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Manipulación de la información y la pérdida de soberanía digital


Enviado por   •  18 de Julio de 2022  •  Ensayos  •  2.234 Palabras (9 Páginas)  •  24 Visitas

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Manipulación de la información y la pérdida de soberanía digital

Profesor/a:                                                                                                                          Estudiante:

Leila Martínez                                                                                                 Mariangeli Guayapero                                                                                                                                                                                                                                    28.651.038. IF-04

El Tigre, 14 de noviembre del 2021

     Hoy en día, en la era digital que vivimos, el acceso a la tecnología se ha convertido en un aspecto que se encuentra al alcance de gran parte de la población mundial, dado que la mayoría de personas tiene, de una forma u otra, acceso a algún dispositivo electrónico. Sin lugar a dudas, la revolución de la tecnología en la sociedad transformó diversas dinámicas sociales, volviéndolas, en su mayoría, más accesibles o manejables; una de estas siendo los medios por los cuales se transfiere la información. Nos encontramos en la era digital donde las tecnologías de la comunicación son un recurso del día a día.

     La manipulación de la información y las notificas falsas no son una problemática de la actualidad, es algo que empezó mucho antes de las redes sociales. Lo que se discute no es la existencia o no de noticias falsas, sino que el problema actual radica en la rapidez con la que estas se esparcen por los medios digitales. Los constantes avances tecnológicos condicionan la forma en la cual las  nuevas generaciones tienen acceso a la información y las noticias. Esta diferencia puede apreciarse en cómo personas del pasado recibían sus noticias y cómo estas se reciben ahora. Es muy diferente recibir mensajes a través de un telegrama (el cual lo más probable es que contuviera un mensaje breve debido a su costo y este te llegara en unas veinticuatro horas), que recibir un mensaje de texto el cual te llegará de forma inmediata o casi inmediata.

     Actualmente, debido a esta facilidad en transmitir información de un lado del mundo al otro, la propagación de noticias falsas es más común y frecuente que en el siglo pasado. La información ya no se limita a la entrega diaria o incluso semanal de un periódico, si no que estamos expuestos a cualquier tipo de información minuto a minuto. Esta sobrecarga provoca un problema que radica en la competitividad y forma en la que los periodistas nos presentan las noticias. En muchas ocasiones a ellos se les exige presentar nuevos titulares en distintas horas de un mismo día, esto, combinado con la gran cantidad de noticieros tanto digitales como tradicionales que existen, produce una competencia en ser el primero que publique la noticia y se lleve la mayor retención de audiencia.

     Esta rapidez ocasiona un pobre trabajo de investigación y poca contrastación de las fuentes, esto muchas veces se desencadena en una tergiversación de lo que en un principio se quería transmitir. Problemáticas como esta están presentes y son impulsadas por los avances que existen hoy en día en los medios de comunicación.

     Estamos expuestos todo el día a distintas informaciones las cuales provienen de sitios como las propagandas televisivas, anuncios en aplicaciones móviles, noticieros de veinticuatro horas, imágenes y videos ilustrativos en cualquier red social, etc. Es tanta la información que muchas veces las personas pasamos por alto el buscar más allá de un titular en un periódico y decidimos quedarnos con la primera información que se nos presenta. Gracias a esto se cree que a pesar de ser una generación que tiene acceso a cualquier tipo de fuente informativa de manera inmediata, también somos una de las más desinformadas, debido al crecimiento del porcentaje de personas que creen en noticias falsas, las cuales luego no son verificadas.

     Por medio de esta distracción masiva puede ocurrir un tipo de manipulación, y es aquella en la que se busca hacer pasar desapercibido problemas graves que están ocurriendo, ocultándolas bajo toneladas de noticias de baja importancia. Se busca colocar un titular que llame la atención del público común para evitar que se fijen en noticias más trágicas, provocando que estas tengan poca o nula repercusión.

     En diversas ocasiones se ha observado la fragilidad de los medios de comunicación hoy día. Las propagandas políticas ya no son algo que se limiten a los periódicos o a la televisión, sino que han trascendido a las películas, series, novelas o cualquier otro medio de entretenimiento. Esto lo podemos observar en como muchas veces se busca dar un mensaje político sin que el espectador se dé cuenta. Con frecuencia creemos que estamos al tanto de este problema o nos vemos incapaces de caer en algo así, pero no es tan fácil de solucionar ni de evitar. Esto no es algo que nos afecte de manera inmediata, sino que su efectividad se encuentra en la repetición de la información que se nos pretende hacer creer, ya que esto tiene la peculiaridad de que poco a poco cambia nuestra manera de pensar, como una semilla que se queda implantada en nuestra mente. Esta es una de las diversas de formas por las cuales se puede manipular a las grandes masas de personas en esta era en la que nos encontramos.

     La manipulación digital podemos encontrarla además en la censura de las redes sociales, la cual se ha demostrado que ha sucedido con cierta frecuencia. Por ejemplo, las personas que tienen el control de las redes sociales a su vez tienen el poder de censurar cuentas o discursos que no estén de acuerdo con los suyos y darle más promoción a los que ellos creen correctos, lo cual es una total manipulación, ya que se crea una imagen negativa a aquello que no entra en sus intereses y se favorece aquellos que sí. Se han presenciado acciones similares en programas televisivos, donde sí se tocan temas comprometedores o de los cuales no debería hablarse por uno u otro motivo, simplemente se corta la escena o se interrumpe a la persona que está dando esa información.

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