en las habilidades interpersonales y sociales de estos jóvenes y adolescentes con diversidad funcional intelectual, se ven acrecentadas por una falta de promoción de éstas, lo que los puede llevar a conductas afectivas y sexuales inadecuadas, por defecto o por exceso. Saber decir sí y decir no, presentar quejas, piropear, citarse y tantas otras habilidades interpersonales pueden estar limitadas. Pero, también pasan a constituirse en la población de mayor vulnerabilidad a los abusos, el acoso y la violación.

Se deduce entonces, que dada la falta de educación sexual y la dificultad mayor de estas personas para manejar con éxito estas informaciones, puede darse por seguro que si llegan a tener relaciones coitales tienen mucho más riesgo de embarazos no deseados y otros riesgos vinculados a la actividad sexual, si no se tienen prácticas seguras.

Al respecto, la educación sexual debería ser un aspecto importante en un currículo pertinente, pedagógico y funcional para estas personas y sus familias. Es necesario que los padres y representantes tengan el conocimiento y orientaciones socialmente adecuadas para atender situaciones de interés de los escolares respecto a la sexualidad, en ocasiones se han presentado eventos relevantes relacionados con: su identidad sexual, higiene y aseo personal, manejo de toallas sanitarias, masturbación, sentimientos y atracción hacia otra persona, roles del género, entre otros.

Considerando lo antes planteado, es que nace el propósito de esta investigación de desarrollar un conjunto de estrategias de orientación sexual dirigidas a los padres y representantes de jóvenes y adolescentes con diversidad funcional intelectual, con la finalidad de prepararlos pedagógicamente para conozcan, atiendan y orienten adecuadamente a sus hijos sobre la educación sexual. En donde se consideren aspectos como la salud, control de reproducción y embarazo, derecho a la sexualidad en todo su contexto, entre otros.

De esta forma, debido a la incidencia de estos acontecimientos, surge la necesidad de preparar a los padres y representantes en estrategias de educación sexual con las personas con diversidad funcional intelectual, creando estrategias de orientación sexual factibles en el manejo y guía de la sexualidad en éstas.

Sucede pues, que después de exponer la problemática presentada con esta población y sus padres y representantes, derivan algunas interrogantes estrechamente relacionadas con el objeto de estudio de la presente investigación: ¿Es posible desarrollar un conjunto de estrategias de orientación sexual dirigido a padres y representantes de jóvenes y adolescentes con diversidad funcional intelectual? ¿Cuáles estrategias de orientación sexual pudieran ser útiles para trabajar con los padres y representantes de jóvenes y adolescentes con diversidad funcional intelectual? ¿Realmente pueden asumir los padres y representantes la orientación sexual de los jóvenes y adolescentes con diversidad funcional intelectual? Estas interrogantes permitirán viabilizar el propósito y objetivos planteados en la presente investigación.

Objetivos de la Investigación

Objetivo General:

Desarrollar un conjunto de estrategias de orientación sexual dirigidas a los padres y representantes de jóvenes y adolescentes con diversidad funcional intelectual para favorecer la educación sexual de sus hijos/as en la Escuela Primaria Bolivariana para la Diversidad Funcional Intelectual “Monagas”.

Objetivos Específicos:

1. Determinar el conocimiento que poseen los padres y representantes con respecto a su responsabilidad como orientadores en la educación sexual de sus hijos/as.

2. Indagar entre los jóvenes y adolescentes con diversidad funcional intelectual si poseen conocimiento en cuanto al manejo de su sexualidad.

3. Proponer un conjunto de estrategias de orientación sexual dirigidas a los padres y representantes de jóvenes y adolescentes con diversidad funcional intelectual de la Escuela Primaria Bolivariana para la Diversidad Funcional Intelectual “Monagas”.

4. Ejecutar y evaluar un conjunto de estrategias de orientación sexual dirigidas a los padres y representantes de jóvenes y adolescentes con diversidad funcional intelectual de la Escuela Primaria Bolivariana para la Diversidad Funcional Intelectual “Monagas”.

Justificación de la Investigación

El propio desarrollo social ha hecho que se vea el proceso de educación de la sexualidad desde diferentes aristas y ello ha sido el resultado de la poca efectividad de las tendencias que le han antecedido, hoy se mira este proceso desde una concepción humanista, en la cual se plantea que el sujeto puede decidir el curso a seguir en su sexualidad. Esta concepción, centrada en el ser humano, trata de liberarlo de los estereotipos de la moral sexual anterior, y se asocia a procesos educativos participativos.

De igual manera, como respuesta a las limitaciones que se han presentado en la esfera de la preparación para la vida sexual, surge así un enfoque de carácter alternativo y participativo, consecuente con la concepción humanista crítica de la sexualidad y su educación. En donde dicho enfoque humanista crítico acerca de la sexualidad y los géneros representan en este sentido un marco de referencia para enfrentar estas problemáticas de la educación sexual: apuntando hacia la necesidad de que este proceso tenga un carácter alternativo, que respete la individualidad y ofrezca opciones muy variadas y ricas para vivir la sexualidad sin imponerlas de forma vertical; favorece las decisiones libres, pero a su vez considera responsablemente los problemas y necesidades de los otros y del contexto, y estimula el papel del ser humano como protagonista principal de su propia vida y educación.

Cabe considerar por otra parte, que al analizar las tendencias educativas en torno a la sexualidad de las personas con diversidad funcional intelectual que resultan de mayor interés por su influencia en la sociedad en general y en la educación en particular, se puede plantear que estas son la expresión de concepciones y acciones más o menos sistematizadas, que constituyen diferentes alternativas de cómo enfrentar el proceso educativo de la sexualidad y cómo hacerlo más efectivo.

Por otra parte, las actuales condiciones de desarrollo, imponen la necesidad de conducir el proceso de educación de la sexualidad sobre la base de la formación moral de las nuevas generaciones, donde se destaque el papel de la escuela, la familia y la comunidad en la orientación y formación de valores, acordes con la experiencia histórico cultural, incluyendo en todo este proceso la educación de sentimientos y la adquisición de aprendizajes básicos para una vida adulta independiente y responsable.

A este respecto, en el caso específico de las personas con diversidad funcional intelectual, resulta necesario emprender acciones que permitan organizar el sistema de influencias educativas que propicien la preparación y la educación de su sexualidad, pues existe el criterio de que es una asignatura pendiente en las familias y en las escuelas.

Así se ha verificado, que la educación de la sexualidad de los jóvenes y adolescentes con diversidad funcional intelectual, ha de cubrir todos los campos de la formación y preparación que guardan relación con la normatividad sociocultural y ética de la sexualidad humana, incluyendo la evolución psicosexual del autoerotismo, para ayudarlos a desarrollar actitudes sanas hacia ellos mismos y hacia los demás. Estos han de pasar por las mismas etapas formativas, aunque con un ritmo más lento, en correspondencia con la formación del resto de sus procesos intelectuales y emocionales.

Sucede pues, que la sexualidad de las personas con diversidad funcional intelectual no es diferente a la del resto de las personas, así su educación y orientación ha de basarse en los mismos principios. En el proceso interactivo con estas personas, en ocasiones la familia y demás personas que directamente se relacionan con ellos, ocultan todo lo relacionado con la sexualidad por miedo a excitar su interés, retardar las manifestaciones del instinto sexual, aminorar su angustia o eludir responsabilidades.

Ante lo expuesto, resulta necesario destacar que las personas con diversidad funcional intelectual, pueden lograr una autovaloración de su persona en diversas cualidades de su esfera psicosexual, una motivación consciente hacia la vida sexual, una representación concreta de modelos de comportamiento sexual y de ideales de pareja; en fin, una conciencia concreta de su identidad de género y de los roles que desempeña en diferentes situaciones.

Evidentemente, en atención a la problemática descrita en este proyecto, es que se justifica la presente investigación, que tiene como propósito fundamental desarrollar un conjunto de estrategias de orientación sexual dirigidas a los padres y representantes de jóvenes y adolescentes con diversidad funcional intelectual para favorecer la educación sexual de sus hijos/as de la Escuela Primaria Bolivariana para la Diversidad Funcional Intelectual “Monagas”.

En resumidas cuentas, los padres y representantes deben ser preparados y orientados para asumir la educación sexual de sus hijos/as, en donde prevalezca y se acepte el derecho de las personas con diversidad funcional intelectual al ejercicio de su sexualidad, y sobre esa base lo estimulen adecuadamente y conduzcan su desarrollo psicosexual.

Delimitación de la Investigación

Esta investigación se desarrollará en la Escuela Primaria Bolivariana para la Diversidad Funcional Intelectual “Monagas”, que se encuentra ubicada en la Avenida 6, de la Urbanización Los Guaritos V, al lado del Estadio “Félix Domingo Rivas”, la cual fue fundada en el 28 de abril de 1975, por iniciativa de los padres de niños con retardo mental, siendo ésta la institución pionera de la Educación Especial en el Estado Monagas. Actualmente esta escuela atiende una matrícula de 115 estudiantes con diversidad funcional intelectual y otras condiciones asociadas.

El desarrollo del presente estudio se concentrará en torno a los padres y representantes de los jóvenes y adolescentes con diversidad funcional intelectual, los cuales son elementos claves para delinear la realidad presente, tomando en consideración todos los elementos y sus consecuencias.

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